Desparrame cinematográfico en todos los niveles. Chazelle hace gala de un talento extraordinario dirigiendo a un plantel actoral de lujo donde brillan y se nota que se lo han pasado bomba participando en la película.
El vestuario, dirección, producción, fotografía, coreografía, espectáculo visual.
Si Errol Flynn levantara la cabeza lloraría de emoción al ver a Brad Pitt imitándole. Estrellas reconocidas junto a quienes lo serán en el futuro dado su talento nos proporcionan un poco más de tres horas de cine con mayúsculas. Una película que quieres visionar otra vez porque siempre encuentras un motivo para hacerlo. En mi humilde opinión, la situaría como la película del año 2022. Viva el cine.

El cine nórdico nos presenta esta comedia negra con un desparrame de violencia explícita.
Dos estrellas consagradas como son Rapace y Hennie junto con unos secundarios de lujo, nos hacen pasar dos horas de auténtico deleite con esta historia pasada de vueltas, dónde la estupidez se mezcla con el instinto de supervivencia.
Algunos detalles de la película son poco creíbles, pero no se tienen en cuenta por que el producto final es muy bueno. Atención especial a las bolas de billar.

Que sea un remake innecesario de las películas " Supervivientes de los andes " y " Viven ", no desmerece su calidad técnica y realización de todo el equipo que ha participado en el mismo.
A destacar la labor de maquillaje de los actores y las interpretaciones en versión original, que en ocasiones es difícil de entender por que aunque tengamos el castellano como idioma común, el voseo y otras variedades dificultan un poco la comprensión de los diálogos entre los personajes.
J.A. Bayona consigue transmitir de modo feaciente la angustia que padecieron l@s ocupantes de ese vuelo, en medio de ese paisaje hostil.
El debate del canibalismo como un mal necesario para sobrevivir a una situación limite, no atiende a cuestiones éticas o morales.
Un personaje que no aparece en los títulos de crédito, la muerte, esta presente permanentemente en el film y esa presencia nos sobrecoge durante 144 minutos. ¿Por que sera?.

El personaje que nos presenta Scott en esta superproducción, no se parece en nada al que nos enseñaron en el colegio.
John Acton dijo, que el poder corrompe y el poder absoluto corrompe absolutamente.
Esto es lo que le paso a Napoleón, porque su megalomanía descontrolada terminó devorándole sin piedad.
El director se toma unas licencias históricas, que no se corresponden con las crónicas de la época haciendo hincapié en lo mejor que sabe hacer.
El vestuario, la escenografía, la fotografía y las batallas, en su conjunto, magistral.
Las interpretaciones de Phoenix y Kirby, extraordinarias, pero todo esto no termina de convencer, si se pierde la oportunidad de plasmar en la pantalla lo que realmente sígnificó para el pueblo francés, su emperador.
La inclusión de un oficial de raza africana en el entorno del emperador chirría, aunque esto en Hollywood les encantará, of course.
Lástima, aún así Vive la France.

Scorsese nos concede de nuevo una obra magistral de buen cine con mayúsculas.
Nos cuenta la historia, basada en una novela de David Grann, de los asesinatos acaecidos en el noreste de Oklahoma de varios miembros de la tribu Osage en la década de 1920.
Robert de Niro y L. di Caprio están excelentes como siempre en sus papeles, en una atmósfera asfixiante donde se respira un racismo subyacente, donde la ambición no tiene limites, si el propósito es el de despojar de la riqueza que unos poseen, ante la creencia de que los colonos blancos tienen mas derecho sobre esa tierra que los propios nativos.
La maldad, disfrazada de falsa caridad flota a lo largo de toda la película, diferenciando también a los personajes que como agentes de la ley, demuestran su bondad y honradez.
El vestuario, guion, fotografía, decoración y puesta en escena, sobresaliente.
La duración de la película, aunque larga, se ve con agrado por que la historia es mas que interesante ya que nos da a conocer otro oscuro episodio mas, de la presencia del hombre blanco en la conquista del oeste norteamericano.
. Yo apostaría por un oscar para Lyli Gladtone.
Atención a Brendan Fraser.