Lo mejor de esta película es su argumento, basado en al novela homónima de Juan Marsé. La adaptación al cine es correcta. Los actores están bien escogidos en el sentido de que no necesitan actuar mucho para interpretar su papel. El protagonista, Angel Alcázar, tiene pinta de charnego chulo, guaperas y melancólico, como exige la novela, aún sin mover un músculo. Pero en general la interpretación de los actores resulta un tanto plana. Maribel Martín, por ejemplo, tiene un película del mismo año, Los santos inocentes, en la que está mucho mejor. A destacar, sin embargo, la actuación de José Bódalo.

Habría dado una nota algunos puntos más baja a esta película como película para adultos, pero pienso que es una buena película para niños. Niños mayores de 7 años, porque hace falta algún conocimiento del mundo de los adultos para apreciar la comicidad de muchas escenas. No de todas, porque hay algunos gags muy físicos, como de cine mudo. Pero las escenas cómicas son, casi todas, demasiado previsibles para un adulto.

En resumen, una película de carcajadas los para niños y pasable para un adulto.

La película tiene algunos fallos de esos que se toleran en una producción para la pequeña pantalla, pero, hecha esa salvedad, me parece creíble, con etarras que van desde el bonachón jefe del comando hasta el sicario psicópata, muy bien interpretado por Mon Ceballos. ¿Los diálogos son a veces un poco tópicos? Pues sí, pero es que son etarras y policías, no personajes de Lope de Vega. Y a veces no son tan tópicos.

Me parece muy por encima de "Lobo" y "Operación ogro", dos películas sobre ETA que nunca llegué a creerme.

En esta película hay seis personajes: dos malos, un policía y tres chicos intrépidos. Los que hacen de malos y el policía son buenos actores, sobre todo Michael Douglas. Son parte de una película de cine negro, que es lo que pretendía hacer el director, Peter Hyams, según declaró en entrevista. Pero los que hacen de jóvenes intrépidos parecen unos chicos que estaban rodando una comedia romántica de campus universitario y que por alguna confusión han acabado en esta película. Además, no son buenos actores. El protagonista en particular, Jesse Metcalfe, es muy malo.

Los personajes centrales de la película son dos de los jóvenes intrépidos, un chico y una chica, que están sometidos a enormes tensiones. Pero además de sus limitaciones como actores, el guión apenas desarrolla esos personajes centrales. En cambio hay elementos más comerciales: una persecución de coches llevada a límites inverosímiles y una de dormitorio. El guión adolece de convencionalismos de serie de televisión: negros que hacen bromas sobre las pollas de los blancos y personajes que dicen "que te jodan" sin que venga mucho a cuento.

Pero, y esto salva a la película, la trama es muy buena. De manera que si estás dispuesto/a a ser indulgente con la actuación y el guión, vete a verla porque disfrutarás de una película de intriga.

La película no tiene defectos y sin embargo no es de 10. ¿Por qué? ¿Pueden llegar a apasionarnos seres de Nueva Inglaterra? Creo que no porque no parecen capaces de apasionarse ellos mismos. ¡Son tan educados! Es cierto que les vemos insultarse, fornicar y pegarse..., pero todo resulta inocuo. La tragedia, que es lo que hay en el fondo de esta historia, no es algo que toleren sus convenciones sociales. El mismo guión con familias gitanas sí que hubiese dado una película 10.