Por primera vez dejo de ver a Tom Cruise con su insoportable sonrisa de falso guaperas. Y eso quiere decir 2 cosas, que la película está bien montada, dirigida y estructurada, y aunque me cueste reconocerlo, que don Top Gun borda el personaje, transmite lo que tiene que transmitir. Buena complementación con la actuación sobria de Jamie Fox. Entretenida y un final excelente, aunque poco creible.

Otra vez el tema de siempre, aquello que lleva machacando a generaciones de alemanes tras el nazismo. Pero desde una perspectiva nueva, desde un escenario común, tanto que da miedo. ¿Hemos aprendido? ¿Lo hemos superado? Otra gran película más de este cine alemán de los últimos años que está apabullando la industria.

Más de lo mismo, 40 años haciendo el mismo personaje, criticando lo mismo de siempre, ... para algunos, infumable, poco creativo y estancado... para mí, imprescindible. Nueva lección de humildad al ser humano, corrompido por el poder, los fanatismos, el odio a "los otros", las conductas irracionales y sin sentido... todo desde la perspectiva de un hombre tan lleno de defectos y miserias personales, que al menos tiene la decencia de no criticar gratuitamente al mundo que le rodea.Una lección contra aquellos que dirigen su vida con la certeza de que están en posesiçon de la razón absoluta.

Desmitificación del género, de los personajes arquetipos, de las situaciones heroicas.... una película sobre el oeste americano que nunca podria ser protagonizada por John Wayne, aunque parezca imposible. No es por ambición, ni por poder, ni por sed de venganza, ni por ningun impulso asesino... es porque las situaciones puntuales en nuestra vida nos fuerzan a hacerlo, y nada más. Merece la pena verla.

Al final, con sus cosas malas, resulta que el comunismo no era tan malo... Rápida, sarcástica, dramática, dura, crítica, a veces hiriente... un toque de atención a ambos sistemas políticos, descripción brutal del ahogo del comunismo y del desamparo (tapado de libertad) ante el capitalismo. Una película de las de antes, que te cuenta una historia como dios manda. La escena de la estatua de Lenin sobrevolando Berlín oriental, un icono de culto para la historia del cine. No se puede decir más en tan poco tiempo. Como el hueso de Kubrick.