"Noche de miedo" no da ningún miedo. Con eso queda casi todo dicho. Se trata de un remake lleno de tópicos del cine de suspense para adolescentes, aderezado de personajes flojos y diálogos aun peores. Eso si, una vez más nos encontramos con efectos especiales made in Hollywood.
Corría el año 85...Todavía recuerdo bien aquella carátula VHS del videoclub de la esquina. Aquella cara fantasmal rodeando la casa. Todo un misterio para un niño que soñaba con vivir aventuras como las de los Goonies.
Es este caso, si se hace honor al dicho de que cualquier tiempo pasado fué mejor.

Una buena idea que se queda solo en una nebulosa de lo que pudo haber sido y no fué.
Esta historia a cerca de un futuro incierto, y al parecer no muy lejano, bebe de las fuentes de Bonie & Clide y Robin Hood, pero no parece haberle sentado muy bien ese sorbo de agua.
No estamos revelando nada, al calificar el argumento como poco convincente y carente de sentido.
Una vez más, nos encontramos con personajes demasiado plásticos, carentes de magnetismo, y de la mínima química exigible para que el resultado final resulte satisfactorio para el espectador.

Película que hubiese ganado más enteros de no existir "El enigma de otro mundo". Si no nos remontamos a los 80, su predecesora "La Cosa" de John Carpenter, es muy superior en aspectos como la narrativa,el ritmo,personajes con más empaque, y no hablemos de la banda sonora, la cual consigue mantener el suspense en todo momento.
Por desgracia, no se puede decir lo mismo de este remake. Cuando aprenderán que el miedo se consigue ocultando a lo que se teme.
Buen trabajo, aunque innecesario en algunos momentos, en el taller de chapa y pintura de los efectos especiales.