Desconocido pero buen Thriller (rodado completamente fuera de los estudios MGM) de Andrew Stone, que cuenta lo que al principio es un chantaje perfecto a una aerolínea pero que se va desmoronando debido a que el jefe de la banda no ha contado con las debilidades humanas de sus secuaces. James Mason e Inger Stevens dan vida al matrimonio de los que se vale Rod Steiger (perfecto en su rol de líder de la banda sin escrúpulos, frío y meticuloso) para extorsionar a la compañía aérea. Angie Dickinson que por dinero hará lo que le mande el jefe, Neville Brand como un degenerado sexual y Jack Klugman completan la banda. (defenders of the faith).

Simpaticona comedia ochentera de Howard Zieff en la que cuatro trastornados se quedan abandonados en Nueva York por un incidente del médico que los cuída. El lider es Michael Keaton que está en su salsa haciendo de lunático peligroso, bien secudado por Peter Boyle que se cree el hijo de Dios, Christopher Lloyd que se cree un doctor y Stephen Furst del que las únicas palabras que salen de su boca son en términos de beisbol. Durante la trama se darán cuenta de que no están tan locos como piensan y de que echan de menos su vida anterior. (defenders of the faith).

Unica película dirigida por el productor (Howard W. Koch) de buenos films como "El mensajero del miedo" y "La extraña pareja" , para ello contó con un buen reparto de secundarios: Broderick Crawford perfecto en el papel de cabecilla sin escrúpulos del grupo de carcelarios, Charles Bronson que parecía que se presentaba al certamen de Mr. Universo, el avejentado Lon Chaney Jr, y Ralph Meeker apodado en la peli como Iceman. Con este plantel y un buen guión mitad Thriller mitad drama carcelario consigue que pasemos un buen rato delante de la tele. (defenders of the faith).

Este discreto western fue la última película de Lesley Selander, un director que siempre se mantuvo en la serie B. No hay nada destacable en este film, salvo el reparto con el que contó repleto de viejas glorias (Howard Keel, Yvonne De Carlo, John Ireland y Brian Donlevy) venidas a menos. La trama transcurre al final de la guerra de secesión estadounidense en una pequeña ciudad del estado de Arizona. (defenders of the faith).

Producción de la Disney para esta interesante historia pero de resultados no satisfactorios para el que escribe esta crítica. Las dos terceras partes de la película son interesantes pues te intriga saber quienes son verdaderamente esos feriantes llegados a la ciudad, pero en la última parte de la película todo se desarrolla de manera muy rápida con un final muy pobre. De los efectos especiales solo se pueden decir que son pasables. Una pena porque la historia daba para más.