Si pensabas que el cine español era malo es que todavía no has visto "Caos Calmo", ridícula película italiana cuya única virtud es la de transmitir grandes dosis de vergüenza ajena. Tan aburrida, tan sosa, con tan poco contenido, tan mal interpretada y, para colmo, con un doblaje atroz, que uno siente la necesidad de desahogarse rociando la pantalla con gasolina y luego llamar a la OTAN para que realice un ataque selectivo en la residencia de este tal Grimaldi. Tal vez penseis que uno exagera, posiblemente, pero al precio que se han puesto las entradas del cine uno no está para bromas ni tomaduras de pelo.
Me asombran los comentarios de algunos críticos de renombre como Carlos Boyero por ejemplo, personajes que han perdido la decencia y son capaces de endulzar cualquier bazofia que llene su cuenta corriente.

Bueno, empezaré diciendo que los efectos especiales no me impresionan, sean explosiones en 007, sean las técnicas informáticas que se utilizan en la actualidad en el cine de animación, como es el caso de Wall-E, solo son aditivos que pueden endulzar el postre, todo depende de cuan dulce uno lo prefiera. Wall-E es un buen ejemplo de ello. Típica película de animación que no pasa de ser eso, Típica y nada más. La historia puede resumirse así: "Robot macho se enamora de robot hembra" punto final, ahí terminan la "originalidad". Visualmente atractiva, banda sonora mediocre, guión inexistente y poco más que añadir, ya que uno espera y espera a que suceda algo pero no, no sucede nada, y no sucede por una sencilla razón: el director no tiene nada que contar, tan solo mostrar a la humanidad los avances informáticos en el campo de la cinematografía. En definitiva absurdamente sobrevalorada.
PD. ¿Por qué misterioso motivo los individuos predispuestos a reir cualquier gracia, incluso cuando no hay razones para ello, deben sentarse en la butaca inmediatamente posterior a la mía?