Fenomenal obra maestra del genial Hitchcock, intrigante y obsesiva al mismo tiempo. Repleta de escenas memorables, con excelentes interpretaciones, una fotografía impecable y una extraordinaria banda sonora, esta película permanecerá siempre como una de las grandes obras maestras del séptimo arte y para mi la mejor del gran Hitchcock. Imprescindible e inolvidable.

Esta película es pura diversión, una maravilla que en su día fue considerada como una de las mejores películas de entonces. La verdad no entiendo que a alguien le pueda aburrir, ya que esta película resume perfectamente la principal finalidad del cine, entretener. Un clásico indiscutible del séptimo arte y una de las mejores películas del genial Buster Keaton, que contiene algunos de los mejores gags de toda su filmografía.

He de decir que aunque la interpretación del actor protagonista no me guste especialmente (tampoco me disgusta), según mi opinión se trata de una película más que notable, con unos personajes genialmente interpretados (especialmente Ella Raines), y muy divertida a lo largo de todo su metraje. Para mi es una de las mejores comedias de Preston Sturges y un buen ejemplo de la comedia clásica americana.

Una obra maestra con mayúsculas, con una tensión y una atmósfera tan absorbente y claustrofóbica que no permite ni un segundo de distracción. Yo la he visto hace poco y puedo asegurar que la tensión que se respiraba en la película era tal que había momentos en los que sentía que se me iba a salir el corazón. Sin ningún tipo de duda una de las cumbres del cine francés y una película absolutamente genial.

Impresionante película de Sergio Leone. Después de verla recientemente (la vi hace ya tiempo y no la recordaba bien) entiendo por qué está considerada la obra maestra de Leone (junto con Hasta que llegó su hora), ya que se trata de una filigrana irresistible, al igual que Por un puñado de dólares y La muerte tenía un precio, pero con esta película el director consigue una madurez y una perfección que solo alcanzan los grandes maestros. Una película incomprendida en su día pero que hoy permanece como una de las grandes obras maestras del género. Geniales interpretaciones las de Eastwood, Wallach y Cleef. La banda sonora de Morricone es impecable y alucinante, aunque prefiero las de Hasta que llegó su hora y Érase una vez en América. Si tuviera que destacar solo una escena seguramente sería la de Elli Wallach en el cementerio hacia el final de la película: sin palabras.
En definitiva, se trata de una obra maestra resultado de un perfeccionista como fue Sergio Leone.