You must be a loged user to know your affinity with ChincheSinsel
Críticas ordenadas por utilidad
Movie added to list
Movie removed from list
An error occurred
8
16 de marzo de 2025
16 de marzo de 2025
1 de 1 usuarios han encontrado esta crítica útil
"Under the Silver Lake" es una película fresca e irreverente, que coge los referentes de varias generaciones de cineastas para retorcerlos y plantear un juego gamberro. La estética es memorable, un remake original del cine negro clásico y del neo-noir... ¿posneonoir?
Creo que esta película le gustará a las personas que disfrutaron viajes oníricos de un par de noches protagonizados por un varón joven, que vive en una gran ciudad, que enfrenta una crisis existencial y que, en definitiva, lleva una vida poco envidiable. Estoy pensando en thrillers kafkianos como "After hours" (1985), "Brazil" (1985) o la primera filmografía de los Cohen. Una película para dejarse llevar, a la que es necesario comprarle bastantes premisas y concederle unos cuantos golpes de guion. Pero que con la predisposición adecuada se hace muy disfrutable.
Creo que esta película le gustará a las personas que disfrutaron viajes oníricos de un par de noches protagonizados por un varón joven, que vive en una gran ciudad, que enfrenta una crisis existencial y que, en definitiva, lleva una vida poco envidiable. Estoy pensando en thrillers kafkianos como "After hours" (1985), "Brazil" (1985) o la primera filmografía de los Cohen. Una película para dejarse llevar, a la que es necesario comprarle bastantes premisas y concederle unos cuantos golpes de guion. Pero que con la predisposición adecuada se hace muy disfrutable.
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama. Ver todo
spoiler:
La película ha generado un fanbase obsesionada con descifrar los secretos que esconde el metraje. También ha suscitado multitud de sobreinterpretaciones (Sam es un perro, todo es un sueño, Sam es esquizofrénico o depresivo...).
Sin embargo, creo que el mensaje que trata de trasmitir David Robert Mitchell es el contrario. La vida suele ser más sencilla de lo que parece. Buscar conspiraciones es una forma de llenar el vacío existencial, pero puede resultar dañina. En ocasiones es más prudente disfrutar de un buena película, de sus escenas, giros y propuestas estéticas, que obsesionarse con encontrar el significado oculto, único y definitivo que explica toda la trama.
Sin embargo, creo que el mensaje que trata de trasmitir David Robert Mitchell es el contrario. La vida suele ser más sencilla de lo que parece. Buscar conspiraciones es una forma de llenar el vacío existencial, pero puede resultar dañina. En ocasiones es más prudente disfrutar de un buena película, de sus escenas, giros y propuestas estéticas, que obsesionarse con encontrar el significado oculto, único y definitivo que explica toda la trama.

5,3
3.135
7
2 de marzo de 2025
2 de marzo de 2025
3 de 6 usuarios han encontrado esta crítica útil
Todavía no tengo claro porque me ha gustado tanto The Monkey. Se supone que el punto fuerte de la película es su humor negro desplegado en las múltiples muertes surrealistas y sangrientas causadas por el macaco, pero lo cierto es que el género gore no me atrae demasiado. El metraje me parece que tiene buen ritmo y la adaptación del guion es correcta, aunque en los compases finales el argumento pierde un poco de fuerza ante el absurdo de las situaciones representadas. Entonces, ¿por qué me ha fascinado tanto?
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama. Ver todo
spoiler:
1) Me han gustado mucho las píldoras de humor negro no-gore que contiene el metraje. La escena del joven cura predicando en el funeral de la niñera de los gemelos me parece memorable. Un gag de posthumor magnifico (y breve).
2) Me parece muy notable el cuidado por los pequeños detalles que muestra Osgood. En la escena final, cuando Hal y su hijo recorren en coche la villa arrasada por la ira mortal del mono (que no es más que un vehículo de expresión de la sed de venganza fratricida de Bill, su hermano gemelo) presenciamos “pequeñas” muertes de los más pintorescas. Se me ha quedado grabada la imagen, cargadísima de humor negro y absurdo, de una madre corriendo por el césped con un carrito de bebé en llamas.
3) La película contiene escenas virtuosas, que se han quedado en mi memoria. En especial, me han encantado la escena de la muerte de la mujer bañista en el motel donde Hal y su hijo pasan la noche (una escena que, creo, da pistas sobre la lógica profunda del funcionamiento del mono: prioriza la muerte de personas afectivamente cercanas a Hal, debido al pacto que firman cuando es adolescente). Me parece una escena fantástica, con una gran fotografía y coreografía. Otras escenas que me han interesado son los sueños de Hal, especialmente el sueño en el que su madre le da consejos. O la escena final cuando Hal y su hijo se cruzan con la muerte y cada cual sigue su camino con un respeto mutuo.
4) Pero lo que más me ha fascinado de la película es su tono existencialista, empapado de melancolía, nostalgia, fatalismo y una actitud de levedad irónica frente a la consciencia de nuestra condición finita y absurda. Los personajes de la película son personas atormentadas. Adolescentes marcados por la muerte de sus familiares cercanos, sabiéndose portadores de traumas y maldiciones que los acompañarán de por vida. Vidas dañadas por la orfandad, el miedo a dañar a personas queridas, la guerra, el deseo de venganza y los conflictos familiares. Y, sin embargo, vidas (y muertes) que son afrontadas con humor tragicómico, quitando peso a la existencia y mirando al futuro con levedad. (Una actitud y filosofía de vida que, creo, puede resonar a la propia biografía del director.)
Lois, la madre de los gemelos, es quien mejor transmite este estado afectivo. “Everybody dies, and that´s life”, les dice a sus hijos tras el funeral de la niñera (y días antes de su propia muerte). ¿Y qué hacer ante la fatalidad de la muerte causada por la ignorancia y los vicios humanos y la pulsión demoníaca de un mono (¿de juguete?)? Bailar. Bailar al son del tambor.
2) Me parece muy notable el cuidado por los pequeños detalles que muestra Osgood. En la escena final, cuando Hal y su hijo recorren en coche la villa arrasada por la ira mortal del mono (que no es más que un vehículo de expresión de la sed de venganza fratricida de Bill, su hermano gemelo) presenciamos “pequeñas” muertes de los más pintorescas. Se me ha quedado grabada la imagen, cargadísima de humor negro y absurdo, de una madre corriendo por el césped con un carrito de bebé en llamas.
3) La película contiene escenas virtuosas, que se han quedado en mi memoria. En especial, me han encantado la escena de la muerte de la mujer bañista en el motel donde Hal y su hijo pasan la noche (una escena que, creo, da pistas sobre la lógica profunda del funcionamiento del mono: prioriza la muerte de personas afectivamente cercanas a Hal, debido al pacto que firman cuando es adolescente). Me parece una escena fantástica, con una gran fotografía y coreografía. Otras escenas que me han interesado son los sueños de Hal, especialmente el sueño en el que su madre le da consejos. O la escena final cuando Hal y su hijo se cruzan con la muerte y cada cual sigue su camino con un respeto mutuo.
4) Pero lo que más me ha fascinado de la película es su tono existencialista, empapado de melancolía, nostalgia, fatalismo y una actitud de levedad irónica frente a la consciencia de nuestra condición finita y absurda. Los personajes de la película son personas atormentadas. Adolescentes marcados por la muerte de sus familiares cercanos, sabiéndose portadores de traumas y maldiciones que los acompañarán de por vida. Vidas dañadas por la orfandad, el miedo a dañar a personas queridas, la guerra, el deseo de venganza y los conflictos familiares. Y, sin embargo, vidas (y muertes) que son afrontadas con humor tragicómico, quitando peso a la existencia y mirando al futuro con levedad. (Una actitud y filosofía de vida que, creo, puede resonar a la propia biografía del director.)
Lois, la madre de los gemelos, es quien mejor transmite este estado afectivo. “Everybody dies, and that´s life”, les dice a sus hijos tras el funeral de la niñera (y días antes de su propia muerte). ¿Y qué hacer ante la fatalidad de la muerte causada por la ignorancia y los vicios humanos y la pulsión demoníaca de un mono (¿de juguete?)? Bailar. Bailar al son del tambor.

6,5
33.299
5
4 de marzo de 2025
4 de marzo de 2025
1 de 2 usuarios han encontrado esta crítica útil
La sustancia es una película de serie B con pasta. Para entendernos, definiré como serie B aquellas películas, generalmente de sci-fi o terror, que abusan de efectos especiales cutrillos, sus personajes tienden a actuar siguiendo racionalidades arbitrarias y los guiones están agujereados hasta por el lomo. Una definición inexacta y polémica, pero que creo que valdrá para desarrollar esta crítica.
Me parece que solo interpretándola así se pueden conceder todas las licencias que se toma la película: personajes con una racionalidad dudosa, sino al puro servicio del guion, ante situaciones complejísimas; un desenlace de terror corporal extenso y saturante; escenas que parecen videoclips (y no hablo de las del pegadizo programa Pump it up), etc. El cine de serie b permite estas concesiones. Pero el cine de serie b no gana grandes festivales, ni sus actrices son nominadas a los Oscars. ¿No?
He ahí mi dilema. Si leo la sustancia como serie B me parece una película interesante, entretenida por momentos, pero prescindible (desarrollo esto en los spoilers). Si me la tomo en serio, si intento entrar en la psicología de sus personajes, en las elecciones estéticas, en el desarrollo del guion, pues poca cosa, la verdad.
Me parece que solo interpretándola así se pueden conceder todas las licencias que se toma la película: personajes con una racionalidad dudosa, sino al puro servicio del guion, ante situaciones complejísimas; un desenlace de terror corporal extenso y saturante; escenas que parecen videoclips (y no hablo de las del pegadizo programa Pump it up), etc. El cine de serie b permite estas concesiones. Pero el cine de serie b no gana grandes festivales, ni sus actrices son nominadas a los Oscars. ¿No?
He ahí mi dilema. Si leo la sustancia como serie B me parece una película interesante, entretenida por momentos, pero prescindible (desarrollo esto en los spoilers). Si me la tomo en serio, si intento entrar en la psicología de sus personajes, en las elecciones estéticas, en el desarrollo del guion, pues poca cosa, la verdad.
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama. Ver todo
spoiler:
Lo que más me ha gustado de la película es cómo construye la vida en el apartamento de Elizabeth-Sue. De alguna forma, transmite cierta sensación de hogar, que se va desintegrando poco a poco, inundando las estancias de melancolía, arrepentimiento y desesperación. Las resonancias a Réquiem por un sueño y al baño de Saw son bastante evidentes.
No me ha gustado el uso del terror corporal en el desenlace. Cansa, satura, redunda... se (me) hace muuuy largo, y estéticamente es algo que está bastante visto. Pienso, por ejemplo, en cómo "Men" de Alex Garland usa este mismo recurso en el clímax dramático del metraje y no hay color. Creo que al final de La sustancia le falta simbolismo, capacidad de impresionar y, en fin, algo que contar. A no ser que sea cine de serie b...
El mensaje del filme está bien, supongo. En el mundo del espectáculo reina la efebocracia edadista y el sexismo: los cuerpos femeninos solo valen cuando son jóvenes y atractivos, las mujeres maduras son apartadas de los focos con violencia (por hombres poderosos entrados en años), dejando vidas dañadas por el camino. Bien: El crepúsculo de los dioses, 1950. ¿Algo más? ¿Acaso el film contiene una crítica que equipara las modificaciones estéticas del cuerpo (femenino) con una mortificación patriarcal autoinflingida? De ser así me parece un mensaje no solo manido, sino conservador y casi reaccionario. Si algo nos ofrece la posmodernidad, lo queer, es la posibilidad, para quien quiera, de experimentar con nuestros cuerpos. ¡Dejad a les chavales que camelen!
En definitiva, que la peli no está mal. El planteamiento y el nudo tiene un estilo thriller bastante potente, pero el final deviene en cine cutrillo que gustará especialmente a las/os amantes del body horror ochentero y del feminismo macarrilla.
Dicho lo cual, ¿en qué momento Demi Moore le iba a quitar el Oscar a Mikey Madision? Hold on un momentito.
No me ha gustado el uso del terror corporal en el desenlace. Cansa, satura, redunda... se (me) hace muuuy largo, y estéticamente es algo que está bastante visto. Pienso, por ejemplo, en cómo "Men" de Alex Garland usa este mismo recurso en el clímax dramático del metraje y no hay color. Creo que al final de La sustancia le falta simbolismo, capacidad de impresionar y, en fin, algo que contar. A no ser que sea cine de serie b...
El mensaje del filme está bien, supongo. En el mundo del espectáculo reina la efebocracia edadista y el sexismo: los cuerpos femeninos solo valen cuando son jóvenes y atractivos, las mujeres maduras son apartadas de los focos con violencia (por hombres poderosos entrados en años), dejando vidas dañadas por el camino. Bien: El crepúsculo de los dioses, 1950. ¿Algo más? ¿Acaso el film contiene una crítica que equipara las modificaciones estéticas del cuerpo (femenino) con una mortificación patriarcal autoinflingida? De ser así me parece un mensaje no solo manido, sino conservador y casi reaccionario. Si algo nos ofrece la posmodernidad, lo queer, es la posibilidad, para quien quiera, de experimentar con nuestros cuerpos. ¡Dejad a les chavales que camelen!
En definitiva, que la peli no está mal. El planteamiento y el nudo tiene un estilo thriller bastante potente, pero el final deviene en cine cutrillo que gustará especialmente a las/os amantes del body horror ochentero y del feminismo macarrilla.
Dicho lo cual, ¿en qué momento Demi Moore le iba a quitar el Oscar a Mikey Madision? Hold on un momentito.

6,2
3.251
7
9 de marzo de 2025
9 de marzo de 2025
1 de 3 usuarios han encontrado esta crítica útil
No soy experto en la historia moderna de Austria, ni creo que lo sea en un futuro. Tampoco soy psicólogo, ni mucho menos historiador de la locura. Esto es importante, creo, para entender el lugar desde el que enuncio esta reseña/crítica. Y lo es porque, a mi juicio, uno de los puntos fuertes de "El baño del diablo" es su reconstrucción realista de la vivencia de la depresión femenina en un pueblo austríaco del siglo XVIII. Una exploración informada e inspirada en una tesis doctoral sobre el tema, que diría que bebe de la historia antropológica de la Escuela de los Anales, es decir, que se interesa por comprender las mentalidades -creencias, deseos, miedos- de las sociedades históricas.
Dicho esto, ¿quién soy yo para evaluar la veracidad de la trama? ¿Quién soy yo para juzgar si reconstruye adecuadamente la psicología de los y las austríacas de aquel lugar en aquel momento? Nadie, la verdad. Entonces, ¿de qué escribo? Pues me limitaré a dar algunas impresiones sueltas.
Dicho esto, ¿quién soy yo para evaluar la veracidad de la trama? ¿Quién soy yo para juzgar si reconstruye adecuadamente la psicología de los y las austríacas de aquel lugar en aquel momento? Nadie, la verdad. Entonces, ¿de qué escribo? Pues me limitaré a dar algunas impresiones sueltas.
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama. Ver todo
spoiler:
1) Diría que he visto la película un poco sugestionado. El reclamo que me llevó a ella fue su categorización como folk horror, esperando encontrarme algo parecido, al menos estéticamente, a "El hombre de mimbre" o "La bruja". Pasé el nudo del metraje esperando un giro, una muestra de que la protagonista practicaba algún tipo de magia (negra o blanca), que introdujese el terror en la trama. Pero la espera fue en vano. En su lugar, la película plantea la vivencia de Agnes, una mujer, casi adolescente, recién casada, que padece depresión por las presiones sociales que sufre por parte de la familia de su marido (su suegra, fundamentalmente) y que se siente incapaz de cumplir, en un marco ideológico empapado por un cristianismo católico con reminiscencias paganas. El terror es psicológico y crece paulatinamente con la trama, con el avance progresivo de la depresión de Angnes, hasta cristalizar en la penúltima escena en la que esta se confiesa para alcanzar la paz eterna.
2) Uno de los puntos que más me ha interesado es su exploración de la economía de la salvación cristiana. Si la reforma protestante eclosionó con la protesta de Lutero frente a la venta de indulgencias consentida por el alto clero, esta película refleja los efectos perversos, y no deseados, de una economía de la salvación que promete la gracia por la mera intercesión de un prelado autorizado; aunque la gracia, la salvación, se consiga por medios mercantiles o, incluso, mediante el asesinato de niños y adolescentes (sobra decir, que inocentes). Esta marco institucional, aunado a las presiones sociales propias de sociedades patriarcales con sistemas de parentesco patrilocales, empuja a las jóvenes recién casadas al dolor psicológico.
3) Las presiones sociales tienen nombre y apellido: tener descendencia. Esta es la principal obsesión de Agnes, que le es socialmente impuesta. Aquí, la película sugiere que Wolf, su marido, no tiene relaciones sexuales con ella por sus inclinaciones homosexuales; una cuestión que la trama únicamente esboza, pero que me gustaría que desarrollase con mayor detalle.
4) Lo que menos me ha gustado ha sido la banda sonora. La música diegética está genial, pero el recurso a los típicos violines del género terror-thriller en el desenlace me sobran bastante, más teniendo en cuenta el enfoque realista de la trama.
5) En definitiva, me parece una película muy interesante. Un pedazo de historia con calidad artística, del que yo no soy capaz de evaluar su veracidad. No es terror y tiene un ritmo lento. Y si vas buscando folk horror puede decepcionarte. Pero la sensación última es la de una película que plantea un retrato de la depresión profundo, sensible y anclado en un contexto local muy particular. Creo que perdurará en mi recuerdo.
2) Uno de los puntos que más me ha interesado es su exploración de la economía de la salvación cristiana. Si la reforma protestante eclosionó con la protesta de Lutero frente a la venta de indulgencias consentida por el alto clero, esta película refleja los efectos perversos, y no deseados, de una economía de la salvación que promete la gracia por la mera intercesión de un prelado autorizado; aunque la gracia, la salvación, se consiga por medios mercantiles o, incluso, mediante el asesinato de niños y adolescentes (sobra decir, que inocentes). Esta marco institucional, aunado a las presiones sociales propias de sociedades patriarcales con sistemas de parentesco patrilocales, empuja a las jóvenes recién casadas al dolor psicológico.
3) Las presiones sociales tienen nombre y apellido: tener descendencia. Esta es la principal obsesión de Agnes, que le es socialmente impuesta. Aquí, la película sugiere que Wolf, su marido, no tiene relaciones sexuales con ella por sus inclinaciones homosexuales; una cuestión que la trama únicamente esboza, pero que me gustaría que desarrollase con mayor detalle.
4) Lo que menos me ha gustado ha sido la banda sonora. La música diegética está genial, pero el recurso a los típicos violines del género terror-thriller en el desenlace me sobran bastante, más teniendo en cuenta el enfoque realista de la trama.
5) En definitiva, me parece una película muy interesante. Un pedazo de historia con calidad artística, del que yo no soy capaz de evaluar su veracidad. No es terror y tiene un ritmo lento. Y si vas buscando folk horror puede decepcionarte. Pero la sensación última es la de una película que plantea un retrato de la depresión profundo, sensible y anclado en un contexto local muy particular. Creo que perdurará en mi recuerdo.

5,6
10.898
8
16 de marzo de 2025
16 de marzo de 2025
0 de 1 usuarios han encontrado esta crítica útil
Esta reseña es un alegato a favor de "The neon demon". En concreto, quiero defender a la película de tres acusaciones, a saber: que es misógina, que es absurda (en el mal sentido del término) y que si no tenemos en cuenta su simbología resulta plana. Aclaro que mis argumentos están sesgados por diferentes motivos. No soy experto en el mundo de la moda, solo he visto otra película del director ("Drive") y "The neon demon" es un tipo de cine que no suelo consumir. Dicho lo cual, ahí va mi defensa.
Buena parte de las personas que han valorado negativamente "The neon demon" argumentan que es una película misógina. Creo que afirmar que una película "odia a las mujeres" es un poco absurdo, por lo que diremos, mejor, que argumentan que es una película sexista. ¿Dónde estaría el sexismo? En que el filme representa a las mujeres del mundo de la moda como despiadadas, competitivas, obsesionadas con la belleza juvenil y sin un ápice de compasión hacia sus rivales. Esta sería, pues, una imagen negativa de las mujeres; una imagen sexista. Creo que es fácil darle la vuelta al argumento. Lo que plantea la película es que las mujeres se comportan "como demonios" porque son víctimas de una industria de la moda patriarcal, capitalista y edadista. Una industria que recuerda, de forma localizada, a los molinos satánicos del capitalismo, que trituran sin piedad todo lo mercantilizable, de los que hablaba Karl Polanyi. Un mensaje, por otro lado, que sintoniza con el de la aclamada "The substance" (2024).
La segundo tipo de crítica negativa es que la película es absurda. Como dice Boyero en su reseña destacada en esta nuestra comunidad digital: "aquí [Refn] practica incansablemente el onanismo mental (...) desconoce el sentido del ridículo (...) las idioteces se suceden hasta llegar a un final demente. Y te preguntas: "¿Qué se ha tomado este tío para sentarle tan mal?". Yo me preguntó si Boyero y yo habremos visto la misma película. Entiendo que pueda resultar una película lenta, incluso con un mensaje un tanto unívoco que puede resultar redundante. Pero creo que el filme es coherente en su trama, estética y desarrollo de personajes. Es más, el argumento de la trama es muy sencillo de seguir; para nada resulta confuso o recurre a elementos surrealistas. El final, por otra parte, no es para nada "demente", en todo caso recurre a un terror semi-gore para destacar la tesis principal del metraje.
Finalmente, es cierto que gran parte de la gracia de la película es su simbología. Los tres triángulos, los colores, el leopardo... Pero creo que su visionado es muy disfrutable más allá del análisis sistemático de estos símbolos.
Buena parte de las personas que han valorado negativamente "The neon demon" argumentan que es una película misógina. Creo que afirmar que una película "odia a las mujeres" es un poco absurdo, por lo que diremos, mejor, que argumentan que es una película sexista. ¿Dónde estaría el sexismo? En que el filme representa a las mujeres del mundo de la moda como despiadadas, competitivas, obsesionadas con la belleza juvenil y sin un ápice de compasión hacia sus rivales. Esta sería, pues, una imagen negativa de las mujeres; una imagen sexista. Creo que es fácil darle la vuelta al argumento. Lo que plantea la película es que las mujeres se comportan "como demonios" porque son víctimas de una industria de la moda patriarcal, capitalista y edadista. Una industria que recuerda, de forma localizada, a los molinos satánicos del capitalismo, que trituran sin piedad todo lo mercantilizable, de los que hablaba Karl Polanyi. Un mensaje, por otro lado, que sintoniza con el de la aclamada "The substance" (2024).
La segundo tipo de crítica negativa es que la película es absurda. Como dice Boyero en su reseña destacada en esta nuestra comunidad digital: "aquí [Refn] practica incansablemente el onanismo mental (...) desconoce el sentido del ridículo (...) las idioteces se suceden hasta llegar a un final demente. Y te preguntas: "¿Qué se ha tomado este tío para sentarle tan mal?". Yo me preguntó si Boyero y yo habremos visto la misma película. Entiendo que pueda resultar una película lenta, incluso con un mensaje un tanto unívoco que puede resultar redundante. Pero creo que el filme es coherente en su trama, estética y desarrollo de personajes. Es más, el argumento de la trama es muy sencillo de seguir; para nada resulta confuso o recurre a elementos surrealistas. El final, por otra parte, no es para nada "demente", en todo caso recurre a un terror semi-gore para destacar la tesis principal del metraje.
Finalmente, es cierto que gran parte de la gracia de la película es su simbología. Los tres triángulos, los colores, el leopardo... Pero creo que su visionado es muy disfrutable más allá del análisis sistemático de estos símbolos.
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama. Ver todo
spoiler:
La fotografía, la música y, en general, la estética, es estupenda. La escena de la fiesta al principio del metraje es totalmente cautivadora, con un juego de miradas que dice más que cien líneas de diálogos. ¡Puro cine!
Hablando de escenas, mi escena favorita es la del debut en pasarela de Jesse. Una forma colosal de representar su transformación de modelo novata en demonio de la moda. Los colores, la música, su actuación... representan magistralmente su subjetivación como modelo profesional lista para competir en un mundo salvaje. No es necesario analizar si el triángulo simboliza el demonio y/o el empoderamiento femenino para disfrutar de esta escena.
La belleza es lo único... pero es peligrosa. O al menos dentro de esta industria de la moda. El desenlace de la trama, muestra cómo la belleza de Jesse es dañina en múltiples sentidos: dañina para quien la desea sexualmente (la maquilladora), dañina para quien la desea profesionalmente (las dos modelos) y dañina para quien la usa de forma consciente (para la propia Elle). (Sin embargo, resulta menos dañina para los hombres que dirigen el cotarro, quienes organizan sesiones de fotos y pasarelas.) Pero ojo, ¿no sería posible otros modelos de industria de la moda donde la belleza no fuese (auto)destructiva)? ¿Dónde la belleza fuese cuidada?
Pero la película no roba la agencia a las mujeres que pululan por el mundo de la moda. Las presenta como víctimas, pero les deja espacio para expresar su subjetividad. Es Jesse quien decide vender su alma al diablo, contra los consejos de su ligue (¿un reverso fallido de Gosling en "Drive"?). Pero también vemos que sus decisiones están condicionadas por su situación de vulnerabilidad: menor de edad, huérfana, sin nadie en quien realmente confiar... expuesta a las agresiones todo tipo de leopardos californianos...
Hablando de escenas, mi escena favorita es la del debut en pasarela de Jesse. Una forma colosal de representar su transformación de modelo novata en demonio de la moda. Los colores, la música, su actuación... representan magistralmente su subjetivación como modelo profesional lista para competir en un mundo salvaje. No es necesario analizar si el triángulo simboliza el demonio y/o el empoderamiento femenino para disfrutar de esta escena.
La belleza es lo único... pero es peligrosa. O al menos dentro de esta industria de la moda. El desenlace de la trama, muestra cómo la belleza de Jesse es dañina en múltiples sentidos: dañina para quien la desea sexualmente (la maquilladora), dañina para quien la desea profesionalmente (las dos modelos) y dañina para quien la usa de forma consciente (para la propia Elle). (Sin embargo, resulta menos dañina para los hombres que dirigen el cotarro, quienes organizan sesiones de fotos y pasarelas.) Pero ojo, ¿no sería posible otros modelos de industria de la moda donde la belleza no fuese (auto)destructiva)? ¿Dónde la belleza fuese cuidada?
Pero la película no roba la agencia a las mujeres que pululan por el mundo de la moda. Las presenta como víctimas, pero les deja espacio para expresar su subjetividad. Es Jesse quien decide vender su alma al diablo, contra los consejos de su ligue (¿un reverso fallido de Gosling en "Drive"?). Pero también vemos que sus decisiones están condicionadas por su situación de vulnerabilidad: menor de edad, huérfana, sin nadie en quien realmente confiar... expuesta a las agresiones todo tipo de leopardos californianos...
Más sobre ChincheSinsel
Cancelar
Limpiar
Aplicar
Filters & Sorts
You can change filter options and sorts from here