You must be a loged user to know your affinity with criticobarcelona
Críticas ordenadas por utilidad
Movie added to list
Movie removed from list
An error occurred

4,5
1.122
4
24 de diciembre de 2024
24 de diciembre de 2024
11 de 16 usuarios han encontrado esta crítica útil
El hecho es que Amanece en Samaná es una película muy extraña. En todos los aspectos, parece ser una típica comedia española, pero no hay casi nada gracioso aquí. Absolutamente todo lo que ocurre, que en teoría debería relacionarse con la comedia, provoca perplejidad y el deseo de levantarse y salir para no ver más.
Sin embargo, en el momento en que la protagonista se despierta después de una noche divertida, durante la cual se golpeó la frente contra una palmera, ocurre una transición sorprendente. La protagonista no entiende por qué su esposo pasa tiempo con su amiga, mientras que el esposo de su amiga asegura ser su esposo. Ella percibe todo esto como una broma cruel y espera que todos confiesen que le están mintiendo.
Esta situación no hace que la película sea más divertida, pero ya no dan tantas ganas de abandonar la sala. La intriga sobre lo que está ocurriendo, quién es quién y qué está pasando mantiene el interés y uno quiere descubrir la verdad tanto como la protagonista.
Cuanto más avanza la trama, más se vuelve dramática y oscura. Para una comedia, no en el sentido griego clásico sino en el diario, los acentos están completamente mal distribuidos, por lo que la película no funciona, sino que provoca desconcierto. Pero si los acentos hubieran sido dirigidos en otra dirección, la película podría haberse convertido en un thriller dramático o incluso en una especie de película de terror, en la que la protagonista se encuentra atrapada en la tan popular ahora, la “multiverso”.
Es como si despertaras y descubrieras que tu abuela en realidad es tu hija, y que la sonriente mujer del café local resulta ser un conductor de autobús con bigote; en tus manos no tienes una taza de café con leche, sino un pase de transporte que no funciona. O que llegaste al cine para reír y en realidad no esbozaste una sonrisa, y te fuiste con el ánimo estropeado.
Sin embargo, en el momento en que la protagonista se despierta después de una noche divertida, durante la cual se golpeó la frente contra una palmera, ocurre una transición sorprendente. La protagonista no entiende por qué su esposo pasa tiempo con su amiga, mientras que el esposo de su amiga asegura ser su esposo. Ella percibe todo esto como una broma cruel y espera que todos confiesen que le están mintiendo.
Esta situación no hace que la película sea más divertida, pero ya no dan tantas ganas de abandonar la sala. La intriga sobre lo que está ocurriendo, quién es quién y qué está pasando mantiene el interés y uno quiere descubrir la verdad tanto como la protagonista.
Cuanto más avanza la trama, más se vuelve dramática y oscura. Para una comedia, no en el sentido griego clásico sino en el diario, los acentos están completamente mal distribuidos, por lo que la película no funciona, sino que provoca desconcierto. Pero si los acentos hubieran sido dirigidos en otra dirección, la película podría haberse convertido en un thriller dramático o incluso en una especie de película de terror, en la que la protagonista se encuentra atrapada en la tan popular ahora, la “multiverso”.
Es como si despertaras y descubrieras que tu abuela en realidad es tu hija, y que la sonriente mujer del café local resulta ser un conductor de autobús con bigote; en tus manos no tienes una taza de café con leche, sino un pase de transporte que no funciona. O que llegaste al cine para reír y en realidad no esbozaste una sonrisa, y te fuiste con el ánimo estropeado.

4,0
1.338
3
22 de diciembre de 2024
22 de diciembre de 2024
5 de 6 usuarios han encontrado esta crítica útil
No es la actividad más agradable comer comida insípida, hablar con una persona poco comunicativa o, por ejemplo, ver una comedia que no tiene gracia. Hotel Bitcoin es precisamente una de esas películas: teóricamente, tiene muchas situaciones que normalmente nos harían reír. Pero no funcionan, y con cada intento fallido de provocar la emoción deseada, la sensación de incomodidad solo crece.
En cuanto a la trama, seguimos a un grupo de cuatro amigos (que se autodenominan «fantásticos»), quienes se encuentran con una laptop que contiene 5 mil bitcoins. Lo único que tienen que hacer es pasar desapercibidos hasta el lunes. Para ello, se registran en un hotel y empiezan a hacer exactamente lo contrario de lo que deberían.
La historia está compuesta de elementos que nos resultan familiares, pero aun así, no está mal y tiene una buena dosis de irreverencia. El mecanismo de la trama es a veces tan absurdo que en cierto punto llega a ser interesante de ver. Ayuda también el hecho de que las actuaciones, en general, son bastante buenas.
Sin embargo, el problema principal e insalvable de la película es su tono poco convincente y sin fuerza. Si conoces a una persona que no sabe contar chistes pero lo intenta constantemente, y puedes reconocer las emociones que te provoca hablar con esa persona, entonces sabrás exactamente lo que sentirás al ver esta película.
En cuanto a la trama, seguimos a un grupo de cuatro amigos (que se autodenominan «fantásticos»), quienes se encuentran con una laptop que contiene 5 mil bitcoins. Lo único que tienen que hacer es pasar desapercibidos hasta el lunes. Para ello, se registran en un hotel y empiezan a hacer exactamente lo contrario de lo que deberían.
La historia está compuesta de elementos que nos resultan familiares, pero aun así, no está mal y tiene una buena dosis de irreverencia. El mecanismo de la trama es a veces tan absurdo que en cierto punto llega a ser interesante de ver. Ayuda también el hecho de que las actuaciones, en general, son bastante buenas.
Sin embargo, el problema principal e insalvable de la película es su tono poco convincente y sin fuerza. Si conoces a una persona que no sabe contar chistes pero lo intenta constantemente, y puedes reconocer las emociones que te provoca hablar con esa persona, entonces sabrás exactamente lo que sentirás al ver esta película.

3,5
1.437
2
22 de diciembre de 2024
22 de diciembre de 2024
5 de 6 usuarios han encontrado esta crítica útil
Planificad vuestra ruta como queráis, pero evitad la ESTACIÓN ROCAFORT. Con la estación de metro homónima están relacionadas algunas leyendas urbanas espeluznantes de Barcelona, pero el verdadero horror solo se experimenta viendo la película, y únicamente por el motivo de que es mala.
La trama gira en torno a Laura, una trabajadora del metro, a quien le asignan trabajar en la desafortunada estación. Los barceloneses deberían sentir disonancia cognitiva con solo mirar la estación: en la película no pertenece a la línea roja, sino a la amarilla, y no se entiende por qué no pudieron pintarla del color correcto.
Esta discrepancia de color juega una mala pasada más importante de lo que se podría pensar. Todos los detalles de la película comienzan a desmoronarse como una galleta reseca. Mientras Laura es perseguida por pesadillas, el espectador tiene la sensación de que ha llegado a la estación equivocada y se dirige a un destino incorrecto.
Obedeciendo a la ausencia de lógica, la película reúne una colección de clichés de género. El guion parece un borrador que se coló por accidente en la producción. Además, en lugar de utilizar el material evidente de las leyendas urbanas, la historia se ha reinventado hasta tal punto que su única característica aterradora es la calidad de la película.
Y mi consejo: absolutamente cualquier estación de metro de Barcelona en verano es adecuada para rodar una película de terror. Por ejemplo, sobre el hecho de que el tren se retrasa y tienes que quedarte en un calor insoportable unos minutos más interminables.
La trama gira en torno a Laura, una trabajadora del metro, a quien le asignan trabajar en la desafortunada estación. Los barceloneses deberían sentir disonancia cognitiva con solo mirar la estación: en la película no pertenece a la línea roja, sino a la amarilla, y no se entiende por qué no pudieron pintarla del color correcto.
Esta discrepancia de color juega una mala pasada más importante de lo que se podría pensar. Todos los detalles de la película comienzan a desmoronarse como una galleta reseca. Mientras Laura es perseguida por pesadillas, el espectador tiene la sensación de que ha llegado a la estación equivocada y se dirige a un destino incorrecto.
Obedeciendo a la ausencia de lógica, la película reúne una colección de clichés de género. El guion parece un borrador que se coló por accidente en la producción. Además, en lugar de utilizar el material evidente de las leyendas urbanas, la historia se ha reinventado hasta tal punto que su única característica aterradora es la calidad de la película.
Y mi consejo: absolutamente cualquier estación de metro de Barcelona en verano es adecuada para rodar una película de terror. Por ejemplo, sobre el hecho de que el tren se retrasa y tienes que quedarte en un calor insoportable unos minutos más interminables.

6,8
2.589
8
3 de diciembre de 2024
3 de diciembre de 2024
4 de 4 usuarios han encontrado esta crítica útil
En el nuevo filme de Andrea Arnold, la magia aparece y desaparece, solo para volver a surgir. Es como el vuelo de un pájaro: te eleva hacia lo alto, luego te deja caer en picada, para finalmente alzarte de nuevo justo antes de estrellarte contra el suelo.
La historia de una niña de 12 años que crece en circunstancias poco comunes (o muy comunes - depende de donde la ves) sigue una fórmula familiar. Esta fórmula no es completamente original, y el giro argumental que ocurre en cierto momento, tras un meticuloso desarrollo del conflicto, puede dejar algunas dudas. Sin embargo, la manera en que está concebida, filmada y actuada es un deleite para los sentidos. Y es un deleite raro, porque son pocos los autores capaces de contar una historia de esta forma.
La debutante Nykiya Adams, en el papel principal, está absolutamente brillante, tanto en su irritación con lo que la rodea como en esos momentos escasos en los que sonríe, haciendo que parezca que esa sonrisa está dirigida a ti, como si hubieras ganado su aprobación. Franz Rogowski, en el rol de Bird, también destaca.
Pero la verdadera magia inunda la pantalla cuando aparece Barry Keoghan. Él interpreta al padre de la protagonista, un hombre ocupado con los preparativos de su boda y con la tarea de extraer saliva alucinógena de un sapo especial. Su presencia es hipnótica, y en esta historia de realismo mágico, su actuación aporta un tipo de magia muy especial: una magia que se siente real.
La historia de una niña de 12 años que crece en circunstancias poco comunes (o muy comunes - depende de donde la ves) sigue una fórmula familiar. Esta fórmula no es completamente original, y el giro argumental que ocurre en cierto momento, tras un meticuloso desarrollo del conflicto, puede dejar algunas dudas. Sin embargo, la manera en que está concebida, filmada y actuada es un deleite para los sentidos. Y es un deleite raro, porque son pocos los autores capaces de contar una historia de esta forma.
La debutante Nykiya Adams, en el papel principal, está absolutamente brillante, tanto en su irritación con lo que la rodea como en esos momentos escasos en los que sonríe, haciendo que parezca que esa sonrisa está dirigida a ti, como si hubieras ganado su aprobación. Franz Rogowski, en el rol de Bird, también destaca.
Pero la verdadera magia inunda la pantalla cuando aparece Barry Keoghan. Él interpreta al padre de la protagonista, un hombre ocupado con los preparativos de su boda y con la tarea de extraer saliva alucinógena de un sapo especial. Su presencia es hipnótica, y en esta historia de realismo mágico, su actuación aporta un tipo de magia muy especial: una magia que se siente real.

7,0
21.662
6
22 de diciembre de 2024
22 de diciembre de 2024
8 de 13 usuarios han encontrado esta crítica útil
Es necesario tener una personalidad especial para hacerse pasar por alguien que no eres. Aunque todos hemos practicado el arte del disfraz en diferentes momentos de la vida, pasar 8 años dentro de una organización terrorista es un dominio por sí mismo.
La película ‘La infiltrada’ (dirigida por Arantxa Echevarria) cuenta la historia de una policía que logra infiltrarse en la banda terrorista ETA. Este thriller psicológico oscuro se vuelve fascinante no por los detalles de la operación encubierta, sino por el intento de entender cómo se siente una joven al aceptar participar en algo tan arriesgado. Aquí es donde la película ligeramente se desvía: sabemos tan poco sobre la protagonista que esta falta de información dificulta la percepción de su personaje como una persona real.
Afortunadamente, hay un gato en la película. A través de su presencia, la Infiltrada muestra su vulnerabilidad, y el espectador puede, al menos por un momento, identificarse con lo que la protagonista debería haber sido en la vida real y lo que debería haber sentido.
La película se vuelve dramáticamente más interesante en su parte final, cuando entra en escena un personaje interpretado por Diego Anido. Su confrontación con el personaje de Carolina Yuste (quien merece, por supuesto, un reconocimiento especial por su actuación) lleva la trama en una nueva dirección: el filme no solo alcanza su fase más tensa, sino que también introduce una comparación entre el terrorismo político y el terror entre géneros.
Y cuando en una escena se encuentran la Infiltrada, el personaje tóxico-masculino de Anido y el gato, la experiencia no podría ser mejor.
La película ‘La infiltrada’ (dirigida por Arantxa Echevarria) cuenta la historia de una policía que logra infiltrarse en la banda terrorista ETA. Este thriller psicológico oscuro se vuelve fascinante no por los detalles de la operación encubierta, sino por el intento de entender cómo se siente una joven al aceptar participar en algo tan arriesgado. Aquí es donde la película ligeramente se desvía: sabemos tan poco sobre la protagonista que esta falta de información dificulta la percepción de su personaje como una persona real.
Afortunadamente, hay un gato en la película. A través de su presencia, la Infiltrada muestra su vulnerabilidad, y el espectador puede, al menos por un momento, identificarse con lo que la protagonista debería haber sido en la vida real y lo que debería haber sentido.
La película se vuelve dramáticamente más interesante en su parte final, cuando entra en escena un personaje interpretado por Diego Anido. Su confrontación con el personaje de Carolina Yuste (quien merece, por supuesto, un reconocimiento especial por su actuación) lleva la trama en una nueva dirección: el filme no solo alcanza su fase más tensa, sino que también introduce una comparación entre el terrorismo político y el terror entre géneros.
Y cuando en una escena se encuentran la Infiltrada, el personaje tóxico-masculino de Anido y el gato, la experiencia no podría ser mejor.
Más sobre criticobarcelona
Cancelar
Limpiar
Aplicar
Filters & Sorts
You can change filter options and sorts from here