Tenía muchas ganas de ver esta película que trata el tema del "bulling" en los institutos; es decir el acoso de estudiantes a otros estudiantes o profesores.
Por desgracia es una situación que cada día se vive más entre las aulas, y que constantemente lo vemos expuesto en los noticiarios a través de imágenes grabadas por las cámaras de los móviles.
La película debo indicar que es buena, aunque creo que podría haber sido brillante. Desde el principio impacta y uno siente una gran compasión sobre ese joven "Zanahoria", el cual es la diana de todas las gamberradas que producen sus compañeros de clase. Unos chicos que se dejan manipular por un cabecilla que intenta ser el más duro para no demostrar su propio miedo a que nadie le haga caso; o lo que es peor, a que él sea la diana. Para que ser el que recibe la paliza si uno puede ser el que la da.
La historia es dura ya que es algo que se vive día a día y es cercano a todos. Pero aparte de sorprenderse con la actitud de los chavales, uno se sobrecoge al ver la postura de los padres. Unos padres totalmente ocupados con sus trabajos que no se preocupan de conocer a sus hijos, y que cuando sospechan la situación que viven, tampoco se paran a hablar ni a tomar soluciones. Simplemente son cosas de niños.
En fin, una película que sorprende y sobrecoge el corazón en muchos momentos, a la par que uno grita por que ese chico corra más deprisa antes de que le atrapen los indeseables de sus compañeros y vuelvan a robarle o a pegarle.