Es posible que nunca nadie pueda llevar a la pantalla una novela de Verne con tanta gracia y fidelidad. Esta "Vuelta al mundo..." es una espectáculo total, que nos devuelve la auténtica magia del cine. El impecable David Niven y el graciosísimo Cantinflas nos llevan a recorrer el mundo sorprendiéndonos permanentemente con imágenes y situaciones antológicas. Se nota la mística del rodaje impuesta por el productor Michael Todd: hay una multitud de estrellas que participa entregándose con ganas, como sabiendo que están haciendo historia en el cine. En esta cinta encontramos una síntesis de géneros: aventura, policial, misterio y exotismo. Una película bellísima, una auténtica obra de arte, no apta para los consumidores de meros efectos especiales.

Esta película de Zeffirelli es de una belleza apabullante en lo que hace a escenarios, vestuario y música; la banda sonora -inconseguible!!- de Donovan es maravillosa, plena del espíritu hippie que tan bien entronca con la orden franciscana. Los actores están bien dirigidos y los diálogos, mas allá del no siempre cuidado rigor histórico, son fieles a la escencia de la espiritualidad franciscana. Sin duda hubo mucho de esto en el descubrimiento de la fe por parte de Francisco y Clara. Después vino la domesticación de la orden por parte de Roma, las traiciones de algunos "hermanos"...una serie de miserias producidas en los últimos años del santo que mejor ilustran la película "Francesco" de Liliana Cavani. Personalmente recomiendo complementar ambos filmes para tener una visión mas acabada de la historia del poverello de Asís.

Oliver Stone lleva adelante este documental sobre Fidel Castro y la realidad cubana con inusual honestidad para alguien que ha conocido las mieles del éxito en su país, los EEUU. No hace falta aclarar que Cuba permanece bloqueda injustamente desde hace mas de 40 años y desde entonces su realidad viene siendo sometida a tergiversaciones de la prensa internacional. A lo largo de este film, boicoteado por distintas corporaciones que pretendieron evitar su distribución, Oliver Stone no hace mas que conversar con Fidel para poner el dedo en la llaga y preguntar sobre los temas mas polémicos de los últimos años. El interpelado responde sin embagues y con documentos en la mano. A quienes no conocen Cuba les puede asombrar los muchos logros del gobierno revolucionario (en educación, salud, alimentación) y el cariño con que los cubanos tratan a Castro (que envidiarían muchos presidentes del mundo capitalista). Mal que les pese a los detractores del socialismo, el film constituye un valiente alegato histórico y posee, además, la imperdible conferencia que Oliver Stone brindó en España.

Una bella historia italiana, en formato de comedia profunda, que promueve la risa y la reflexión del espectador sobre la cosas verdaderamente importantes de la vida. Soldini trazó una hermosa parábola fílmica, uniendo en la trama a personajes (bien reales) que están fuera de toda consideración del sistema capitalista y exitista en que vivimos. Un grupo de olvidados y "perdedores" -fabulosos Miglietta y Ganz, que actúan como para aplaudirlos de pié- coinciden en tiempo y lugar (Ah, Venecia!) para dar un nuevo sentido a sus existencias. Mas que una simple comedia, es un ejercicio de cine anarquizante. Para volver a verla.

Orfeo negro es una de las películas mas bellas y poéticas de la década del cincuenta. Es cierto que poco y nada quedó de la obra teatral de Vinicius de Moraes, pero de todas formas el resultado es sorprendente. Música, color, argumento entroncando tragedia griega y carnaval carioca. Todo está allí en su mejor nivel. Sólo nos queda abandonarnos a su melancólica poesía al ritmo del samba. Orfeo.