You must be a loged user to know your affinity with Jorismos
Críticas ordenadas por utilidad
Movie added to list
Movie removed from list
An error occurred

6,7
31.886
1
5 de junio de 2017
5 de junio de 2017
3 de 7 usuarios han encontrado esta crítica útil
Insisto, una película ante todo debe ser entretenida. Aunque una película tenga una buena historia, una buena interpretación, un buen guión, una buena música,... como es el caso de Moonlight, si hay una mala dirección, si las piezas no se ensamblan bien, al final la película se estropea, como es el caso Moonlight. Esta es una película que tiene por separado todos los ingredientes para ser una gran película pero que falla en la dirección, y aburre sobremanera al espectador. Un plano de 20 segundos en silencio a la cara inexpresiva de una persona no transmite, no emociona, simplemente aburre. Sólo queda pensar ¿Qué sería de esta historia en manos de un gran director?

5,1
9.340
9
1 de mayo de 2017
1 de mayo de 2017
3 de 7 usuarios han encontrado esta crítica útil
Desde 'El sexto sentido' no se hacía una película tan inquietante como esta. El director juega a la perfección con el espectador y lejos de esperar al típico final de película con sorpresa, la vuelca y la cambia por completo a mitad de cinta, dejando al espectador sin habla. Entretenida, divertida y muy psicológica. Es necesario que se hagan más películas como esta.

7,4
37.726
10
19 de junio de 2023
19 de junio de 2023
2 de 5 usuarios han encontrado esta crítica útil
"El hombre de la Tierra" es una joya cinematográfica que desafía la mayoría de las convenciones de las películas de ciencia ficción y deja una huella indeleble en la mente del espectador. Aunque la película se lanzó en 2007, su relevancia y atractivo perduran en el tiempo, lo que atestigua su lugar en la lista de las mejores películas de ciencia ficción del siglo XXI.
La historia, escrita por Jerome Bixby, es una narrativa intrigante y cautivadora que se desarrolla a través de diálogos intensos y significativos, en lugar de depender de efectos visuales. La trama gira en torno a un hombre que sorprende a sus amigos con una revelación asombrosa.
Richard Schenkman dirige con maestría este relato, empleando un enfoque minimalista que pone en primer plano la historia y las interpretaciones. La actuación de David Lee Smith, junto con el reparto de apoyo que incluye a John Billingsley y Ellen Crawford, es destacable, cada uno de ellos aportando un nivel de autenticidad y profundidad a sus personajes que refuerza el peso de la narración.
La música de Mark Hinton Stewart aporta una atmósfera envolvente, mientras que la fotografía de Afshin Shahidi refuerza el carácter íntimo y personal del relato. Juntos, estos elementos crean un entorno que permite que la historia se desarrolle de manera natural, acentuando el impacto de la revelación del protagonista y las reacciones de los personajes.
"El hombre de la Tierra" es una muestra brillante de cómo la ciencia ficción puede ser una herramienta efectiva para explorar temas profundos y provocar reflexiones sobre la humanidad, la historia y nuestra percepción del tiempo. Es un testimonio de la destreza narrativa de Bixby y la habilidad directiva de Schenkman, que lograron crear una película de culto con tan solo 56.000 dólares de presupuesto y que trasciende las limitaciones del género para ofrecer una experiencia cinematográfica verdaderamente única y memorable.
"El hombre de la Tierra" es una obra maestra que ofrece un viaje fascinante hacia lo desconocido, y que deja al espectador con preguntas profundas. Es, sin duda, una de las mejores películas de todos los tiempos.
La historia, escrita por Jerome Bixby, es una narrativa intrigante y cautivadora que se desarrolla a través de diálogos intensos y significativos, en lugar de depender de efectos visuales. La trama gira en torno a un hombre que sorprende a sus amigos con una revelación asombrosa.
Richard Schenkman dirige con maestría este relato, empleando un enfoque minimalista que pone en primer plano la historia y las interpretaciones. La actuación de David Lee Smith, junto con el reparto de apoyo que incluye a John Billingsley y Ellen Crawford, es destacable, cada uno de ellos aportando un nivel de autenticidad y profundidad a sus personajes que refuerza el peso de la narración.
La música de Mark Hinton Stewart aporta una atmósfera envolvente, mientras que la fotografía de Afshin Shahidi refuerza el carácter íntimo y personal del relato. Juntos, estos elementos crean un entorno que permite que la historia se desarrolle de manera natural, acentuando el impacto de la revelación del protagonista y las reacciones de los personajes.
"El hombre de la Tierra" es una muestra brillante de cómo la ciencia ficción puede ser una herramienta efectiva para explorar temas profundos y provocar reflexiones sobre la humanidad, la historia y nuestra percepción del tiempo. Es un testimonio de la destreza narrativa de Bixby y la habilidad directiva de Schenkman, que lograron crear una película de culto con tan solo 56.000 dólares de presupuesto y que trasciende las limitaciones del género para ofrecer una experiencia cinematográfica verdaderamente única y memorable.
"El hombre de la Tierra" es una obra maestra que ofrece un viaje fascinante hacia lo desconocido, y que deja al espectador con preguntas profundas. Es, sin duda, una de las mejores películas de todos los tiempos.

5,3
280
9
13 de enero de 2025
13 de enero de 2025
1 de 3 usuarios han encontrado esta crítica útil
En mi opinión, "Un silencio" es una gran película que profundiza en los complejos lazos que existen en todas las familias y las cicatrices emocionales que dejan.
La película destaca por su estilo "a fuego lento", donde el director va entregando la historia poco a poco, gota a gota, para que sea saboreada lentamente y podamos reflexionar sobre ello. Es un estilo que a veces recuerda a Denis Villeneuve o directores similares, y un estilo que a mi personalmente me encanta. Es decir, una película seria, adulta, con enfoque crudo pero realista, intensa pero que evita el melodrama, en definitiva como la vida misma.
Lafosse maneja con maestría el ritmo, permitiendo que las emociones de los personajes se desarrollen de manera natural, lo que aporta una autenticidad palpable a cada escena.
Imagino que para las personas más jóvenes o más simples, puede parecer lenta en algunos momentos, lo que puede acabar con la paciencia de algunos espectadores. Pero a pesar de esto, Lafosse garantiza que cada momento tenga su significado y peso, creando un relato poderoso sobre el perdón y la aceptación. "Un silencio" es una grandísima obra que, aunque no para todos los gustos, ofrece una mirada sincera y reflexiva sobre la familia. Cada personaje de la familia tiene su propia historia dentro de la película, todos son héroes y villanos en algún momento de la película y eso es precisamente lo que la hace grande.
La película destaca por su estilo "a fuego lento", donde el director va entregando la historia poco a poco, gota a gota, para que sea saboreada lentamente y podamos reflexionar sobre ello. Es un estilo que a veces recuerda a Denis Villeneuve o directores similares, y un estilo que a mi personalmente me encanta. Es decir, una película seria, adulta, con enfoque crudo pero realista, intensa pero que evita el melodrama, en definitiva como la vida misma.
Lafosse maneja con maestría el ritmo, permitiendo que las emociones de los personajes se desarrollen de manera natural, lo que aporta una autenticidad palpable a cada escena.
Imagino que para las personas más jóvenes o más simples, puede parecer lenta en algunos momentos, lo que puede acabar con la paciencia de algunos espectadores. Pero a pesar de esto, Lafosse garantiza que cada momento tenga su significado y peso, creando un relato poderoso sobre el perdón y la aceptación. "Un silencio" es una grandísima obra que, aunque no para todos los gustos, ofrece una mirada sincera y reflexiva sobre la familia. Cada personaje de la familia tiene su propia historia dentro de la película, todos son héroes y villanos en algún momento de la película y eso es precisamente lo que la hace grande.

5,5
1.754
9
28 de agosto de 2024
28 de agosto de 2024
1 de 3 usuarios han encontrado esta crítica útil
"Todos me odian" no es solo una película; es una experiencia visceral que desdibuja hábilmente las líneas entre la comedia oscura y el terror psicológico. Esta singular obra cinematográfica ofrece un estudio profundo y perturbador sobre la paranoia, la amistad y la alienación, logrando un equilibrio casi quirúrgico entre el humor y el horror psicológico que se infiltra sutilmente bajo la piel del espectador.
El núcleo de la trama se centra en la dualidad de percepciones entre Pete, el protagonista, y su grupo de amigos de la universidad, quienes se reúnen para celebrar su cumpleaños en una mansión rural. Lo que inicialmente parece ser un fin de semana de celebraciones y reencuentros se transforma gradualmente en un laberinto de inseguridades y desconfianza que fractura la realidad a cada paso.
El genio de "Todos me odian" radica en su capacidad para manipular la perspectiva del espectador. Por un lado, vemos a través de los ojos de Pete, interpretado con una intensidad desgarradora que captura la esencia de un hombre al borde de la paranoia. La actuación es tal que nos hace cuestionar constantemente la validez de sus percepciones, oscilando entre la empatía y la duda. Por otro lado, la perspectiva de los amigos de Pete ofrece un contrapunto fascinante; ellos ven a un amigo desmoronándose, incapaz de manejar las tensiones normales de la vida social. Esta dinámica establece una pregunta inquietante: ¿Es Pete el protagonista de una pesadilla social, o estamos presenciando el desgarrador retrato de una mente fracturada?
Esta dualidad se explora con una maestría que recuerda a "El Padre" de Florian Zeller, donde la línea entre la realidad y la percepción distorsionada se vuelve borrosa. Sin embargo, "Todos Me Odian" lleva esto a un nuevo nivel al integrar estos elementos en casi cada plano y diálogo, manteniendo al espectador en un estado constante de desconcierto. Los diálogos, cargados de doble sentido, no solo avanzan la trama, sino que también sirven como un espejo de la mente dividida de Pete. Cada frase y cada réplica pueden interpretarse de múltiples maneras, añadiendo capas de significado y aumentando la tensión psicológica.
Uno de los aspectos más destacados de la película es cómo se manejan los momentos de humor junto a los de desasosiego. En un minuto, puedes encontrarte riendo nerviosamente por una broma aparentemente inocua, y al siguiente, sintiendo un escalofrío por la misma línea, ahora teñida de una oscura premonición. Este juego constante con las emociones del espectador no es solo un testimonio del guion inteligentemente construido, sino también de la dirección que navega hábilmente estas aguas turbulentas.
El clímax de la película es un 'tour de force' de actuación y dirección. El plano final, en particular, es un estudio magistral en economía cinematográfica: cada gesto y cada palabra de los protagonistas llevan el peso de toda la narrativa, encapsulando la ambigüedad central y la tensión emocional que ha estado burbujeando bajo la superficie. En estos breves minutos, la película alcanza su apoteosis, dejando al espectador en un estado de reflexión introspectiva sobre la naturaleza de la realidad y la locura.
"Todos me odian" es, en mi humilde opinión, una obra maestra de la narrativa contemporánea que redefine lo que una película de terror psicológico puede ser. No busca asustar en el sentido tradicional, sino invitar al espectador a un viaje inquietante a través de los laberintos de la mente humana, donde el verdadero terror no reside en lo sobrenatural, sino en el desasosiego, la ansiedad y la angustia de lo cotidiano.
El núcleo de la trama se centra en la dualidad de percepciones entre Pete, el protagonista, y su grupo de amigos de la universidad, quienes se reúnen para celebrar su cumpleaños en una mansión rural. Lo que inicialmente parece ser un fin de semana de celebraciones y reencuentros se transforma gradualmente en un laberinto de inseguridades y desconfianza que fractura la realidad a cada paso.
El genio de "Todos me odian" radica en su capacidad para manipular la perspectiva del espectador. Por un lado, vemos a través de los ojos de Pete, interpretado con una intensidad desgarradora que captura la esencia de un hombre al borde de la paranoia. La actuación es tal que nos hace cuestionar constantemente la validez de sus percepciones, oscilando entre la empatía y la duda. Por otro lado, la perspectiva de los amigos de Pete ofrece un contrapunto fascinante; ellos ven a un amigo desmoronándose, incapaz de manejar las tensiones normales de la vida social. Esta dinámica establece una pregunta inquietante: ¿Es Pete el protagonista de una pesadilla social, o estamos presenciando el desgarrador retrato de una mente fracturada?
Esta dualidad se explora con una maestría que recuerda a "El Padre" de Florian Zeller, donde la línea entre la realidad y la percepción distorsionada se vuelve borrosa. Sin embargo, "Todos Me Odian" lleva esto a un nuevo nivel al integrar estos elementos en casi cada plano y diálogo, manteniendo al espectador en un estado constante de desconcierto. Los diálogos, cargados de doble sentido, no solo avanzan la trama, sino que también sirven como un espejo de la mente dividida de Pete. Cada frase y cada réplica pueden interpretarse de múltiples maneras, añadiendo capas de significado y aumentando la tensión psicológica.
Uno de los aspectos más destacados de la película es cómo se manejan los momentos de humor junto a los de desasosiego. En un minuto, puedes encontrarte riendo nerviosamente por una broma aparentemente inocua, y al siguiente, sintiendo un escalofrío por la misma línea, ahora teñida de una oscura premonición. Este juego constante con las emociones del espectador no es solo un testimonio del guion inteligentemente construido, sino también de la dirección que navega hábilmente estas aguas turbulentas.
El clímax de la película es un 'tour de force' de actuación y dirección. El plano final, en particular, es un estudio magistral en economía cinematográfica: cada gesto y cada palabra de los protagonistas llevan el peso de toda la narrativa, encapsulando la ambigüedad central y la tensión emocional que ha estado burbujeando bajo la superficie. En estos breves minutos, la película alcanza su apoteosis, dejando al espectador en un estado de reflexión introspectiva sobre la naturaleza de la realidad y la locura.
"Todos me odian" es, en mi humilde opinión, una obra maestra de la narrativa contemporánea que redefine lo que una película de terror psicológico puede ser. No busca asustar en el sentido tradicional, sino invitar al espectador a un viaje inquietante a través de los laberintos de la mente humana, donde el verdadero terror no reside en lo sobrenatural, sino en el desasosiego, la ansiedad y la angustia de lo cotidiano.
Más sobre Jorismos
Cancelar
Limpiar
Aplicar
Filters & Sorts
You can change filter options and sorts from here