Las conclusiones a la que se pueden llegar en el final de esta película son únicamente dos (por supuesto deducidas, ya que ni se preocupan en explicarte la razón por la que has perdido 1 hora y media preciada):

- El marido de Martha no está muerto, y su hobbie es matar a todo el que cruza la puerta de la casa donde alguna vez vivió la hermana de la protagonista

- En una de las jornadas de puertas abiertas, alguien se quedó dentro de la casa y empezó a molestar a sus inquilinos hasta que ya decidió quedarse la casa para el solo y dijo, pues venga, los mato y ya tengo donde vivir.

Sea como sea, la película no tiene ni pies ni cabeza. Al final la muerte del padre del personaje interpretado por Dylan Minnette resulta ser irrelevante en el argumento y creo que es pasarse un poco el hacer que después de sufrir la muerte de un ser querido, al final madre e hijo mueran también por culpa de un loco de la cabeza.... Que desperdicio...

Entre otras cosas que se me escaparan, voy a detallar algunas que son dignas de mención:

- La escena en la que Leía sale disparada por el espacio y, sorprendentemente, demuestra ser el alter ego de Supergirl y vuelve a la nave deslizándose cual ave fénix.... Sin comentarios

- La bipolaridad o personalidad múltiple que demuestra Kylo Ren... Ya no se sabe si es un Sith, si es un Jedi indignado y rencoroso, si lo que quiere es ir por libre y convertir la galaxia en su patio de colegio... Vamos, que cuando mata al líder Snoke y pelea junto a Rey haciéndonos creer que está de su parte, y de repente ese maravilloso giro de guión en el que decide que le dan por saco a todo, pues te dan ganas de cortarte las venas y denunciar al director

- Al final tantas especulaciones con el líder Snoke, que hubiera sido una sorpresa increíble el descubrir que era el legendario Darth Plagueis (Maestro de Darht Sidious y que supuestamente fue asesinado por su alumno), y al final muere atravesado por un sable de luz, el cual no detecta que está a 10 centímetros de el, pero por supuesto es capaz de leer y dominar la mente de Kylo Ren en todo momento... Pues parece que no era tan poderoso como prometia....

- La falta de combates con sables láser... Eso siempre ha sido uno de los puntales de las películas, y en esta escasean tanto que casi son inapreciables... El clímax se alcanza cuando Kylo Ren pelea con Luke y este último hace la típica escena Matrix para esquivar su ataque... De risa

- Ahora Luke, de repente, es capaz de crear un holograma de si mismo y estar en dos lugares al mismo tiempo peleando y con un aspecto físico totalmente distinto... Pues hombre, más que estar en el exilio, parece que se ha estado entrenando con el maestro Mutenroshi

- El desaprovechar a personajes tan interesantes como Finn, y eliminarle la fortaleza y personalidad que demostraba Rey en el Episodio VII...

- Los toques de humor que no venían a cuento, y que ya aparecían de alguna manera en el episodio anterior pero que aquí se introducen con calzador porque claro, Disney tiene que infantilizar todas sus películas de acción real y quitarle la personalidad que arrastran desde hace años... Que pena

Y un largo etc, etc, etc que en muchísimos momentos me sacaban de la película y conseguían que estuviera viendo más una película de ciencia ficción para todos los publicos, que el octavo Episodio, repito, de una de mis sagas favoritas y una de las más emblemáticas del panorama cinematográfico.... Mi única esperanza recae en que J J Abrams será quien de el toque final a esta irregular tercera trilogía, y espero que Disney recapacite y no de el control absoluto de la cuarta (e innecesaria) trilogía galáctica, a este gran director y humorista (entiéndase el sarcasmo) llamado Rían Johnson

- Como se detalla y a que nivel, la fusión de esos microorganismos alienígenas con la flora de nuestro planeta. Es increible no solo la idea, sino la forma de ejecutarla, y como poco a poco se va adueñando de la sociedad.
- El maquillaje es impecable, los clones alienígenas de nuestros protagonistas están increíblemente diseñados, y la atmósfera que se crea, la cual consigue en todo momento transmitirte el sentimiento de los protagonistas al ver como las personas de su entorno se están convirtiendo en desconocidos con comportamientos cuanto menos extraños.
- Las interpretaciones de todo el reparto, destacando a Leonard Nimoy, Brooke Adams y Donald Surherland, este último, para mi, uno de los mejores actores de su generación. Saben cómo hacer que vivas en todo momento su situación y compartas sus inquietudes durante todo el visionado. Además te sientes identificado con el personaje de Brooke, porque como alguien va a creer que tú marido de un día para otro ha cambiado su forma de ser y actuar, sin pensar antes que nada, en que se te ha ido la cabeza o simplemente buscas un argumento para abandonarle. Es brillante
- Su sorprendente fluidez y lo entretenida e intensa que es durante sus casi dos horas de duración.

En definitiva, una obra digna de estar entre las mejores de cada una de nuestras videotecas.