Otro cuento maravilloso del maestro Burton. Una fábula llena de nostalgia y de sentimiento. Un viaje a parajes desconocidos y no tan desconocidos. Soñar despiertos. Hombres inimaginables y sentimientos paradójicos. Todo esto y mucho más está dentro de esta grandísima película.
Burton es un genio a la hora de crear mundos mágicos e inhóspitos. Sus películas te llevan a través de ellas como si viajaras sobre una alfombra mágica.

Después de la saga de películas horribles que se realizaron del murciélago, era hora que apareciera alguna otra ( a parte de la primera y quizá la segunda ) que mereciera la pena.
Aquí la tenemos, se nos muestra un superhéroe con corazón, un poco más humano que en las anteriores películas.
Christian Bale interpreta muy bien el papel. Me gusta la película porque el hombre y el héroe tienen un distanciamiento, es decir, podemos reconocer a cada uno como ser independiente.
Muy entretenida.

No suelo criticar las películas con solo un visionado, no obstante, me arriesgo ha hacerlo con esta película, la última de los Coen.
Dista mucho de ser la mejor de todas, es un filme interesante, no hay que negarlo, contiene ingredientes suficientes como para ser vista. Pero los hermanos Coen son tan buenos que debemos ser un poco exigentes con ellos.
Esta muy bien fotografiada, dirigida, escrita. Tiene un toque a las antiguas películas de Leone, polvorientas, donde no se ve más que desierto, ciertos toques de humor negro... Hasta ahí todo bien, la cosa empieza a desviarse por culpa de un exceso de actores, llegas a perderte por culpa de los diversos derroteros que la película recorre. Ciertas partes de la película parecen metidas con calzador, tampoco el final es habitual en los filmes de los hermanos.
En resumen, en el primer visionado he de decir que me he encontrado ante una pequeña decepción, he de advertir, eso sí, que la volveré a ver, y espero que mi segundo visionado sea más complaciente que el primero.

No me canso de ver esta maravilla creada por ordenador. Otra vez los superhéroes son los protagonistas de una película, la diferencia es que esta vez es una familia la que se ocupa de luchar contra el mal.
En verdad no es una película para niños, tiene un guión muy trabajado, y reúne unas cuantas escenas familiares que a muchos padres y madres les harán recordar momentos propios en sus hogares.
Pocas veces unos dibujos animados fueron tan humanos, siendo, a la vez, tan increíbles.

Hace mucho que vi esta película, lo que más recuerdo y lo que más me sorprendió fue la actuación de Brando... me pareció un auténtico mariscal delante de la cámara, con una fuerza y una presencia arrolladoras. Por lo demás, me gustó el filme en general, aunque las adaptaciones de Shakespeare tienen con demasiada frecuencia a apoyar los textos del inglés con imágenes en vez de crear unos guiones que sean lo suficientemente fluidos para que la narración sea menos áspera. Aún así, buena adaptación, no llega a la altura de Macbeth de Welles ( para mí mucho mejor ), pero esta bien realizada.