Eric Caravaca nos propone, en su primera película como director, una historia dura de personajes en busca de amor y reconciliación, reconciliación con los demas y con uno mismo. Nos sorprende su dominio de la puesta en escena pero como buen actor no nos sorprende una estupenda dirección de actores. Los actores estan realmente bien, especialmente el chaval Vincent Rottiers, visto anteriormente en Los Diablos de Christophe Ruggia. Será un actor a tener en cuenta en los proximos años.
La película es un melodrama muy contenido, y frío, que no destaca por la originalidad de la propuesta pero sí por el buen hacer de todo el equipo tanto artítico como técnico.

Gianni Amelio es, película a película, el mejor director Italiano (de los que llegan a España, claro) y uno de los mejores directores del cine mundial.
Cine DURO, y punzante. La sabiduría y el tacto de Amelio permiten afrontar situaciones tan complejas con un respeto infinito y comprension. Todas las interpretaciones son de premio.

Woody consigue una pareja de personajes dignos de las comedias de Wilder. Woody y Sorvino irresistibles! La mejor manera de recuperar la sonrisa cuando tienes un día tonto.
Una de mis preferidas de Woody.

La mejor película de Dupeyron hasta la fecha.
Para mí, debió de ser la Palma de Oro de aquel año en el festival de Cannes.
Una historia estremecedora.
Cine en mayúsculas en todos los apartados.
Caravaca es definitivamente uno de los actores franceses más interesantes de los últimos años.
Vibrante.

Si tienes que ver solo 100 películas en tu vida, 3 de ellas tendrían que ser estas tres que forman esta trilogía fascinante, emocionante, e inolvidable.
IMPRESCINDIBLE.