Una buena película de animación que recuerda a las clásicas del estudio Ghibli pero sin la desbordante imaginación de ésta lo que convierte a Mary y la Bruja de las Flores en una película más comprensible para el público no japonés. Una bonita historia, magia, personajes amables y malvados y seres curiosos. A los más pequeños les encantará.

Si uno mira atentamente la historia de esta película se da cuenta de que no tiene sentido, puede que en el libro las explicaciones para la actitud de la protagonista están bien desarrolladas pero en este película -desarrollada para la televisión- no ha sido así. Al final te encuentras todo gira en torno a una escritora de misterio de cierto éxito que sufre una terrible violación y que decide tomar justicia por su mano -¿y la policía?- y para darle un toque más oscuro ella está como un cencerro porque además de poder hablar con su GPS como si de una persona real se tratase, es capaz de ver a los personajes que ella misma ha creado.
Se deja ver pero nada más.

No tenia muy claro qué me iba a encontrar con esta película ahora que algunas producciones de animación entran en la clasificación de horrorosas, pero ha sido una más que grata sorpresa. La historia es simple: Es el año 1835 y tenemos a una raza de simpáticos animales, los flummels, que viven en una isla de las Galápagos. Es el año en que Charles Darwin visita estas islas y hay una oportunidad de que estos redondos seres sean descubiertos. El día del descubrimiento es el día en el que los fummels celebran su festival de las flores, y están todos contentos pero temen que los hermanos Op y Ed terminen haciendo un desastre como siempre. Y tiene razón. El desastre se presenta cuando un inesperado invitado acuático aparece. Para que no queden excluidos de la fiesta los hermanos deciden ir a buscar más flores para el festival y acaban descubriendo una peculiar flor que les lleva al pasado. Allí descubren que su isla explotó en pedazos el día del festival, que Charles Darwin nunca los descubrió y que ahora tienen una oportunidad de salvar a todos sus amigos y no terrminar extintos.

La historia tiene su toque de originalidad, principalmente porque los flummel son unos seres muy peculiares. No tenía muy claro que eso de ser redondos con un agujero en el centro fuera muy acertados, la evolución me grita no con letras mayúsculas, pero como protagonista de película animada ha acabado siendo un acierto porque da para muchas escenas graciosas además de proporcionar un buen método de transporte, ya que para moverse no corren -tienen las patas cortitas- sino que ruedan.

En cuanto a la historia me ha gustado todo el planteamiento, sí es previsible pero también cuenta con pequeños toques que te sorprenden y hacen que toda la experiencia de verla sea agradable. Y hay un poco de todo, conocemos un poco de historia con la trama de Charles Darwin, un poco de biología con los imposibles flummel, y poco de ecología con todo la subtrama de salvar a la isla y la triste desaparición de animales ahora extintos, y también está la comedia dramática de dos hermanos, Op es una auténtica aventurera que se lanza a realizar cualquier acción sin pensar en las consecuencias, y Ed que la sigue sabiendo que terminará siendo zarandeado de un lado al otro sin cuartel. Evidentemente cada uno aprenderá algo en esta aventura, pero el valor de que la familia es importante, además de los amigos es un punto que se remarca en esta película durante todo el metraje. Es también el elemento que marca la desaparición del doctor y las acciones de los animales que él rescató.

¡Nos hemos extinguido! es una película divertida pero tienes que darle tiempo a que madure porque los primeros minutos con una exuberante e hiperactiva Op pueden ser excesivos para una tranquila mente adulta. Pero en cuanto la trama coge ritmo, una vez en el presente, todo cambia. Op seguirá siendo Op pero en un contexto donde su hiperactividad tiene un sentido y una razón que es la que no exista un momento de pausa, que siempre esté pasando algo aunque este suponga que Ed se verá metido en un gran problema. En este sentido es una película muy dinámica y colorista.

Muy recomendada para los niños, seguro que se divertirán con esta película.

No puedo más que admirar a Chloë Grace Moretz por la sabiduría en elegir sus papeles, es de las pocas actrices a las que puedes imaginarte seguir trabajando en sus años de vejez. Además sus interpretaciones son siempre impecables.
Esta no es la primera película que muestra las escuelas para educar la orientación sexual que no sigue el esquema hombre-mujer así que no hay nada novedoso en la trama, pese a ello es una película notable por la manera en la que se retrata la vida de la protagonista y cómo debe lidiar, no sólo con el rechazo de su familia ante sus preferencias sexuales, sino también con sus propias dudas. Muy buenas interpretaciones y un final acorde con el tono general de la película.
Totalmente recomendable.

Esta película es una comedia que gira en torno a una pareja que se quiere casar. El único problema es que ella es un poco demasiado pobre y él un poco demasiado rico. Al final lo que tienes es un conjunto de gente muy pero muy rica que no sabe en qué gastar el dinero. Es divertida pero también muy insustancial.