You must be a loged user to know your affinity with Mr_Miga
Críticas ordenadas por utilidad
Movie added to list
Movie removed from list
An error occurred

6,4
5.898
8
30 de diciembre de 2011
30 de diciembre de 2011
12 de 14 usuarios han encontrado esta crítica útil
Guantanamera es la última película dirigida por el cubano Tomás Gutiérrez Alea y la segunda en la que comparte dirección con Juan Carlos Tabío tras la premiada Fresa y chocolate. Se trata de una coproducción entre Cuba, España y Alemania. Se trata de una comedia negra que relata el traslado por carretera de un cadáver de un lugar a otro de la isla caribeña mediante un nuevo plan burocrático ideado y puesto en marcha por el marido de la sobrina de la fallecida, un funcionario del Estado, durante el “periodo especial”.
La cinta realiza una crítica al funcionamiento de la Administración del Estado durante unos años difíciles en los que la isla, tras la caída del Muro de Berlín, perdió a su principal socio y sostén de la economía, la Unión Soviética. Pero esta crítica al régimen tiene dos particularidades; por una parte, la lleva a cabo desde una posición de militancia revolucionaria y por otra parte, utiliza la sátira y el fino humor negro rememorando el estilo de Berlanga. Esto último fue reprobado posteriormente por el propio Fidel Castro, ya que consideró el tono cómico de la obra como falta de respeto al pueblo cubano, que tanto había sufrido durante esos años.
Además de ello, la película refleja los problemas cotidianos vividos durante aquellos años, como fue la escasez de combustible y de medios de transporte (que actualmente ha mejorado gracias al apoyo de Venezuela); y atiende a otras cuestiones como son la ineficacia de la burocracia, el exilio, la apertura al turismo o el mercado “paralelo” de productos básicos. No obstante, a la vez que muestra sus miserias, también reivindica las virtudes de la sociedad cubana en la búsqueda de la utopía socialista y muestra a sus ciudadanos como gente formada y educada (universitarios que incluso no tienen más remedio de ocupar puestos de trabajo inferiores) y a las mujeres como motor del cambio. Por último, realiza una fotografía impecable de la cultura cubana, su música (estupenda banda sonora), su gastronomía y sus creencias religiosas (leyenda Yoruba).
En resumen, se trata de una obra inteligente, bien dirigida y con diálogos memorables, muy recomendable para conocer un poco mejor Cuba, una bella isla con un pueblo heroico, que día tras día lucha por sobrevivir dignamente frente al asedio del imperio más poderoso.
La cinta realiza una crítica al funcionamiento de la Administración del Estado durante unos años difíciles en los que la isla, tras la caída del Muro de Berlín, perdió a su principal socio y sostén de la economía, la Unión Soviética. Pero esta crítica al régimen tiene dos particularidades; por una parte, la lleva a cabo desde una posición de militancia revolucionaria y por otra parte, utiliza la sátira y el fino humor negro rememorando el estilo de Berlanga. Esto último fue reprobado posteriormente por el propio Fidel Castro, ya que consideró el tono cómico de la obra como falta de respeto al pueblo cubano, que tanto había sufrido durante esos años.
Además de ello, la película refleja los problemas cotidianos vividos durante aquellos años, como fue la escasez de combustible y de medios de transporte (que actualmente ha mejorado gracias al apoyo de Venezuela); y atiende a otras cuestiones como son la ineficacia de la burocracia, el exilio, la apertura al turismo o el mercado “paralelo” de productos básicos. No obstante, a la vez que muestra sus miserias, también reivindica las virtudes de la sociedad cubana en la búsqueda de la utopía socialista y muestra a sus ciudadanos como gente formada y educada (universitarios que incluso no tienen más remedio de ocupar puestos de trabajo inferiores) y a las mujeres como motor del cambio. Por último, realiza una fotografía impecable de la cultura cubana, su música (estupenda banda sonora), su gastronomía y sus creencias religiosas (leyenda Yoruba).
En resumen, se trata de una obra inteligente, bien dirigida y con diálogos memorables, muy recomendable para conocer un poco mejor Cuba, una bella isla con un pueblo heroico, que día tras día lucha por sobrevivir dignamente frente al asedio del imperio más poderoso.
9 de octubre de 2008
9 de octubre de 2008
36 de 63 usuarios han encontrado esta crítica útil
Viendo su buena crítica y que había logrado el Óscar al mejor guión original, me aventuré a ver esta película con muchísimas expectativas, pero pocas veces me he llevado mayor decepción.
Se salvan unas buenas interpretaciones, especialmente de Jim Carrey y Kate Winslet, así como algunos diálogos, que me hicieron sonreír un poco entre tanta frustración.
Como aspectos negativos que conducen a mi mala crítica, caben destacar:
- A pesar del Óscar, la historia me parece una auténtica estupidez.
- Si lo que quieres es echarte unas risas, olvídate de la película.
- Pesada y aburrida.
- Angustiosa, ya que al principio no te enteras de nada...
- Decepcionante cuando la entiendes.
- Y por encima de todo...
Se salvan unas buenas interpretaciones, especialmente de Jim Carrey y Kate Winslet, así como algunos diálogos, que me hicieron sonreír un poco entre tanta frustración.
Como aspectos negativos que conducen a mi mala crítica, caben destacar:
- A pesar del Óscar, la historia me parece una auténtica estupidez.
- Si lo que quieres es echarte unas risas, olvídate de la película.
- Pesada y aburrida.
- Angustiosa, ya que al principio no te enteras de nada...
- Decepcionante cuando la entiendes.
- Y por encima de todo...
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama. Ver todo
spoiler:
...PREVISIBLE, ya que más o menos por la mitad de la película, te das cuenta de cómo va a terminar (por lo de las hojas arrancadas de la libreta).
7
2 de enero de 2012
2 de enero de 2012
12 de 15 usuarios han encontrado esta crítica útil
Aparentemente ¡Vampiros en La Habana! es una película animada sobre dos clanes de vampiros (norteamericanos y europeos) que luchan por obtener una fórmula secreta que les permite exponerse al sol y que se encuentra en manos de Von Drácula, un científico que vive en Cuba con su sobrino Pepito, con el que experimenta la pócima. Presenta dos historias paralelas, una la de vampiros y otra la de la lucha revolucionaria de los años 30, con toques de comedia negra.
No obstante, la cinta es mucho más que eso, ya que en el fondo, se trata de un alegato satírico contra el imperialismo y a favor de la liberación de los pueblos. En primer lugar, cabe atender a los dos clanes de vampiros enfrentados, que luchan por obtener la fórmula de la poción, la Capa Nostra y el Grupo Vampiro. Ambos clanes representan los dos poderes imperialistas defensores del capitalismo durante la Guerra Fría: los EE.UU. y Europa. En la película, los EE.UU. buscan mantener su predominio comercial, eliminando cualquier amenaza al mismo; Europa, por su parte, busca recuperar su influencia colonial, intentando apoderarse de las materias primas de los países en desarrollo (la poción “Vampisol”) para lucrarse y hacer negocios. Ambas potencias imperialistas no dudan en llegar a acuerdos con el crimen organizado y la mafia, representados por Al Tapone. Frente a estos están Von Drácula y su sobrino Pepito, el primero científico (médico) y el segundo revolucionario y artista, que se resisten a claudicar, como Cuba, frente a las potencias imperialistas, y quieren ofrecer gratuitamente la fórmula a todos los vampiros del mundo, del mismo modo que la Revolución Cubana, de acuerdo con su ideología socialista, solidaria e internacionalista, busca exportar al mundo su modelo apoyando a las guerrillas revolucionarias (Congo, Bolivia, Angola, Vietnam, Nicaragua, etc.) y enviando médicos y profesores a las regiones y los países más necesitados (África, Haití, Sevilla, etc.).
En segundo lugar, la trama se desarrolla durante el gobierno de Gerardo Machado (1925-1933) y Pepito, Lola y sus amigos son opositores que luchan contra su tiranía. Cabe recordar que la insurrección popular contra este gobierno dio lugar en Cuba a la primera experiencia revolucionaria contra el dominio del imperio norteamericano. Al igual que en otras obras de Juan Padrón, el protagonista de ¡Vampiros en La Habana! es un revolucionario que lucha por la liberación de su patria. Pero además, Pepito es un músico, un artista comprometido, y una persona con sentido de la justicia y representa el ideal del revolucionario cubano, los valores de compromiso, solidaridad y rebeldía,; también del cubano como tal ya que es mulato, artista, mujeriego, gracioso, impetuoso y atrevido.
Sigue en el Spoiler SIN DESVELAR PARTES IMPORTANTES DEL ARGUMENTO:
No obstante, la cinta es mucho más que eso, ya que en el fondo, se trata de un alegato satírico contra el imperialismo y a favor de la liberación de los pueblos. En primer lugar, cabe atender a los dos clanes de vampiros enfrentados, que luchan por obtener la fórmula de la poción, la Capa Nostra y el Grupo Vampiro. Ambos clanes representan los dos poderes imperialistas defensores del capitalismo durante la Guerra Fría: los EE.UU. y Europa. En la película, los EE.UU. buscan mantener su predominio comercial, eliminando cualquier amenaza al mismo; Europa, por su parte, busca recuperar su influencia colonial, intentando apoderarse de las materias primas de los países en desarrollo (la poción “Vampisol”) para lucrarse y hacer negocios. Ambas potencias imperialistas no dudan en llegar a acuerdos con el crimen organizado y la mafia, representados por Al Tapone. Frente a estos están Von Drácula y su sobrino Pepito, el primero científico (médico) y el segundo revolucionario y artista, que se resisten a claudicar, como Cuba, frente a las potencias imperialistas, y quieren ofrecer gratuitamente la fórmula a todos los vampiros del mundo, del mismo modo que la Revolución Cubana, de acuerdo con su ideología socialista, solidaria e internacionalista, busca exportar al mundo su modelo apoyando a las guerrillas revolucionarias (Congo, Bolivia, Angola, Vietnam, Nicaragua, etc.) y enviando médicos y profesores a las regiones y los países más necesitados (África, Haití, Sevilla, etc.).
En segundo lugar, la trama se desarrolla durante el gobierno de Gerardo Machado (1925-1933) y Pepito, Lola y sus amigos son opositores que luchan contra su tiranía. Cabe recordar que la insurrección popular contra este gobierno dio lugar en Cuba a la primera experiencia revolucionaria contra el dominio del imperio norteamericano. Al igual que en otras obras de Juan Padrón, el protagonista de ¡Vampiros en La Habana! es un revolucionario que lucha por la liberación de su patria. Pero además, Pepito es un músico, un artista comprometido, y una persona con sentido de la justicia y representa el ideal del revolucionario cubano, los valores de compromiso, solidaridad y rebeldía,; también del cubano como tal ya que es mulato, artista, mujeriego, gracioso, impetuoso y atrevido.
Sigue en el Spoiler SIN DESVELAR PARTES IMPORTANTES DEL ARGUMENTO:
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama. Ver todo
spoiler:
Uno de sus mayores atributos, que la han convertido en película de culto, es su combinación de cine social y político con cine de ficción y ahí radica su originalidad. Supone una gran innovación en el cine de vampiros, no sólo por su formato animado, sino por situar la acción en un lugar tan poco apropiado para ello como es el Caribe. La calidad de la animación es aceptable para la época, destacando el diseño y la expresividad de los personajes. El guión es original, el ritmo es bueno y a ello ayuda su corta duración (69 min.); los diálogos son acertados, se utiliza el humor absurdo y el humor negro, aunque algunos gags son más propiamente cubanos. Aunque el ritmo es bueno, flaquea un poco la estructura narrativa y, a veces, la historia se desarrolla con saltos bruscos de guión, sobre todo a partir de la mitad del film, con la llegada de los clanes de vampiros a La Habana en busca de la fórmula.
En definitiva, se trata de una película original, clave en la animación latinoamericana, bien hecha, cargada de simbolismo y con una segunda lectura de compromiso con la Revolución Cubana, que combina de manera acertada realidad histórica y ficción de vampiros, ofreciendo un cóctel de ilustración histórica, adiestramiento político, intriga, humor negro y diversión.
En definitiva, se trata de una película original, clave en la animación latinoamericana, bien hecha, cargada de simbolismo y con una segunda lectura de compromiso con la Revolución Cubana, que combina de manera acertada realidad histórica y ficción de vampiros, ofreciendo un cóctel de ilustración histórica, adiestramiento político, intriga, humor negro y diversión.
30 de diciembre de 2011
30 de diciembre de 2011
8 de 8 usuarios han encontrado esta crítica útil
"La revolución de las ratas de cloaca"
Un mundo maravilloso (2006) es una comedia negra del director mexicano Luis Estrada, autor de otras obras como Bandidos (1991), La ley de Herodes (1999) y El infierno (2010). Se trata de una crítica mordaz al primer gobierno del PAN en México y al neoliberalismo como doctrina económica imperante en el mundo. La película cuenta la historia del Pinche Pérez, un indigente que accidentalmente se convierte en héroe de la causa antiglobalización al quedar atrapado en lo alto de un edificio del World Financial Center. La cinta trata sobre temas tan diversos como la manipulación de los medios de comunicación, la desigualdad, lucha contra la pobreza (o “contra los pobres”), la burocracia ministerial o el patriarcado.
Creo que se trata de una gran sátira política que reprueba, no sólo a la élite dominante, sino también a la masa que no reacciona como debería ante la desigualdad, la pobreza y la injusticia, imbuida por el “sueño americano” que recoge muy bien una de las frases más importantes del film (“más vale un día de ricos que una vida de pobres”). Esta crítica trasciende al caso mexicano y puede aplicarse a cualquier país, más aún en Europa, en los tiempos que corren. Precisamente para llegar a más gente, el director opta por combinar gags cómicos del cine convencional con el lenguaje discursivo propio de cine social y en ese punto, la obra alcanza a veces el patetismo y pierde algo de fuerza. A pesar de ello, la estética de la película y su fotografía, la genial banda sonora, la interpretación de Damián Alcázar y el final, tan efectista como necesario, hacen de esta cinta una muestra más que digna del cine mexicano y de la comedia negra.
Un mundo maravilloso (2006) es una comedia negra del director mexicano Luis Estrada, autor de otras obras como Bandidos (1991), La ley de Herodes (1999) y El infierno (2010). Se trata de una crítica mordaz al primer gobierno del PAN en México y al neoliberalismo como doctrina económica imperante en el mundo. La película cuenta la historia del Pinche Pérez, un indigente que accidentalmente se convierte en héroe de la causa antiglobalización al quedar atrapado en lo alto de un edificio del World Financial Center. La cinta trata sobre temas tan diversos como la manipulación de los medios de comunicación, la desigualdad, lucha contra la pobreza (o “contra los pobres”), la burocracia ministerial o el patriarcado.
Creo que se trata de una gran sátira política que reprueba, no sólo a la élite dominante, sino también a la masa que no reacciona como debería ante la desigualdad, la pobreza y la injusticia, imbuida por el “sueño americano” que recoge muy bien una de las frases más importantes del film (“más vale un día de ricos que una vida de pobres”). Esta crítica trasciende al caso mexicano y puede aplicarse a cualquier país, más aún en Europa, en los tiempos que corren. Precisamente para llegar a más gente, el director opta por combinar gags cómicos del cine convencional con el lenguaje discursivo propio de cine social y en ese punto, la obra alcanza a veces el patetismo y pierde algo de fuerza. A pesar de ello, la estética de la película y su fotografía, la genial banda sonora, la interpretación de Damián Alcázar y el final, tan efectista como necesario, hacen de esta cinta una muestra más que digna del cine mexicano y de la comedia negra.
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama. Ver todo
spoiler:
A destacar varias escenas: las conversaciones del ministro con la mujer, la toma de conciencia de clase con la internacional de fondo y la imagen final de los muertos en la puerta de la casa.

8,4
130.874
10
14 de septiembre de 2008
14 de septiembre de 2008
8 de 8 usuarios han encontrado esta crítica útil
Supone un mazazo en nuestras conciencias.
Retrata la violencia como ninguna otra película.
Refleja la cruda realidad de los barrios marginales de Brasil, el problema del narcotráfico y la complicidad de la policía.
La dirección de Fernando Meirelles, la fotografía y el montaje bien hubieran merecido, al menos, un Oscar.
El guión consigue satisfactoriamente adaptar una novela densa y con 300 personajes.
Sus actores, que no son estrellas del cine, sino niños de la calle, realizan una interpretación tremendamente realista.
Los protagonistas tienen un carisma especial y son inolvidables: Buscapé, Ze Pequeño, Bené, Angélica...
Algunas de sus escenas son memorables.
Por todo ello, Ciudad de Dios es, para mí, la mejor película de las que he visto, y por el momento, la única a la que le he puesto la máxima puntuación.
Retrata la violencia como ninguna otra película.
Refleja la cruda realidad de los barrios marginales de Brasil, el problema del narcotráfico y la complicidad de la policía.
La dirección de Fernando Meirelles, la fotografía y el montaje bien hubieran merecido, al menos, un Oscar.
El guión consigue satisfactoriamente adaptar una novela densa y con 300 personajes.
Sus actores, que no son estrellas del cine, sino niños de la calle, realizan una interpretación tremendamente realista.
Los protagonistas tienen un carisma especial y son inolvidables: Buscapé, Ze Pequeño, Bené, Angélica...
Algunas de sus escenas son memorables.
Por todo ello, Ciudad de Dios es, para mí, la mejor película de las que he visto, y por el momento, la única a la que le he puesto la máxima puntuación.
Más sobre Mr_Miga
Cancelar
Limpiar
Aplicar
Filters & Sorts
You can change filter options and sorts from here