Entre un 5 y un 6. Mis peros a esta serie no van por el equilibrado reparto, ni tienen nada que ver con las quejas absurdas sobre inclusividad, sino que se refieren a cómo ciertos aspectos de la evolución de la trama (que detallo en la sección de spoilers) me han decepcionado. En conjunto, la serie va de más a menos.

Entre un 6 y un 7. Buena cinta de acción que amplía y pone sentido al universo de este nuevo Mad Max, detallando cómo funciona un mundo que, incluso en el borde del caos, ha encontrado un equilibrio.

La imaginería de Miller y el carisma de los actores principales hace el resto, y consigue enganchar con el personaje de la primera película.

Entre un 6 y un 7. Partiendo de su premisa inicial, explora todas sus posibilidades sin destacar, pero también sin hacerse cansina.

Teniendo en cuenta que últimamente Eastwood estaba algo flojo, es de lo más interesante que le hemos visto últimamente.

No entiendo muy bien qué pretende transmitir esta película. No es una comedia, pues las situaciones no hacen reír (son más bien incómodas). El mensaje podría ser "nunca vayas con un estadounidense de viaje, porque lo mismo es un imbécil y te toca aguantarlo todo el rato". No llega a ninguna conclusión clara. No hay catarsis. Tampoco se aprende especialmente sobre el holocausto, salvo el escaso rato que pasamos por un campo, y no dirá mucho a los que ya nos hemos informado por otras vías. Como mucho, sirve a modo de reflexión sobre lo idiota que se puede poner la gente con un viaje de turismo a zonas donde ha habido una catástrofe.

Se deja ver, pero no voy a recomendar que la veáis. Kieran Culkin, por supuesto lo más destacado de la película, hace un personaje tan llamativo como insoportable.

Rodrigo Cortés es un buen director. Le das una obra como "Love gets a room", y la lleva a las máximas posibilidades con los arreglos musicales, de ritmo o de escenografía. Pero como le ocurre a muchos artesanos, haría películas excelentes... si tuviera una historia que contar. "Escape" tiene una premisa original, y lleva su primera parte con cierto humor, que se continúa en la segunda con toques surrealistas. No obstante, detrás hay muy poco, como si director y guionista se hubiera convertido en el más cínico de los hombres y ya no creyera en nada de lo que está narrando más allá de aporatar detalles efectistas, cosa que se transmite.

Los actores están bien dirigidos, especialmente Anna Castillo (a quien se le nota espectacularmente cuando tiene detrás una buena dirección de actores), Toledo y Sacristán, y seguramente sea de los mejores papeles de Mario Casas (lo cual no es decir mucho, pero ahí está). Particularmente, a nivel de decorados, me encanta la biblioteca que utilizan para hacer de sala de juicios. Me gustaría saber cuál han utilizado.