De verdad que cuesta comprender cómo puede haber gente que se junte y cree semejante sucesión de estupideces.

Cómo pueden dormir por las noches?

A menos que hubiera una jugosa subvención de por medio, será más fácil entender la relatividad espacial que el porqué alguien puede idear, rodar y montar tal memez.

Todas mis dudas desaparecieron a los cinco minutos de película. Qué gozo! Disfruté como un enano. No sé si el guión es bueno, si la historia tiene sentido, si el casting es el correcto o si dura demasiado, pero sí que sé que me lo pasé pipa viéndola.
Igualmente, a pesar de ser una película con envoltorio de distracción pura y dura, creo que la historia te implica a hacerte algunas preguntas que son inevitables: hacia dónde vamos? cuál es el futuro de esta sociedad hipercomunicada, hiperconectada?

Le sobra un poco el endulzamiento y las aventuras de chiquillos en algunos tramos, pero es una solución a la imposibilidad de plasmar lo que explica el libro que, de paso, aprovecho para recomendar; mejor que la película, como acontece normalmente.

Ya tengo ganas de volver a verla.

Es entretenida, aunque esperaba mayor profundidad en las historias.
Veo excesivo apoyo en la figura y actuación de Guilermo Toledo que, si bien sabe sobrellevarlo, el poco recorrido del guión no da más de sí y el film se resiente.
Aguanta un visionado, no más.

Esta película no es tal, es un panfleto de la moral religiosa cristiana que, mediante sus fondos inagotables, promueven su verdad sí o sí al precio que sea.
Repugnante.

Una película confusa, que creo que me gusta mucho, pero cuyo final me desagrada tanto que borra las sensaciones vividas.
Brendan Fraser espectacular, en mi opinión, Óscar merecido. El guion acompaña a una dirección excelente, en la que Darren Aronofsky nos secuestra y nos hace partícipes de la claustrofobia en la que vive nuestro protagonista. Buenas interpretaciones de secundarios.
Pero el final....me parece una manera burda de estropear una película redonda.