A medio camino entre una de superheroes y una de ciencia ficción sin decantarse exactamente por ninguna de la dos opciones. De ritmo rápido y acción a raudales. No considero que sea una película imprescindible pero al menos consigue que tu mente esté entretenida durante una hora y media.

Empecemos por una historia que puede quizá funcionar en una novela veraniega, pero la forma en que la han llevado a la pantalla es mas propia de un grupo de aficionados que de auténticos profesionales de audiovisuales. Para empezar, el escaso carisma de su actriz protagonista, totalmente plana al expresar sus emociones, la sobreactuación de otros protagonistas, la pésima representación de diálogos, los efectos especiales propios de un grupo de adolescentes filmando un vídeo para la optativa de artística y ya por si fuera poco la música constante, repetitiva e irritante que no para ni un segundo y te taladra el cerebro. Mala no, malísima. Y ya, para colmo mezclan cátaros con templarios. De verdad, que no hay por donde cogerla.

Creo que hacía mucho tiempo que no veía algo tan absurdo y vergonzante. El guion podría haberlo escrito un niño de diez años, los actores son pésimos, los diálogos ridículos, los personajes mal dibujados y grotescos. No tiene ni pies ni cabeza. La mejor decisión es no verla, es tan mala que da mucha vergüenza ajena.

Visualmente impecable, con unos paisajes, fotografía y vestuario exquisitos. Sería otra historia de venganza ante las injusticias a no ser por estar enmarcada dentro de la cultura japonesa, ello es lo que, desde mi punto de vista, falla para el espectador occidental, no estamos acostumbrados a entender esta concepción del honor y la justicia tan diferente a la nuestra- A ratos lenta. a ratos entretenida, pienso que no es un film imprescindible, pero se deja ver.

A mi entender no cumple con las expectativas. El guión presenta lagunas, deberían no haber desvelados ciertos detalles tan pronto porque pierde interés. Aún así es entretenida