Vale, la historia inicial será tierna, social y todo lo que tú quieras. Pero todo eso está mal desarrollado y a los pocos minutos dan ganas de pegarle un tiro a la tele. No comprendo como hay gente que hoy en día les siguen gustando todos los truños casposos y ñoños que hizo este engendrillo allá por los primeros años del franquismo. Es más insoportable que Jim Carrey. Lo que hace no es cantar, sino berrear. Cada vez que abre la boca no hace más que destrozarte los tímpanos con sus chillidos. Entran unas ganas locas de meterse en la pantalla y arrancarle las cuerdas vocales al crío para que al menos calladito esté más guapo. Da asco, la verdad.

De acuerdo, seré una desalmada que no tiene ni idea de la nostalgia de esa época. Pero por favor, seamos inteligentes de una vez. Puestos a hablar de cine español "nostálgico" yo prefiero "Pepi Luci Bom" antes que esta casposidad.

Sin duda era el personaje de ficción más odiado profundamente por todos mis compañeros de clase durante los tres últimos cursos de Primaria. No había una sola vez que la Heidi era mencionada sin que se provocara una sensación entre revuelo y cachondeo por parte de aquellos preadolescentes de principios de los años 2000. Y reconozco que no les faltaba razón para hacerlo. La serie es muy sensiblera, lacrimógena, y lo peor es que hace un retrato realmente tramposo de lo que debería ser la vida en las zonas rurales europeas del siglo XIX. Aparte de que carece de momentos estimulantes que puedan despertar el interés de otras generaciones.

Me sorprende mucho que haya personas criadas en los 70 que se dejen llevar por la nostalgia y pongan esta serie y otras similares por las nubes habiendo existido en esa época Wickie el Vikingo, Mazinger Z, o incluso La Abeja Maya (que mira que esta última no es gran cosa, pero al menos la recuerdo más entretenida que esos melodramas tediosos cuyos personajes no hacían más que chorradas cursis que no merecían el más mínimo interés). Por favor, sean más inteligentes y piensen que los tiempos han cambiado.

¿En serio? ¡No me hagan reír! No puedo creerme que no hay NI UNA crítica negativa para esta cursilada lacrimógena y sobrevalorada. Vale, sé que hay gente que la veía de niñ@ y la recuerda con nostalgia, pero vamos a ser inteligentes de una vez.

De acuerdo que los niños tienen que aprender a que no todo en la vida son alegrías, pero a ver, tampoco hay que incitarles a llorar siempre. Si hacen películas o series infantiles en las que el protagonista lo pasa fatal, que no sean todo desgracias, o al menos que haya algo de fantasía o acción para hacer la historia más llevadera (al estilo de los clásicos ochenteros de aventuras de Spielberg). Al parecer en esta sosísima serie por no haber, no hay ni personajes carismáticos, algo que también resulta muy útil en este tipo de entretenimiento. Además, las canciones dan vergüenza ajena.

Si tuviera que describir esta animación en dos palabras sería: Cursi y aburrida.

Confieso, siendo una enana me encantaba esta cosa. Culpa fue de mis abuelos que la tenían en VHS (cosas de la infancia de mis tías) y me la tragué bastantes veces, ya que a ellos les emocionaba. Total, que me enganché como quien se engancha a la droga. Sin embargo dieciocho años después me hago siempre esta pregunta cada vez que recuerdo su visionado; ¿Cómo es posible que a mí me gustara semejante mierda?

La película, aparte de ser racista encubierta a más no poder, es tonta, ñoña y no vale nada en absoluto. Los protagonistas infantiles son repelentes y vomitivos. Se salvan un poco los personajes animados, que tienen algo de gracia (que no demasiada). La esclavitud sureña se ve aquí como algo idílico, cuando en realidad no era así en absoluto. (Véanse películas buenas sobre el tema como "12 años de esclavitud") Esta visión desde luego gustaría a Donald Trump, quien pienso yo que se emocionaría viendo este truño. Pero para gran parte de la humanidad no es nada creíble.

En fin, esto es solo para familias gringas ultra conservadoras, y el resto de la humanidad actual a abstenerse.

Vale, a la directora de la película le ocurrió esto y obviamente la traumatizó de por vida. Nada que reprochar a su crítica al machismo. Hasta ahí, todo muy bien. Pero, por favor. Una cosa es hace unas décadas(Cuando esta mujer tuviera 16 años) y otra cosa es AHORA. No me creo que hoy en día en Pakistan (país actualmente en aceleración económica) sean tan medievales ellos y tan "extraterrestres" como para que ocurran estas cosas. No estoy diciendo que ahora sean el paradigma de la igualdad(que obviamente no lo son), pero situar esta historia ahora no creo que tenga mucho sentido cuando en realidad si se ambientara en la actualidad debería ser una historia en la que se descubra que entre ambas culturas no existe tanta diferencia, un mensaje al estilo de "Occidente es Occidente", y hacer saber que en el fondo todos somos humanos. Si ocurrió esto en la juventud de la directora, pues que la ambiente en esa época. No distorsionemos la realidad al estilo de esos telefilmes alemanes que ponen el domingo a mediodía ("Verano en nosedonde" y demás).