A mis 9 años, esta fue la película que hizo que me enamorara del cine. La música, los enormes dinosaurios, todo parecía el doble de grande para mis ojos. La devoré como 20 veces sin cansarme. Al cabo del tiempo me la compré y volví a verla. Era como si volviera a tener 9 años. No había pasado el tiempo. Su frescura (frente a otras películas más recientes) estaba intacta y disfruté como cuando era niño. En mi cabeza empezaron a formarse calificativos, hasta que solo uno quedó finalista: auténtica obra maestra del género.

Ese es mi resumen de esta estupenda secuela de la no menos fantástica primera parte. Efectos impresionantes, aun a dia de hoy; actuaciones memorables (de verdad, a Schwarzenegger le viene este papel como anillo al dedo, Furlong se come a todo el reparto, Hamilton acomete una actuación brillante pareciendo que tiene el peso del mundo en sus espaldas y Patrick es uno de los mejores villanos del cine con una actuación milimétrica en sus gestos y movimientos); música memorable; ritmo brutal (nunca se te hace pesada por muchas veces que la veas); redonda de principio a fin; gran ejecución de un gran guión (la humana que se va volviendo máquina, la máquina que se va volviendo humana) y tremendamente emotiva (ahora se por que llorais, pero es algo que yo nunca podré hacer)
En definitiva: la mejor película deacción de la historia. He dicho.

Inmenso film de ciencia ficción y con un argumento, hoy ya muy manido, pero innovador en su época. Esta película no toma en ningún momento al espectador por tonto y lo avasalla con una trama digna de volver a ser revisada después del primer visionado. Motoko Kusanagi, la protagonista muestra más humanidad que la mayoría de los humanos de la película y realmente empatizas con ella y sientes lástima de su tragedia.
Memorable anime, no superado hasta la fecha.

Esta película de Shyamalan es una de las películas más bellas, emotivas y a la vez oscuras que he visto jamás. De verdad, el primer visionado es inolvidable, pues te deja pegado a la butaca y después te quedas de piedra al comprobar qué está pasando (aunque a aquellos que sean muy cerrados y no acepten cambios de rumbo alternativos, mejor que se abstengan). En posteriores visionados vas descubriendo ciertos matices, ciertos detalles que únicamente llevan a que te enamores perdidamente del film. Actuaciones, ecenarios como (perturbadores)protagonistas, música sublime o un pulso narrativo de auténtico genio, hacen de este thriller una experiencia inigualable.
Absolutamente recomendable para todos aquellos a los que los árboles no les impidan ver el bosque.

La verdad, me es difícil recordar una adaptación que me haya entusiasmado tanto en la butaca del cine. Básicamente, sigue paso a paso el relato (más bien libro corto) de King, excepto en su final, que se lo inventa por completo. La película posee una atmósfera opresiva como pocas. Opresiva e inquietante. Cuando empiezas a ver un atisbo de esperanza, esta se diluye por completo y te deja con un sabor de boca amargo. Y eso es de agradecer. Que venga alguien de la reputación del señor Darabont y te escupa en la cara con ese final desolador y provocativo. Que alguien se atreva a terminar su película de esta manera es de una valentía y un coraje envidiable, en el cine actual.
Con su paso desapercibido por crítica y público, este film de terror se convierte en uno de mis favoritos así como una obra de culto muy infravalorada.