Tenía muchas ganas de ver esta película después de 13 años desde la primera entrega y la verdad que la espera ha merecido muchísimo la pena. James Cameron lo ha vuelto hacer, crear una experiencia cinematográfica única, con paisajes asombrosos, llenos de belleza y magia, una banda sonara que los acompaña de manera sublime (a pesar de no tener a James Horner, se han ultilizado gran parte de sus composiciones de la primera entrega) y una historia que aunque pueda resultar un poco trillada en el cine, funciona bien como acompañamiento en este recorrido por Pandora, que al final es lo realmente maravilloso de esta película.

A pesar de las 3 horas de duración de la película, no se te hace en ningún momento aburrida o pesada, es verdad que hay en algunos momentos que tienes un poco de sensación de "deja vu" con la primera entrega ya que se desarrolla de una manera muy parecida, pero igualmente sigue resultando una maravilla descubrir el universo subacuático de Pandora. Quizá con la primera película todo nos resultó más sorprendente, al ser la primera vez que nos maravillamos con este mundo, pero gracias a la magnifica creatividad del creador y todo el arsenal de potentes animadores gráficos que hay detrás, sigue resultando extraordinario.

Por último, decir que se pueden ver muchos elementos o recursos que ya ha utilizado James Cameron en otras de sus películas (Titanic, Terminator...) pero que están muy bien encajados para desarrollar un acto final apoteósico que deja un final abierto para una tercera entrega, la cuál por supuesto estoy deseando ver.

A pesar de ser una película con buen ritmo y entretenida es demasiado predecible todo. La película va planteando una serie de situaciones que parece que se van sucediendo como desencadenante de episodios de mala suerte o de azar y que cada vez se van enredando más, sin embargo carece de profundidad suficiente como para mantenerte en tensión o como para esperar algo diferente de lo que al final ocurre.

En fin, película para pasar un buen rato y con actuaciones más que decentes, pero que desde mi punto de vista te deja un poco indiferente.

Esta es la típica película que pudo llegar a ser y no fue, desde luego la historia es muy interesante y está claro que el querer ahondar en los hechos previos que llevaron a estos tres psicópatas a hacer lo que hicieron es muy atrayente, pero el desarrollo está mal construido.

De primeras hay saltos temporales que no se entienden, tan pronto estás en un mes como poco antes de los acontecimientos y luego vuelta atrás, no sé muy bien con qué fin se hizo esto pero desde luego no funciona.

Por otro lado, creo que el creador de la película quiere meternos en el ambiente machista que envuelve a estos jóvenes en su colegio, pero acaba resultando caótico, nos presentan demasiados escenarios con muchos personajes y a veces se cuentan cosas poco trascendentes sobre ellos.

Por último, y por lo que he leído de este crimen, los asesinos tenían vínculos con la extrema derecha y eran defensores del fascismo, pues bien, esto apenas se percibe, creo que no se puede pasar por alto si de verdad quieres realizar una película que contextualice esta barbarie.

Lo único que me ha quedado claro de esta película es que el Sr. Shyamalan quería darle a su hija un papel para lucirse, por que el resto es confuso a más no poder, ¿Qué estamos viendo? ¿una película de acción-suspense? ¿un thriller psicológico que pretende ahondar en la mente de un asesino atormentado? ¿una comedia? Aún no lo tengo claro la verdad y creo que este ha sido el principal problema, la falta de coherencia en desarrollar un concepto de una manera lógica.

La película empieza bien, Josh Harnett de hecho me parece que se luce bastante como protagonista, te mantiene bastante intrigado hasta que llegas a un punto que todo se empieza a desmoronar y a caer en la absurdez, los comportamientos de los personajes son ridículos y haces que te plantees si el director te esta vacilando, yo desde luego me sentí así en un momento determinado de la película.

Como punto positivo diré que no es aburrida, sigue un buen ritmo todo el rato, y las actuaciones están bastante bien, de hecho si te la tomas a risa y aceptas lo inverosímil que es como parte del concepto que se quería crear, podrás llegar a disfrutarla más, aún así no recomendaría pagar una entrada de cine para verla, ahí está la auténtica trampa.

Esta miniserie ahonda en el caso judicial que llevaron a unas madres a luchar por la negligencia política tras la contaminación ocurrida en la zona industrial de su ciudad, pero más allá del caso judicial, te muestra la parte más emocional y personal de lo que vivieron estas madres, lo cuál es una acierto ya que el resto de la historia es bastante predecible.

Que el sistema político es corrupto, es una realidad que ya todos estamos cansados de ver, que en el juicio iban a intentar escabullirse para salir indemnes, pues también, y esto hace que, aunque la historia sea interesante, se llena de situaciones esperables que alargan la serie de una manera un poco lenta en determinadas ocasiones, no es aburrida, pero para mi el desarrollo ha sido demasiado pausado y obvio, sobre todo el último capítulo. Entiendo que es una historia real y la hayan querido retratar de una manera fiel y solemne sin demasiadas licencias creativas, pero en algunos momentos se me ha hecho un poco plana.

Las actuaciones de Whitakker y Wood son geniales y ver todo el drama que vivieron sus familias es la mejor parte de la serie, es por eso por lo que acaba siendo una serie agradable, que, sin llegar a ser apasionante por su predictibilidad, es lo suficientemente decente para verla en un fin de semana.