(Si quieren buscar razones de porque es pésima lean otras críticas ¿? Pero si quieren la VERDAD léanme a mi.........Ja!)

La única película que me ha gustado de R. Emmerich es "Independence Day" y supongo que porque estaba demasiado pequeño (No; realmente es buena; y casi me dan más ganas de escribir sobre ella; que sobre la cutrez que resulto 10.000 B.C), bueno seamos breves; 10.000 B.C es de las películas más decepcionantes y torpes proyectadas en el 2008; hubiera preferido tirarme los $10.500 de la entrada (¡y de apostar en preferencial.........maldita sea!) jugando al Parqués o cincuentayuna, bueno y como se darán cuenta estoy tan indispuesto a escribir sobre esta bajeza que - imitando la pereza argumental de 10.000 - parafrasearé a un memorable amigo:

No, mejor no que me meto en problemas y por esta farsa de película; ni soñarlo; mmmhhh mira que este dizque comentario cinematográfico que ni llega a nada ha resultado bien desvariado y de lo peor que escrito; ahh si! lo que me recuerda a 10.000 B.C que como me escribió mi amigo "ni siquiera es lo suficientemente ridícula como para pasarla al ilustre catálogo de películas tan malas que son buenas"

Mmhhh; algún día entenderé un poco más eso!

hic!

Ya desde hace algunos siglos el análisis mecánico; casi clínico, de la voluntad y la conducta humanas, nos descubre como seres llevados por la imperiosa necesidad de satisfacer todos nuestros deseos cualesquiera que fuesen. Se manifiesta entonces "Nuestro Poder" que por ahí derecho desencadena la acción y se configura a su vez en su misma, constante y ardorosa búsqueda; es decir: "hay que buscar el poder", tarea ésta; que con frecuencia tiende a desbocarse; ocasionando invariablemente que trenes que se dirigen a un mismo punto tarde o temprano colapsen.

Como respuesta a esa indefectible "Guerra de todos contra todos" ha de instaurarse y encumbrarse un Poder Soberano que regule a los todos. Por supuesto esta Imposición aunque dentro de cierta lógica; será acatada con cierto recelo y desconfianza en un contexto de flagrante tensión.

Y haciendo consciente lo inconsciente, de todo lo anterior trata "The Howling"

Y para complementar mis aullidos filosófico-antropológicos he también de resaltar la impresionante calidad de los efectos especiales; principalmente las licántropas transformaciones, el adecuado uso de las locaciones y las precisas actuaciones.

Antes de irme, igualmente creo que es para destacar el interesante cóctel de ideas y alegorías servidas en la película y condensadas en la figura del Hombre-Lobo (o Lobo-Hombre?), sin dar mayores Homilías (Lejos de mi el irrespetar de esa manera al público de filmaffinity.........Ja!) señalaré la pertinencia de remirar aspectos de la condición humana como la naturaleza de la locura, la aceptación de los instintos naturales más ferales, el líbido desenfrenado etc. Con inteligencia llevados al celuloide.

Aunque hubiera esperado algo de comentario mitológico sobre la raza de "werewolves", La surreal e inquietante conclusión prometen una secuela ¿? de la que estaré muy pendiente.

AAAHHHUUUUUUU !!!

Mmhhh Los niños, como hijos reflejan en cierta medida el éxito de sus padres y de la humanidad entera, o no es un triunfo sacarlos adelante? los niños, son la alegría del hogar, la esperanza del mundo, el futuro. Incluso cuando muramos – algunos –; niños de nuevo seremos. Que de nosotros, si nos los quitasen, sería una maldición desproporcionada (o quizá un castigo merecido) y es aquí en donde la premisa de A. Cuarón falla irremisible, se queda cortísima al tratar de dibujar un futuro medianamente caótico, cuando sin niños no queda más que el suicidio en masa, lleno de traiciones y conspiración cuando ya no hay nada que ganar; con personajes tristes y complejos cuando lo que menos se espera es catárticos y desbocados, en fin supongo que no siempre se recibe lo que se espera. Pese a lo anterior, la película me gustó y mucho; considero que los puntos más fuertes del inteligente guión son el desarrollo totalmente coherente y la motivación de algunos personajes; al igual que la adecuada ambientación que transmite efectivamente cierta sensación de zozobra en ese futuro incierto y bien dibujado. Aunque ese agradecimiento gratuito a Gran Bretaña como el último reducto medianamente civilizado del mundo; sobra por completo.

Cuarón no desperdicia tampoco su vitrina futurista como muestrario de la condensación de líos actuales como la inmigración ilegal y amenazas latentes como el autoritarismo y el armamentismo. Ahh! pero lo mejor es esa disimulada alegoría en el recién nacido, el portador de la renovada esperanza, de entre los más despreciados ha nacido – por raza y todo –. Muy bíblico, buen detalle.

Todo un placer asistir a la consagración de A. Cuarón, ganada a pulso y más que justa.

No se como empezar esta supuesta crítica (que más va a parecer pura apología), pero cada vez que veo esta película, algo indescriptible me sucede, no se si es esa música tan celestial como melancólica; talvez el tratamiento parsimonioso del argumento o todo el trabajo de composición, la fotografía más bien sombría y algo deslavada llena de planos secos pero efectivos, o la flagrante frialdad de los personajes; tristes, solos, como de ensueño y esa ambigua resolución; descaradamente alevosa. Ahh pero eso si! como poquísimas veces en el cine – pero siempre en la cinematografía de M. Oshii – con cada nuevo visionado se descubren nuevas cosas, se develan nuevos significados, la música te abstrae más; te alienas de tu realidad.

Avalon es auténtica poesía en movimiento, es ciencia ficción en estado puro. Una declaración de amor a lo indecible, un cuestionamiento brutal a la realidad; hecho realidad. La extirpación del espíritu a la monotonía, el homenaje a la alegoría.

Descalifíquenme mentes racionales, 0 - 100 de utilidad para este comentario; pero véanla.

Generalmente no voy a cine a ver comedias; aunque esta vez los bonos de descuento estaban por expirar y ni modo; tocaba entrar a ver algo. No obstante mis expectativas sobre esta obra eran razonablemente buenas y para mi grata sorpresa el resultado de la experiencia fue aún mucho mejor de lo que esperaba. Lo más llamativo son las relaciones disfuncionales–cómicas que se dan entre los miembros de la familia; se necesitan, pero se odian; se quieren pero no se soportan etc. Magistrales actuaciones también os deleitarán, especialmente la ecléctica madre Toni Collette, el frustrado padre Greg Kinnear y la chiquitina Abigail Breslin; que se luce.

El argumento; si no muy novedoso, es cada vez más interesante en virtud del diestro manejo de ese elocuente y metafórico viaje que refleja y causa la evolución de cada personaje desde sus iniciales miserias hasta un mayor entendimiento de su rol en la familia; la cual seguirá siendo loser pero más compenetrada y conocida de si misma.

Seguramente los temas sobre problemática familiar habrán acaparado épocas completas en la historia del cine y serán relevantes aun; no obstante dudo mucho que alguna pieza anterior (e incluso posterior) a Little Miss Sunshine supere esa respetuosa y proporcionada mezcla de fino humor y real drama que eleva la película. Igualmente encomiables son los nuevos ángulos para contar este tipo de relatos; el recurso del road movie aquí empleado prueba ser idóneo para una historia que narrada de otro modo sería aburridísima. La película con su humilde producción es también uno de esos raros ejemplos en el cine de que menos puede ser mucho pero mucho más.

Admirable.