No sé si mi crítica aportará algo diferente a lo que ya se ha comentado sobre esta película, pero, en realidad, me da igual, porque no voy a hablar sobre los temas técnicos, artísticos o interpretativos de la película, sino que simplemente voy a hablar de la reflexión que me vino a la cabeza cuando la ví:

No hay nada más importante en la vida que simplemente querer vivirla con ilusión en todos y cada uno de las situaciones que se presentan, y, así disfrutar de lo bueno, y aprender de lo malo.

Es el sabor de boca que deja la película.

Ciertamente, ya es un clásico.

El ejercicio que propone la película es bueno en cuanto a paisajes, ambientación, ritmo e historia, pero, en mi opinión, se queda simplemente en eso, en una película que se deja ver, pero que no pasará a la historia del cine por nada.

Los personajes (incluido al que da vida Brad Pitt, que, como siempre, lo hace fenomenal) están poco profundizados y la historia, aunque esté basada en hechos reales, podría haberse hecho menos previsible.

Sirve para pasar un buen rato si no se ha visto. Pero no para repetir

Ciertamente, no es más que eso: una película de sobremesa que versa sobre qué pasa si se pone en la amistad de dos amigos en entredicho.

Lo mejor de la película es la absurda pelea entre el amante y el amigo. Lo peor: la película en sí.

No tiene (ni vale para) mucho más que para entretenerte una sobremesa de domingo.

Se achaca a Buñuel el ser un provocador, de haber manipulado algunas escenas (la niña con dolor de garganta, el burro muerto por las abejas......), pero una reflexión me viene a la cabeza: ¿no era necesario clamar por la justicia social, y al mismo tiempo, la miseria de una tierra olvidada?. La película (porque, sinceramente no puede ser considerado documental, ya que ha sido retocado), es un reflejo de la desgracia y miseria en la que se vivía, con mayor o menor grado en la España rural, en aquellos años.

Todo ello contrasta con esa España "moderna" de Exposiciones Universales, de ideas super-avanzadas, en la que la preocupación de muchos residía no en que llevarse a la boca, sino en el renacimiento de los autonomismos como el catalán, gallego y vasco.

Es curioso como la historia se repite............

Con el título de mi crítica creo que ya la destrozo bastante, así que no me voy a extender mucho en la crítica: es un película blockbuster más del montón a la que no sostienen ni actores, ni director, ni guión, ni nada, y que deja al espectador con la nada confortable sensación de que ha perdido el tiempo viéndola.

Se le podía haber sacado algo más partido, porque la idea de la historia no era incluso hasta original, pero, nada, no hay manera.