En la primera temporada la historia no está mal, con magníficas localizaciones y algunos buenos momentos que levantan un guion irregular y que prometían una segunda temporada que podría llegar a algo grande. Pero llegó la segunda temporada y la historia pierde toda la fuerza, los diálogos son una repetición de tonterías y clichés, y las interpretaciones son lamentables. Si se pudiese matar a los personajes con el mando a distancia, no quedaría más que uno. Solo se salva el gran Justin Theroux. Vaya desperdicio. Afortunadamente, la serie finaliza en la segunda temporada.

La idea y el casting son interesantes, pero la serie se desinfla rápidamente. La trama principal se desaprovecha y se centran demasiado en problemas familiares y personales tópicos y sin mucho interés. Un desperdicio.

Para ser la secuela de tren a Busan, no tiene nada que ver ni ninguna de las cosas positivas que tenía. Esta es una mezcla de tópicos sacados de películas como 1997 rescate en Nueva York, un poco de Mad Max, Waterworld, algunas de zombies cutres y escenas de acción con coches con efectos especiales de saldo, personajes planos y gracias sin ninguna gracia. No vale la pena perder el tiempo.

Vistos con buena predisposición los diez episodios de la primera temporada. Y con menos ganas la segunda temporada y fin por cancelación. Si te gusta la ciencia ficción, se ve, pero tras un comienzo aceptable la serie de deshincha totalmente. Los efectos especiales de la robot y alguna cosa en el último episodio son muy cutres, cosa que no ayuda demasiado, para eso que enseñen menos. Y aunque el casting no es malo, tampoco hay actuaciones valorables. Ya lo de Travis Fimmel es un caso aparte, empieza regular y ya después se desata con todos los tics que aplicaba a Ragnar Lodbrok en Vikings cuando ya estaba como una cabra. Muy fuera de lugar con un personaje absurdo. Resultado, una serie sin mayor historia que tras la primera temporada ya olía a cancelación. Una pena.

Nota: no entiendo las puntuaciones tann altas ni las críticas tan halagadoras.