Sin tener la mas pálida idea del tema, y sin que me la hubiesen recomendado, ingrese al cine a ver esta original propuesta del cine Francés contemporáneo. Y no me arrepentí. Es una peli bonita, dulce y hasta candorosa que deja un muy buen sabor de boca. Muy dinámica, intensa y con escenarios tan cambiantes que, tomando elementos sencillos de la vida cotidiana, retrata cosas que nos pueden ocurrir a todos de una manera en extremo original. La fotografía, la ambientación y el manejo de la cámara son espectaculares. Incluso dejando un poco atrás a las actuaciones, que sin ser excelentes, no son malas tampoco. Altamente recomendable para reír y llorar un rato al mismo tiempo.

Una película incomparable, fuera de lo común basada en una historia totalmente fantástica cuyo guion fue inspirado en una novela del laureado y fallecido escritor alemán Michael Ende. La película es una adaptación no muy fiel del libro e incluso incompleta, pero aun así, muy bien realizada. Los personajes fantásticos muy bien logrados, efectuados todavía de manera artesanal pues no se tenían aun los efectos especiales computarizados. La actuación del niño es fresca, pero no magistral. Convincente sin embargo para un chaval de su edad.

Esta inquietante película, constantemente dinámica y con buena dirección, actuaciones y montaje, tiene como centro a un chaval huérfano durante la guerra civil Española, que es abandonado por su Tutor en una especie de refugio para hijos de los caídos en esta guerra, el cual está ubicado en medio de la nada. Allí, una fantasmagórica experiencia lo espera. Bastante bien logrado el fantasma y los sucesos en torno a éste. Muchos niños en escena, lo cual ha de ser bastante difícil de manejar a la hora de rodar una película. Puede ser etiquetada como histórica, pero es difícil definir el genero que tiene tintes de drama, bélico, pasión y hasta momentos de terror.

Conmovedora película con un guion bien cuidado que nos habla de la filosofía hindu, centrando el asunto en la reencarnación de un lama tibetano muy respetado, en un niño norteamericano y otros dos mas de Asia. Sin saber con certidumbre cual de los niños es la verdadera reencarnación del lama, los monjes invitan a los tres junto con sus padres a pasar una temporada en el monasterio con el fin de indagar si alguno de ellos es. Se alterna la historia con escenas regresivas a los orígenes del Budismo durante la vida de Buda, encarnado por Keanu Reeves y con escenarios, adaptación y vestuarios bastante bien llevados.

Después de una larga estancia en un hospital psiquiátrico por un padecimiento similar al autismo, un niño de aproximadamente once años va a pasar una temporada en casa con la intención de ver a su familia y que el médico que lo atiende pueda evaluar si ya puede volver a casa. Al encontrar que su padre no está en el hogar, toma súbitamente su rol con lo que la vida en casa se altera por completo. Cabe destacar la muy buena actuación de los hermanos, noveles actores, escogidos por Diego Luna para encarnar a Abel y su hermano en esta película bien dirigida y que constituye por tanto, un paso con el pie derecho en su carrera de director a pesar de lo lento que se desenvuelve la trama en un comienzo.