Veamos... me apetecía ver musicales, así que ese fin de semana me alquilé dos musicales: chicago y al otro lado de la cama.

Reconozco que tengo una cierta predisposición negativa hacia el cine español, con esto no estoy diciendo que sea ni bueno ni malo, simplemente que es una forma de hacer cine que no me gusta. Pero bueno, me la habían recomendado mucho, que te tronchabas de risa, y encima había números de baile...

Pues eso, que las alquilé. Veo Chicago y casi me muero del gusto, qué pasada de película, de hecho el lunes me la compré.

Veo al otro lado de la cama... la terminé de ver sólo por un motivo: pagué por verla. SI en vez de alquilarla la viera en la tele, dudo que hubiera aguantado más de media hora. Se me hizo muyyyy duro.

No entiendo ese tipo de humor escatológico, no me hacen gracia los chistes sexuales, no le ví la gracia a ninguna de las situaciones narradas. A los 5 primeros minutos ya sale la primera actriz en pelotas (marca de la casa, cine español sin actrices en pelotas sin venir a cuento no es cine español)... por supuesto a lo largo de la película ya se encargaron de despelotar al resto... que ese público no pase hambre, debieron de pensar los guionistas.

Vale, como comedia un asco, pero es un musical...¿musical? por favor. Vamos a ver, hay varias cosas que no entiendo:

la primera: si contratas a un grupo de actores para participar en un musical, lo normal es que canten o bailen o las dos cosas. Pero es increíble que ninguno, y cuando digo ninguno es NINGUNO cante o baile.

la segunda: contratas a un cuerpo de baile (visto que los actores nanai) y resulta que en España tenemos a grandes bailarines, hay mucho nivel en danza... y entonces aparece el coreógrafo en acción y les pone a hacer una coreografía de patio de colegio. Yo no daba crédito

Si yo contrato a un bailarín profesional lo pongo a hacer 30 foutes seguidos, pero para hacer coreografías tipo parchis cantando izquierda izquierda derecha derecha... vete a un instituto, píllate a la clase del último año, les das un bocata y aún se echan unas risas... una vergüenza.

Claro, luego decimos que si el cine de Hollywood tiene más dinero para hacer otras cosas, no señores, lo que pasa es que se toman al público en serio, y cuando haces un musical te cuesta lo mismo hacer una coreo que otra. Pero claro, no vaya a ser que nos digan que nos hemos pasado de espectáculo y ya no es cine español

Así nos va...

Huelga decir que la segunda parte de la película (sí, aunque parezca increíble hicieron otra), ni la ví, ni pienso verla

Valeee, me gustan los musicales, los adoro, de hecho, ¿qué no te gustan? ¿y qué haces viendo uno?

El género musical yo creo que es el género que más filias o fobias genera, o lo adoras o te horrorizan. Y en ninguno de los dos casos puedes ser lo suficientemente objetivo para valorarlo.

Sin embargo el caso de Chicago es un poco especial, normalmente los musicales suelen ser historias tontas/tontísimas que sirven de excusa para unos números de baile o canto increíbles. Sin embargo Chicago nos deleita además con una historia, por desgracia, de rabiosa actualidad.

Ese es el motivo por el cual, incluso personas que no soportan los musicales sucumbieron ante Chicago. Unos actores magníficos, una historia buenísima y un ritmo trepidante.

Pero en cuanto al musical... DE 10. Vaya coreografías, qué puesta en escena, vaya sentido del espectáculo, qué bailarines, qué música.

Si buscas una buena película atrévete con Chicago, pero si buscas un buen musical: ¿a qué esperas para verlo?

Come on babe, Why don't we paint the town?... and all that jazz!!!!

El trailer nos sirve para hacernos una pequeña idea de por dónde van los tiros. Y normalmente los trailers suelen ser bastante más amenos y entretenidos que las películas, la verdad es que pocas películas son mucho mejores que los trailers (por desgracia), sin embargo hay algunos trailers que se encargan de cargarse la película.

Este es uno de los ejemplos, cuando ves el trailer lo primero que piensas es que te vas a encontrar con una película porno o pseudo porno. La sorpresa cuando la ves es que te hallas frente a un drama. Esto hace que la gente que haya ido al cine creyendo que iba a ver una pseudoporno haya salido echando pestes de la sala, y por el contrario mucha gente ni la ha visto creyendo que era una pseudoporno y por lo tanto no le interesaba.

Obviando el trailer, tenemos un drama bastante duro. Ambientado en el ambiente más sórdido que nos podamos encontrar, y que se acerca bastante a lo que puede ser realmente ese mundillo con todo lo que conlleva.

Tenemos a una chica, que por diversos motivos termina sin un duro en las Vegas, y como baila bastante bien acaba bailando en un bar de streeptease. Ella lucha mucho por conseguir subir en ese mundillo e intenta conseguir entrar en un espectáculo llamado "diosas", que no deja de ser culos y tetas pero con más caché.

Toda la película tenemos un duelo entre las dos actrices principales que están estupendas. Y es curioso porque a medida que avanza la película una se acaba convirtiendo en la otra: Crystal y Nomi y su relación de amor-odio lesbiano.

Es sorprendente ver como Nomi intenta olvidar en qué mundo está, para ella todo es baile, y de hecho le duele muchísimo y la humilla que le recuerden constantemente que es poco más que una prostituta.

Es una película que si eres capaz de ver más allá de las escenas de sexo, culos y tetas (que hay a patadas) te encontrarás con un muy buen guión con unos personajes muy logrados, y un mundo sórdido con gente cruel y despiadada donde la vida humana le importa un rábano y dónde hay que hacer lo que haya que hacer con tal de subir aunque sea a costa de pisotear al resto de humanos, da igual la relación que tengas con ellos.

Es la respuesta que obtiene nuestra protagonista (sin nombre) al preguntar cómo era su rival fallecida.

Ni una foto de ella, ni un retrato, absolutamente nada, y sin embargo ahí está Rebeca, en todos y cada uno de los planos de la película.

Leí esta impresionante novela hace muchos años, y es el único libro que no me pude contener y tuve que ir a leer directamente el final, no podía aguantar más con la intriga. Sin embargo me tocó fastidiarme, porque la trama se explica dos o tres capítulos antes del final, con lo cual no me quedó más remedio que quedarme sin dormir aquella noche hasta que logré terminar el libro.

La historia es ya sabida: viudo riquísimo, conoce a una chica de clase media que se enamora perdidamente de él. Terminan casándose y él se la lleva a Manderley, su impresionante mansión. Sin embargo la añoranza de él por su antigua esposa (fallecida en un accidente de barco), y la comparación que todo el mundo hace entre las dos esposas: Rebeca (la difunta) y la actual, que son como el día y la noche, hace que la vida diaria de ella sea un infierno, puesto que Rebeca era perfecta y ella es totalmente mediocre.

Y vamos a la peli. En principio es un libro espectacular, ideal para llevar a la gran pantalla. Sin embargo si analizamos un poco, es tremendamente difícil conseguir la atmósfera adecuada, puesto que en libro no hay imágenes, pero en una película ¿cómo consigues que la difunta esté presente en todos y cada uno de los planos, sin mostrar ni una sola imagen de ella? y no sólo mostrarla, sino conseguir que la nueva esposa parezca un asquito al lado de la impresionante Rebeca, ¿como haces una comparación si no puedes poner lo que estás comparando?.

Afortunadamente el director era Hitchcock, y gracias a eso, Rebeca existe y lo impregna todo.

Una obra maestra del cine: geniales los actores (Judith Anderson como ama de llaves está soberbia), la fotografía, el ambiente, la música... una genial obra de suspense, donde realmente no hay nada de lo cual tener suspense (recordemos que Rebeca está muerta y nada puede hacer), pero que sin embargo hace que no puedas respirar tan a menudo como deberías

El único punto discordante lo pongo en el final de la trama (aviso, en el spoiler cuento el final, sino habéis visto la película o leído el libro ni se os ocurra leerlo)

Reconozco que siento debilidad por el binomio John Wayne - Mauren O'Hara. Es de las mejores parejas cinematográficas, con una química muy pocas veces vistas en pantalla.

Y de nuevo una película de ellos dos y lo de menos es el guión, que en sí es bastante tonto y se sostiene básicamente por el buen trabajo de los actores que hay detrás.

Es verdad que es una película muy machista donde temas muy serios como los malos tratos en la pareja están tratados con una ligereza, normalidad e incluso humor. Pero es que realmente, está ambientada en el Lejano Oeste del siglo XIX, con lo cual la sociedad era así. Y por lo tanto así hay que tomarla.

Hay escenas antológicas muy divertidas, básicamente las peleas (muy blancas), el rodeo, la subida de la escalera después de los chupitos... pero también hay escenas muy serias que realmente te hacen pensar mucho: