Algo frustrante. Esperas más, mucho más.
Los decorados (digitales y/o reales) son espectaculares, así como la fotografía. La puesta en escena es muy acorde a la temática y muy bien resuelta, así como la acción. Sin embargo, le falta algo, no sabría decir qué, pero le falta algo, bueno, mejor dicho, le falta bastante para engancharte, para entretenerte todo lo que era de esperar.

Se esperaba mucho de ella, y quizás ese ha sido su principal problema.

Cómo el resto de la saga, las películas son interesantes (aunque es difícil evaluarlas habiendo leído los libros), pero, como adaptaciones, dejan bastante que desear, no son malas, pero tampoco buenas. dejan una sensación de insatisfacción bastante desagradable.

Probablemente, el personaje más destrozado de la serie (y eso que hay varios damnificados) sea la Mónica Figuerola de esta tercera parte.

Gran grito ecologista revestido de maravillosa experiencia visual. Lamentablemente, los paralelismos con la cruda realidad son alarmantemente válidos y actuales. La posibilidad de cepillarnos nuestro planeta e ir a buscar otros, en cuanto contemos con la tecnología necesaria, no está tan lejano, y, así mismo, el encontrar un paraíso como Pandora y repetir lo mismo para tratar de cepillárnoslo también, es muy, muy "humano". Desgraciadamente, si esto ocurre, no se yo si estará Aiwa para dejar las cosas en su lugar.

Visualmente magistral, muy entretenida y con muchos detalles de argumento muy interesantes.
¿Personajes planos?, a quién carajo le importa. Se cuenta lo suficiente de todos ellos como para introducirlos en la historia, lo demás, lo más importante, es Pandora y su gran paradigma de ecosistema.

P.D. Ha merecido la pena esperar 10 años

Maravillosa historia, donde el protagonista principal no es un actor, ni una actriz, ni una ciudad, ni un paisaje, ni la naturaleza. La verdadera protagonista es la MÚSICA. Y la música con mayúsculas, no la bazofia enlatada a la que estamos acostumbrados, salvo en círculos específicos alejados de lo comercial y de la televisión.
La historia que subyace también es bonita, con un final atípico más cercano a lo real que a lo fílmico.
Se capta y muestra toda la esencia y tradición musical que se respira por toda Irlanda.
Grandes músicos y gran voz la de Hansard.

Siendo optimistas, se podría basar la crítica en que la fotografía es impresionante, es clásica, paisajista, y muy espectacular. Buenas composiciones y buen manejo de la luz. Es un documental muy bien rodado, visualmente, claro.

Siendo realistas, es muy, muy, muy, muy lenta, es más, aburrida, muy aburrida. De hecho, he de reconocer que es la primera vez, creo, que no veo terminar una película. Me parecia estar perdiendo el tiempo miserablemente, y decidí dejar de hacerlo. Menos mal que fue en DVD, si es en cine, me la hubiera tenido que "zampar" entera.

Los indígenas muy bien plasmados y una vez más, muy bien visualmente. Sobre todo la debutante protagonista Q'orianka Kilcher.

Difícil de digerir, muy difícil de digerir.