Bueno, para empezar llamarla "miniserie" cuando son 10 capítulos es una "rara definición". Claro que comparando con las interminables y generalmente aburridas a partir del precisamente decimo capitulo, esta es un telediario.
Y eso precisamente es lo que me gusta de este tipo de series, no te haces viejo viendo capítulos a lo tonto, de muertos comiendo vivos (alguna vez se acabaran los vivos y ya no habrá mas comida, digo yo).
En fin, genialmente ambientada e interpretada, sin duda una de mis favoritas.
Por cierto que ya hay segunda parte. Ya veremos.

Fantástica, unos increíbles paisajes de una tierra que me encanta y de la que afortunadamente puedo presumir de conocer casi, casi al dedillo.
Cada poco tiempo me siento a verla sobre todo si llevo un tiempo sin visitar esa maravilla llamada Cantabria.
Hay que verla, si o si.

Absurda, ida total de olla de mi adorado Rideley Scott (le costara un mundo recuperar mi confianza) aunque a pesar de los pomposos anuncios, no solo es obra suya. A estas alturas hablarnos de Religión o Ciencia es absolutamente... patético. No perdáis el tiempo, no hay quien la soporte. De nada.

Ya sabia yo que con tanto botoncito verde, no debía verla, en fin por probar.
Que horror, al segundo capitulo ya era absolutamente insoportable. Han aprovechado el tirón de la buenísima Penny para hacer una absoluta consecución de borracheras y sexo. Madre mía, como están las mentes.
Ni se os ocurra asomaros.

Muy mala. Absolutamente incongruente. He desperdiciado 16 capítulos (8+8) y no encuentro sentido a nada, salvo un tipo con cuernos paseándose por el bosque. No se si habrá una tercera o mas, por lo menos para explicar un final digno. Pero pasare de verla seguro.