You must be a loged user to know your affinity with CANDELA
Críticas ordenadas por utilidad
Movie added to list
Movie removed from list
An error occurred

5,8
28.612
6
26 de agosto de 2012
26 de agosto de 2012
2 de 3 usuarios han encontrado esta crítica útil
Diré que ésta es una de esas películas que cuando terminan me dejan un poco trastocada. No trastocada en el sentido de "giro de guión sorprendente y sagaz que te hace revisionar el film para coger el significado que quiso darle el guionista astuto", sino en el sentido de que cuando veo aparecer los títulos de crédito súbitamente, pienso: ¿ein? ¿cómo? ¿qué? Es decir, lo mismo que me pasaba en el colegio cuando me mostraban el resultado de una ecuación, o cuando intento montar un mueble de IKEA en casa: ¿cómo hemos llegado aquí? ¿No hay más explicación, más desarrollo? ¿Qué hago con las piezas que faltan?
Pues así me quedé tras las dos horitas de El legado de Bourne.
Ante todo señalar que, evidentemente, el elenco protagonista es muy correcto, como se espera de ellos, que los secundarios dan el peso por el que se les ha pagado y que la acción corre a raudales por toda la cinta (y a estas alturas reconocer que me encantan las películas de hostias sería muy repetitivo).
Jeremy Renner (ooooh, pecado) me gusta bastante más que Matt Damon (aquí muchos pueden dejar de leer y empezar a insultarme), Rachel, soberbia como siempre y Edward Norton es de una fiabilidad difícilmente superable. La música de James Newton Howard sigue el ritmo a la perfección (aunque no es de sus mejores composiciones, para mi gusto); y es una película que no se hace larga (a las 3 de la madrugada salimos del cine, sin bostezar un solo momento, lo cual no está nada mal) ni hace perder el hilo entre escenas (salvo que no hayamos visto las anteriores, con lo que las referencias continuas a Bourne nos dejarían fríos).
Pero .. (sigo en spoiler)
Pues así me quedé tras las dos horitas de El legado de Bourne.
Ante todo señalar que, evidentemente, el elenco protagonista es muy correcto, como se espera de ellos, que los secundarios dan el peso por el que se les ha pagado y que la acción corre a raudales por toda la cinta (y a estas alturas reconocer que me encantan las películas de hostias sería muy repetitivo).
Jeremy Renner (ooooh, pecado) me gusta bastante más que Matt Damon (aquí muchos pueden dejar de leer y empezar a insultarme), Rachel, soberbia como siempre y Edward Norton es de una fiabilidad difícilmente superable. La música de James Newton Howard sigue el ritmo a la perfección (aunque no es de sus mejores composiciones, para mi gusto); y es una película que no se hace larga (a las 3 de la madrugada salimos del cine, sin bostezar un solo momento, lo cual no está nada mal) ni hace perder el hilo entre escenas (salvo que no hayamos visto las anteriores, con lo que las referencias continuas a Bourne nos dejarían fríos).
Pero .. (sigo en spoiler)
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama. Ver todo
spoiler:
Pero el argumento general ... Hombre, si no se le pide mucho, a lo mejor, puede que cuele, pero en fin ... Parece iniciarse al estilo de las viejas películas de espías de los setenta y derrapa (no sólo en la interminable persecución en moto) para convertirse en una carrera de fondo tras las pastillas alucinantes que vuelven superlistoquetecagas a un tipo tirando a escasito de neuronas y supercachas-velociraptor a cualquier tirillas que las tome.
El malo malísimo, que hace cagarse al graderío en la descripción que hacen de él tal cual un terminator, resulta que en cuanto la chica se pone un poco peleona se "esnafra" (cómo diríamos en mi tierra) y queda hecho añicos en dos parpadeos, sin haber llegado a cruzar un sólo estoque con el prota. La presencia de Joan Allen es poco más que anecdótica y el palabrerío político y conspirador de Norton y sus compinches no encuentra resolución por ningún lado, se queda ahí, flotando en el aire, mientras el chico y la chica (oe oe) navegan rumbo al atardecer.
Que es muy bonito y tal, pero que quieren que les diga ...
Juzguen ustedes mismos.
El malo malísimo, que hace cagarse al graderío en la descripción que hacen de él tal cual un terminator, resulta que en cuanto la chica se pone un poco peleona se "esnafra" (cómo diríamos en mi tierra) y queda hecho añicos en dos parpadeos, sin haber llegado a cruzar un sólo estoque con el prota. La presencia de Joan Allen es poco más que anecdótica y el palabrerío político y conspirador de Norton y sus compinches no encuentra resolución por ningún lado, se queda ahí, flotando en el aire, mientras el chico y la chica (oe oe) navegan rumbo al atardecer.
Que es muy bonito y tal, pero que quieren que les diga ...
Juzguen ustedes mismos.
TV

3,4
9.423
7
8 de junio de 2014
8 de junio de 2014
1 de 1 usuarios han encontrado esta crítica útil
Acojonante.
No encuentro otra palabra mejor que describa esta "película", que supongo que si uno va bien cargado (alcohol, drogas, pegamento...aquí a elegir predilecciones personales del director) encontrará absolutamente lógica, bien rodada y digna de merecer comprarse en DVD para colocar en la estantería justo a lado de Casablanca.
En estado medio normal (tampoco voy a tirarme flores) un cuenco de palomitas, y un grupo de amigos con ganas de pasarlo bien, Sharknado me ha hecho llorar de la risa. Llorar de tal modo que en varias ocasiones hemos tenido que pararla para poder continuar tras desdoblar el estómago.
Eso sí, aquí todo el mundo sabía a lo que venía. Que para eso están las críticas, los avisos o, simplemente, el cartel que nos deja intuir de qué va esta joya del séptimo arte.
El final es para verlo a cámara lenta.
No encuentro otra palabra mejor que describa esta "película", que supongo que si uno va bien cargado (alcohol, drogas, pegamento...aquí a elegir predilecciones personales del director) encontrará absolutamente lógica, bien rodada y digna de merecer comprarse en DVD para colocar en la estantería justo a lado de Casablanca.
En estado medio normal (tampoco voy a tirarme flores) un cuenco de palomitas, y un grupo de amigos con ganas de pasarlo bien, Sharknado me ha hecho llorar de la risa. Llorar de tal modo que en varias ocasiones hemos tenido que pararla para poder continuar tras desdoblar el estómago.
Eso sí, aquí todo el mundo sabía a lo que venía. Que para eso están las críticas, los avisos o, simplemente, el cartel que nos deja intuir de qué va esta joya del séptimo arte.
El final es para verlo a cámara lenta.
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama. Ver todo
spoiler:
Iba en un barco, se tiraron todos a salvarme del ataque de los tiburones y sólo quedé yo. Mi abuelo murió en la masacre. Después apareció un helicóptero, se arrojaron seis más (lógica absoluta) y también murieron todos.
Por eso los tiburones no me gustan mucho. Y supongo que a la gente que viene conmigo en barco, tampoco.
Que sí, hombre, que sí. Eso es un buen drama personal que desata las lágrimas.
Con dos cojones.
Por eso los tiburones no me gustan mucho. Y supongo que a la gente que viene conmigo en barco, tampoco.
Que sí, hombre, que sí. Eso es un buen drama personal que desata las lágrimas.
Con dos cojones.

5,8
54.023
6
2 de julio de 2013
2 de julio de 2013
1 de 1 usuarios han encontrado esta crítica útil
Así que han hecho otra relectura del personaje más boy scout de DC. Ahí fuimos, total, peor que Superman Returns y su mesianismo no creo que lo hagan. Pues me equivoqué en parte y en parte acerté.
Erré en la primera impresión que la premiere de Estados Unidos me dejó de Henry Cavill. “Este muchacho”, pensé,”se dejado dentro el palo que se metió para el papel del superhéroe de la tarta de manzana y los calzoncillos por fuera” (una nota: aquí ha aprendido por fin a meterlos por dentro). Pero en la película no lo hace mal del todo. Es convincente en su parte humana y en la kriptoniana, bueno, tampoco hay que ser Laurence Olivier para encarnar el semi-dios extraterrestre. Y como según alguna crítica que he leído por aquí, las mujeres sólo vamos (arrastradas, claro) a ver una película de superhéroes si salen torsos, porque la acción no nos gusta, que es cosa de machotes, sino los romances románticos (qué bonito y qué tierno) pues nada, como Cavill cumple perfectamente el momento “sin camiseta, op”, a mí ya me vale, que para eso voy al cine y pago religiosamente. El resto de la peli sobra una vez visto el cuerpaso y dado el besito. Pueden poner los títulos finales, gracias caballeros y señoras.
En fin. No añado más.
Prosigo: tenemos secundarios de lujo, evidentemente, como Kevin, Russel, Laurence Fishburne, una estupenda Ayelet Zurer, Diane Lane …etc, etc, que se meriendan a todo el que se ponga por delante, convenza o no su papel y la historia que nos quieren contar. Y nos endosan una Lois-Adams algo descafeinada que, exactamente, no sabría que decirles, es como ese tipo que sale de fondo en todas las fotos. Hoy nos levantamos aguerrida reportera del Golfo (y no sabemos bajar de un helicóptero sin ayuda), hoy copiloto en Independe Day, hoy periodista de investigación (en menos de media hora descubre lo que ninguna Lois ha podido: identidad, domicilio, DNI, número de pie…vamos, Hacienda).Ella lo hace TODO, y lo hace BIEN y con ESTILLO. Awesome, que diría Dean Winchester. Me quedo con Margot Kidder.
En cuanto a malos, convence más Zaora que un M Shanon exagerado, poco creíble, al que se le echa mucho en falta que no diga lo de “arrodillaos”, marca de la casa (nostálgica que soy), sin embargo, sí se agradece una buena elección en los dos jóvenes actores que interpretan a Clark, Timberline y Sprayberry, que bordan sus escasos minutos en pantalla.
Efectos espectaculares, por supuesto, que para eso hay derroche de tecnología punta. Y una digna banda sonora del magnífico Hans Zimmer.
¿En conjunto? Pues creo que si conseguimos olvidar la leyenda y partimos de cero, es un blockbaster decente. Incluso sin kriptonita. ¿Por qué sin ella? Porque entonces nuestro héroe humanizado se diluye y tendríamos de regreso a un dios que sólo tiene esa debilidad. Y aquí necesitamos que su debilidad sea precisamente esa parte humana, capaz de encolerizarse, dudar y flaquear. Y porque necesitamos darle la vuelta a todo, al parecer, al reescribirlo.
Entonces llego a las preguntas de la parte donde no me equivoqué al dudar:
Erré en la primera impresión que la premiere de Estados Unidos me dejó de Henry Cavill. “Este muchacho”, pensé,”se dejado dentro el palo que se metió para el papel del superhéroe de la tarta de manzana y los calzoncillos por fuera” (una nota: aquí ha aprendido por fin a meterlos por dentro). Pero en la película no lo hace mal del todo. Es convincente en su parte humana y en la kriptoniana, bueno, tampoco hay que ser Laurence Olivier para encarnar el semi-dios extraterrestre. Y como según alguna crítica que he leído por aquí, las mujeres sólo vamos (arrastradas, claro) a ver una película de superhéroes si salen torsos, porque la acción no nos gusta, que es cosa de machotes, sino los romances románticos (qué bonito y qué tierno) pues nada, como Cavill cumple perfectamente el momento “sin camiseta, op”, a mí ya me vale, que para eso voy al cine y pago religiosamente. El resto de la peli sobra una vez visto el cuerpaso y dado el besito. Pueden poner los títulos finales, gracias caballeros y señoras.
En fin. No añado más.
Prosigo: tenemos secundarios de lujo, evidentemente, como Kevin, Russel, Laurence Fishburne, una estupenda Ayelet Zurer, Diane Lane …etc, etc, que se meriendan a todo el que se ponga por delante, convenza o no su papel y la historia que nos quieren contar. Y nos endosan una Lois-Adams algo descafeinada que, exactamente, no sabría que decirles, es como ese tipo que sale de fondo en todas las fotos. Hoy nos levantamos aguerrida reportera del Golfo (y no sabemos bajar de un helicóptero sin ayuda), hoy copiloto en Independe Day, hoy periodista de investigación (en menos de media hora descubre lo que ninguna Lois ha podido: identidad, domicilio, DNI, número de pie…vamos, Hacienda).Ella lo hace TODO, y lo hace BIEN y con ESTILLO. Awesome, que diría Dean Winchester. Me quedo con Margot Kidder.
En cuanto a malos, convence más Zaora que un M Shanon exagerado, poco creíble, al que se le echa mucho en falta que no diga lo de “arrodillaos”, marca de la casa (nostálgica que soy), sin embargo, sí se agradece una buena elección en los dos jóvenes actores que interpretan a Clark, Timberline y Sprayberry, que bordan sus escasos minutos en pantalla.
Efectos espectaculares, por supuesto, que para eso hay derroche de tecnología punta. Y una digna banda sonora del magnífico Hans Zimmer.
¿En conjunto? Pues creo que si conseguimos olvidar la leyenda y partimos de cero, es un blockbaster decente. Incluso sin kriptonita. ¿Por qué sin ella? Porque entonces nuestro héroe humanizado se diluye y tendríamos de regreso a un dios que sólo tiene esa debilidad. Y aquí necesitamos que su debilidad sea precisamente esa parte humana, capaz de encolerizarse, dudar y flaquear. Y porque necesitamos darle la vuelta a todo, al parecer, al reescribirlo.
Entonces llego a las preguntas de la parte donde no me equivoqué al dudar:
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama. Ver todo
spoiler:
- ¿Es necesario cambiar un infarto legendario por esa irrisoria escena con Kevin-yo también soy héroe-Costner? El fan acérrimo de mi izquierda empezó aquí a mesarse los cabellos, y hasta el final…
- Se cambia falta de fuerza y/o debilidad porque nos estamos volviendo humano con la terraformación por cara de “muchomuchoesfuerzo” (ññññ) y conseguimos los que nos echen, véase plataforma petrolífera, máquina kriptoniana mega size, rayo de energía..
- Novedad: agujero negro selectivo – me como todo, menos: Lois Lane, la chica, y Zod, que éste tiene que reaparecer cual malo de peli de terror para hostiarse bien hostiado.
- ¿Kripton-Pandora? ¿Kripton-Matrix? En serio, ¿again?
- Russel, doy fe, además de ser el primer Jor El de Pressing Cath, le doy toda la razón a la crítica que dijo que eres el cansino histórico. Te actualizas a tiempo real más rápido que Windows 8.1.
- Tecnología, efectos, fotografía…Pero sobra casi una hora de apachurramiento, zona de destrucción y pobres humanos corriendo y cayéndosele todo encima. Hay que saber dosificarse, Zack.
- Puntazo con la vidriera de la iglesia. Si son más explícitos no lo pillo, miren.
Y a ver que ponen en la secuela, porque cartuchos, cartuchos, no les quedan muchos.
- Se cambia falta de fuerza y/o debilidad porque nos estamos volviendo humano con la terraformación por cara de “muchomuchoesfuerzo” (ññññ) y conseguimos los que nos echen, véase plataforma petrolífera, máquina kriptoniana mega size, rayo de energía..
- Novedad: agujero negro selectivo – me como todo, menos: Lois Lane, la chica, y Zod, que éste tiene que reaparecer cual malo de peli de terror para hostiarse bien hostiado.
- ¿Kripton-Pandora? ¿Kripton-Matrix? En serio, ¿again?
- Russel, doy fe, además de ser el primer Jor El de Pressing Cath, le doy toda la razón a la crítica que dijo que eres el cansino histórico. Te actualizas a tiempo real más rápido que Windows 8.1.
- Tecnología, efectos, fotografía…Pero sobra casi una hora de apachurramiento, zona de destrucción y pobres humanos corriendo y cayéndosele todo encima. Hay que saber dosificarse, Zack.
- Puntazo con la vidriera de la iglesia. Si son más explícitos no lo pillo, miren.
Y a ver que ponen en la secuela, porque cartuchos, cartuchos, no les quedan muchos.

6,6
54.934
7
11 de noviembre de 2012
11 de noviembre de 2012
1 de 1 usuarios han encontrado esta crítica útil
Está claro que ahora se llevan los héroes rotos.
Me parece bien, porque imagínense que a estas alturas de la película nos plantan delante un James a lo Sean Connery, ligón, gamberrete y misógino, que se ría de unos malos envueltos en papel Albal y corra en un bólido hipertecnificado, con accesorios que saca del bat-cinturón, para chulear a los bandidos, que para qué engañarnos, son muy bobalicones. Encima que fuera por ahí, bebiéndose la vida con lujo, con la que está cayendo. Se merendarían al guionista y al director con patatas hervidas. O quizás no…
Sin embargo, por muchas vueltas que le den al personaje, y lo quieran hacer evolucionar, después de Timothy Dalton o Pierce Brosnan (el primero ya daba muestras, en pequeñas pinceladas, del desencanto y agrio interior con drama profundo), este Bond obtenido tras varias puestas a punto, sigue gamberrete, ligón y misógino, con accesorios, batcinturón y bólido (aunque lo tenga que reciclar). Eso sí, para compensar, por si alguien se da cuenta, nos lo van a mostrar con cara de cabreo progresivo, golpeado, machacado, deprimido, sin pulso y con trauma infantil por explotar (veo futuro argumento, con ciertas reminiscencias de Bruce Wayne …Oh!¿Alguien más lo habrá notado? Qué curioso…).
Aparte de esos detalles, este Bond mata y piensa como lo que debería ser: un profesional frío y efectivo, destila acción coordinada a raudales, prescinde de artilugios absurdos y es muy real, muy humano (aunque siga impecablemente trajeado tras una persecución endiablada, nos aparece a continuación unas barbas y un sport-casual poco digno, para que veamos la “quiebra” del personaje) y nos quiere arrastrar a esas películas de S.McQueen de los 70, con trasfondo y peso argumental, incluyendo secundarios de lujo. Lo cierto es que por momentos lo consigue.
El villano es un Bardem camaleónico, que no es terrible como anuncian, pero sí conforma una buena némesis para nuestro chico (sigo alucinando con la capacidad de los malos para prever hasta el último micro-movimiento del entorno cuando cometen su fechoría. Anonadada me dejan). Y los títulos, como es habitual, dignos de ver, video-clip con música de Adele y señoritas contorneándose bajo juegos de luz con ritmo pegadizo.
La fotografía (ese paisaje maravilloso escocés, ese Londres..) y el ritmo narrativo son buenos, no decayendo éste último en ningún momento, con un Daniel Craig perfectamente integrado en un agente 007 rediseñado para el siglo XXI.
Me gusta este Bond/Craig cínico, radical y en muchos aspectos más adulto que sus antecesores, más violento y, dentro del personaje que todos conocemos, más creíble. Pienso que Skyfall supera de sobra a la terrible Quantum of Solace y, aunque no alcanza, a mi entender, ese toque especial de Casino Royale (era el primero de esta nueva tendencia), me ha dejado un buen sabor de boca, en espera de próximas entregas, con los protagonistas que va dejando.
Me parece bien, porque imagínense que a estas alturas de la película nos plantan delante un James a lo Sean Connery, ligón, gamberrete y misógino, que se ría de unos malos envueltos en papel Albal y corra en un bólido hipertecnificado, con accesorios que saca del bat-cinturón, para chulear a los bandidos, que para qué engañarnos, son muy bobalicones. Encima que fuera por ahí, bebiéndose la vida con lujo, con la que está cayendo. Se merendarían al guionista y al director con patatas hervidas. O quizás no…
Sin embargo, por muchas vueltas que le den al personaje, y lo quieran hacer evolucionar, después de Timothy Dalton o Pierce Brosnan (el primero ya daba muestras, en pequeñas pinceladas, del desencanto y agrio interior con drama profundo), este Bond obtenido tras varias puestas a punto, sigue gamberrete, ligón y misógino, con accesorios, batcinturón y bólido (aunque lo tenga que reciclar). Eso sí, para compensar, por si alguien se da cuenta, nos lo van a mostrar con cara de cabreo progresivo, golpeado, machacado, deprimido, sin pulso y con trauma infantil por explotar (veo futuro argumento, con ciertas reminiscencias de Bruce Wayne …Oh!¿Alguien más lo habrá notado? Qué curioso…).
Aparte de esos detalles, este Bond mata y piensa como lo que debería ser: un profesional frío y efectivo, destila acción coordinada a raudales, prescinde de artilugios absurdos y es muy real, muy humano (aunque siga impecablemente trajeado tras una persecución endiablada, nos aparece a continuación unas barbas y un sport-casual poco digno, para que veamos la “quiebra” del personaje) y nos quiere arrastrar a esas películas de S.McQueen de los 70, con trasfondo y peso argumental, incluyendo secundarios de lujo. Lo cierto es que por momentos lo consigue.
El villano es un Bardem camaleónico, que no es terrible como anuncian, pero sí conforma una buena némesis para nuestro chico (sigo alucinando con la capacidad de los malos para prever hasta el último micro-movimiento del entorno cuando cometen su fechoría. Anonadada me dejan). Y los títulos, como es habitual, dignos de ver, video-clip con música de Adele y señoritas contorneándose bajo juegos de luz con ritmo pegadizo.
La fotografía (ese paisaje maravilloso escocés, ese Londres..) y el ritmo narrativo son buenos, no decayendo éste último en ningún momento, con un Daniel Craig perfectamente integrado en un agente 007 rediseñado para el siglo XXI.
Me gusta este Bond/Craig cínico, radical y en muchos aspectos más adulto que sus antecesores, más violento y, dentro del personaje que todos conocemos, más creíble. Pienso que Skyfall supera de sobra a la terrible Quantum of Solace y, aunque no alcanza, a mi entender, ese toque especial de Casino Royale (era el primero de esta nueva tendencia), me ha dejado un buen sabor de boca, en espera de próximas entregas, con los protagonistas que va dejando.
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama. Ver todo
spoiler:
Nota para futuras partenaires de nuestro agente más conocido: cuando en algún momento (antes o después del trajín) os diga algo como: te sacaré de esto, acabaré con el villano, o, en versión mesiánica, estoy aquí para liberarte … CORRE. Ni lo dudes, en dirección contraria, pero corre. Adivina, en caso de duda, a quien van a pasar por el cepillo.
Delicias varias:
- Ese momento locaza de Bardem-Bond, insuperable.
- El nuevo Q, menudo cerebrito. Un prodigio, el niño. Se le supone un genio, le hackean en 5 segundos el tenderete y tarda media hora en reconocer al maloso en el metro (claro, como es bajito y no se le ve la melenaza dorada ..). Muy bien, hombre, muy bien.
- Bond, hijo, pégate una ducha que te aclare las tácticas, porque como estratega eres nefasto: Para protegernos nos plantamos en un páramo, sin posible resguardo, sin armas y con un guardés artrítico que nos cubra las espaldas, sabiendo, de antemano, que van a aparecer 40 ó 50 malos a dar candela. Ole tus huevos. Deja, ya me protejo yo, que peor no creo que me vaya.
Ah, y quítales la linterna a los viejos, coño, que se vienen arriba y hacen más señales luminosas que un láser de discoteca en Ibiza. Si el malo no los ve, es que necesita graduación de gafas, porque en la iglesia parecen los gusiluz montando un guateque.
Delicias varias:
- Ese momento locaza de Bardem-Bond, insuperable.
- El nuevo Q, menudo cerebrito. Un prodigio, el niño. Se le supone un genio, le hackean en 5 segundos el tenderete y tarda media hora en reconocer al maloso en el metro (claro, como es bajito y no se le ve la melenaza dorada ..). Muy bien, hombre, muy bien.
- Bond, hijo, pégate una ducha que te aclare las tácticas, porque como estratega eres nefasto: Para protegernos nos plantamos en un páramo, sin posible resguardo, sin armas y con un guardés artrítico que nos cubra las espaldas, sabiendo, de antemano, que van a aparecer 40 ó 50 malos a dar candela. Ole tus huevos. Deja, ya me protejo yo, que peor no creo que me vaya.
Ah, y quítales la linterna a los viejos, coño, que se vienen arriba y hacen más señales luminosas que un láser de discoteca en Ibiza. Si el malo no los ve, es que necesita graduación de gafas, porque en la iglesia parecen los gusiluz montando un guateque.

6,5
50.031
9
31 de agosto de 2012
31 de agosto de 2012
1 de 1 usuarios han encontrado esta crítica útil
Pues miren, le doy un 9 con toda la gana, así de claro, porque acabo de verla y la he disfrutado enormemente.
Y sinceramente, no le pongo un 10 por culpa de una pega que en otra sería suficientemente grave como para bajarle tres o cuatro puntos, pero me ha gustado lo suficiente como para no hacerlo esta vez: el guión.
Brave es una delicia (me he levantado con el pie fino, así que a aguantarse), la animación, el diseño de los personajes (incluso animales) y su vestuario, su movimiento, su caracterización, esos paisajes escoceses, esos bosques llenos de sombras y matices y esa música de Patrick Doyle prodigiosa, que nos remite a un mundo celta mágico donde todo es aún posible, han apuntado directamente a donde más me duele. De manera que, aguardando una película en exceso infantil y posiblemente aburrida, he encontrado esta joya a años luz de Cars 2 (por Dios!) que me ha hecho alucinar con una melena pelirroja que por si sola ya merecería una crítica propia.
Hasta ahí lo bueno.
¿Lo malo? Bueno, pues como dije, lo regular en Brave es, me temo, el guión. Parece comenzar con mucha fuerza y a medida que avanzamos, nos sumergimos en algo cien veces visto antes en la factoría Disney. Carece de ese espíritu absolutamente conmovedor de Up o de Wall-E, y aunque por momentos tiene buenos chispazos, no acaba de llegar. No llega.
Y es una lástima.
Le gana por goleada el corto de La Luna que ponen antes. Es difícil condensar la imaginación en un frasco pequeño, aquí lo consiguen, y en Brave se diluye.
Y sinceramente, no le pongo un 10 por culpa de una pega que en otra sería suficientemente grave como para bajarle tres o cuatro puntos, pero me ha gustado lo suficiente como para no hacerlo esta vez: el guión.
Brave es una delicia (me he levantado con el pie fino, así que a aguantarse), la animación, el diseño de los personajes (incluso animales) y su vestuario, su movimiento, su caracterización, esos paisajes escoceses, esos bosques llenos de sombras y matices y esa música de Patrick Doyle prodigiosa, que nos remite a un mundo celta mágico donde todo es aún posible, han apuntado directamente a donde más me duele. De manera que, aguardando una película en exceso infantil y posiblemente aburrida, he encontrado esta joya a años luz de Cars 2 (por Dios!) que me ha hecho alucinar con una melena pelirroja que por si sola ya merecería una crítica propia.
Hasta ahí lo bueno.
¿Lo malo? Bueno, pues como dije, lo regular en Brave es, me temo, el guión. Parece comenzar con mucha fuerza y a medida que avanzamos, nos sumergimos en algo cien veces visto antes en la factoría Disney. Carece de ese espíritu absolutamente conmovedor de Up o de Wall-E, y aunque por momentos tiene buenos chispazos, no acaba de llegar. No llega.
Y es una lástima.
Le gana por goleada el corto de La Luna que ponen antes. Es difícil condensar la imaginación en un frasco pequeño, aquí lo consiguen, y en Brave se diluye.
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama. Ver todo
spoiler:
No paro de encontrar similitudes, casi calcos, de Hermano Oso, que estaba bien pero, ¿no podían haberse esmerado en ser algo diferentes?
No hay príncipe azul esta vez (oooooh, gracias, gracias, por fin!), a pesar de que juegan en varias ocasiones al despiste, como insinuando que va a aparecer en la figura del oso hechizado, y sin embargo, Merida pierde carácter con el transcurrir de la acción, recogiendo muchos tópicos por el camino, y se asemeja demasiago a las princesitas que llenan el merchandising habitual, que quieren ser "modelnas" pero están demasiado supeditadas a lo políticamente correcto (¿resolvemos la acción cosiendo un tapiz? ¿perdón?)
Me ha hecho gracia (algo que ya he leído en otra crítica, a la que doy toda la razón) ese toquecillo Miyazaki en los fuegos fatuos (¿es la última película que han visto los productores americanos, me pregunto? Porque ya van dos, con Blancanieves y la leyenda del cazador, mandando bengalas con retazos de este director prodigioso. Miedo me empieza a dar, de verdad..)
Y veo que volvemos a encontrarnos con ese personaje de caballo perro mascota que ya teníamos en Enredados ... Otra vez Disney. No les tengo manía, en serio, pero Pixar antes se diferenciaba, igual que el Coyote de Mickey.
Y a mí siempre me ha caído mejor el Coyote, qué le vamos a hacer.
No hay príncipe azul esta vez (oooooh, gracias, gracias, por fin!), a pesar de que juegan en varias ocasiones al despiste, como insinuando que va a aparecer en la figura del oso hechizado, y sin embargo, Merida pierde carácter con el transcurrir de la acción, recogiendo muchos tópicos por el camino, y se asemeja demasiago a las princesitas que llenan el merchandising habitual, que quieren ser "modelnas" pero están demasiado supeditadas a lo políticamente correcto (¿resolvemos la acción cosiendo un tapiz? ¿perdón?)
Me ha hecho gracia (algo que ya he leído en otra crítica, a la que doy toda la razón) ese toquecillo Miyazaki en los fuegos fatuos (¿es la última película que han visto los productores americanos, me pregunto? Porque ya van dos, con Blancanieves y la leyenda del cazador, mandando bengalas con retazos de este director prodigioso. Miedo me empieza a dar, de verdad..)
Y veo que volvemos a encontrarnos con ese personaje de caballo perro mascota que ya teníamos en Enredados ... Otra vez Disney. No les tengo manía, en serio, pero Pixar antes se diferenciaba, igual que el Coyote de Mickey.
Y a mí siempre me ha caído mejor el Coyote, qué le vamos a hacer.
Más sobre CANDELA
Cancelar
Limpiar
Aplicar
Filters & Sorts
You can change filter options and sorts from here