El planteo es interesante y el desarrollo tiene algunos puntos altos. Todas o casi todas las películas de ciencia ficción tienen algún punto flaco por el lado de la lógica, y esta no es una excepción. Achicar a la gente se presenta como una gran ventaja económica y ecológica. Lo ecológico puede ser, pero no es cierto que por ser todo más chico sea necesariamente más barato. Suspendiendo la incredulidad (ejercicio necesario para poder apreciar cualquier película de este tipo) se puede decir que Matt Damon está muy bien en su papel, aunque la que se lleva las palmas (impecable construcción de un personaje) es la vietnamita. La producción es muy buena, la falla viene por el lado del guión, que tal como muchos han señalado empieza muy bien y sólido, y luego deriva por demasiados caminos. Se extraña un planteo más breve y redondo. La película puede verse por el lado de la originalidad, pero uno se queda con la sensación de que es un pecado no haber aprovechado más esa interesante idea original.

Hacer humor desde el tema de la guerra, drama humano si los hay, no es fácil. Encontrarse con una comedia con tema bélico tan bien hecha, divertida, con un guión sólido, una excepcional reconstrucción de época y situación y por añadidura una de las bandas sonoras más bonitas que recuerdo de todo lo que he visto en cine, es una gema que no hay que dejar pasar. No es humor absurdo y no olvida la situación bélica, que en algún momento está retratada con crudeza, pero hay para reírse a carcajadas y para la sonrisa cómplice que provoca el humor inteligente. Las actuaciones son correctas, cada uno está en su papel, y merece destacarse a Donald Sutherland. Uno sale del cine con una sonrisa, comentando escenas y tarareando la música del final. Qué más se puede pedir.

Es cierto que no se puede comparar a la genialidad de la original, pero tiene momentos altos que justifican su visión si uno ha gustado de la primera. Particularmente me encantó el Pato Donald en el arca de Noé con la música de Pompa y Circunstancia, creo que es lo más logrado de la película. Agregaría que esa música tenía para mí un componente trágico por razones personales, y que a partir de la visión del Pato Donald en el arca de Noé pude escucharla nuevamente sin angustia. Es la magia de Disney.

El mundo del modelaje podrá tener gente muy inteligente y culta, pero todos sabemos que se trata de una profesión en la cual, por definición, lo realmente importante es el aspecto físico, la forma de mostrarse a los demás, la competencia por tener más tiempo de cámara, si es necesario recurriendo a escándalos o romances inventados. Toda esa superficialidad merecía una historia que la retratara con humor sarcástico, y esta película lo consigue con creces mediante un salto acrobático en el guión, la principal genialidad de la película: los protagonistas de ese mundo superficial, vano y estúpido no son mujeres (como en la realidad) sino que se presenta una sociedad algo distópica donde los "stars" del modelaje son hombres. Este cambio de perspectiva permite explayarse en un guión profundamente sarcástico sin ofender a nadie. Y realmente lo logra. Si ves esta película y dices "es una estupidez" es que no has entendido nada.

Se trata de algo que oscila entre la comedia familiar, la crítica social y el drama apocalíptico. Como comedia no genera risas, como crítica social se queda a mitad de camino, como drama apocalíptico es incomprensible. Puede generar algún interés por la buena producción, algunas actuaciones y porque mantiene el interés hasta el (previsible) final, pero no mucho más que eso. Indudablemente es una película "llamativa", con un guion original, pero la originalidad sola no alcanza.

Es de esas pelis que amas u odias, con mayor predominio de positivos entre críticos profesionales y gente del mundillo del cine (esto fue premio al mejor guion en un prestigioso festival) y más negativos entre los espectadores comunes. Ya se imaginan en qué bando estoy.