Aunque es la más floja de la trilogía (no sé si por eso es la que menos reponen en Televisión) sigue siendo muy, muy entretenida.

CARA A: Lo mejor de la película es, sin duda, haber mantenido a los mismos actores, ya que están tan identificados en los personajes, que habría sido una pena que, por ejemplo, hubiera cambiado Chistopher Lloyd como Emmett Brown.

CARA B: El futuro que imaginaron.... en fin..... podrían haberle echado un vistazo a "Blade Runner" simplemente como inspiración.

La película no es más un ejercicio de melancolía hippie completo de chorradas realizado para mayor gloria de Paul Ruud y Jennifer Aniston, que por cierto, tienen química como pareja en la pantalla, pero cada vez hacen peores películas.

La historia, está muy cogidita con alfileres: típica pareja neoyorkina a la que le suceden algunos reveses, y que para salir y escapar de todo y de todos (es algo muy actual, ¿no?), se quedan a vivir en una comuna hippie con las ventajas y e inconvenientes que ello conlleva.........y con el final que todo el mundo espera.

Lo único que se salva son los secundarios, generalmente bastante conseguidos (sobre todo Alan Alda).

En fin, película para olvidar.

Pues como dice el título de mi crítica, se trata de una tragicomedia romántica bastante sensiblera, pero que, deja un buen regustillo, y que está aceptablemente ejecutada., por lo que, se trata de es una película interesante.

Lo mejor, las interpretaciones de los protagonistas, que sostienen la trama. Lo peor, el guión, en ocasiones muy poco rematado (vamos, que no me parece muy creíble, aunque parece que está inspirada en hechos reales).

Se puede ver un día/noche que se sienta uno/a romantico/a. Es mejor que se abstengan los detratores del género, porque no aporta absolutamente nada nuevo.

Más que aceptable retrato del proceso posterior al asesinato de Abraham Lincoln, en el que un abogado acepta a regañadientes la defensa de una mujer implicada en la conspiración del mismo.

El desarrollo y la dirección de la película son bastante más que aceptables, y tiene unos personajes muy bien trabajados (excelente reparto) y muy creíbles, aunque se hace demasiado lenta en algunos tramos. La resolución de la trama principal es bastante predecible pero no así el final de la película.

En fin, si le gustan las películas de época, o las de intriga, o las que mezclan ambas cosas, le merecerá la pena verla.

Pocas veces una película tan violentamente fría deja un sentimiento tan cálido en el espectador. Porque "Drive" es una redacción aséptica y cruda de la vida de un virtuoso inexpresivo al volante cuya vida da un vuelco total cuando conoce a su vecina (y al hijo y pareja de ésta -bien, Oscar Isaac, como siempre-).

Impresionantes la fotografía, BSO y la manera de "perpetrar" la película de Nicolas Winding Refn.