Aunque la fecha en la que hago esta crítica es a 24 de Mayo, la ví realmente el día de su estreno, el 5 de Mayo (matizo esto para que se sepa que la crítica no es reciente, es decir, inmediatamente después de haber visto la película, sino un par de semanas después).

A pesar de tratarse de más de lo mismo con respecto a las dos primeras, esta tercera parte me ha resultado más espectacular que las anteriores, quizás por el hecho de que se adentra más en la vida personal de Ethan Hunt, pero principalmente por los impresionantes efectos especiales (perfectamente conseguidos) y la gran intepretación de Cruise (sus gestos son tan reales que provocan una enorme emoción).

En general esta producción se puede calificar ESPECTACULAR.

Es una película que podríamos definir como entretenida, inverosimil total, pero entretenida. Aquí el protagonismo absoluto lo tiene Cruise, para él son todos los planos, incluso muchas escenas fueron propuestas que hizo él a J.J Abramas. Es una película que conserva un tono de películas de acción con buenos gags, pero es tan, tan inverosimil que cuesta bastante entrar en ella.

Ésta es una buena película, lo que pasa es que baja mucho de nivel respecto a las anteriores.
Los efectos especiales son muy buenos y los escenarios están muy bien realizados. La banda sonora sigue siendo buena con esa canción principal que ya se ha convertido de un clásico del cine.

Lo único que le falla es el argumento. Mientras que en las otras películas te engancha desde el principio, en esta te cuesta mas coger el ritmo.
Porque es un poco rápida. Y esto impide que los momento interesantes duren mucho.

En la línea de la primera parte de Mision Imposible, esta película nos muestra una acción trepidante, intensidad y un final de infarto; cualidades de las que, en mi opinión, adolecía la segunda parte. Se trata de un buen film que combina perfectamente todos los elementos de la películas de espías, la acción. la intriga y el suspense; muy entretenida.

Supongo que Tom Cruise tendrá otros méritos interpretativos que le harán merecedor de ser uno de los actores mejor pagados en la historia del cine. Resulta agradable verle en pantall, queda bien, tiene un abonita sonrisa y pone una caras de sufrimiento muy convincentes.
Pero no, sospecho que si ha llegado a la cima de su carrera es porque corre como nadie lo que le hace un actor imprescindible para el cine de acción que se lleva hoy en día. Misión imposible III es una oda a la carrera, un elogio al sufrimiento, un canto a la acción, una apología de este tío, que no hay quien lo mate, da igual lo que le hagan o desde la altura que caiga.
Aunque la película es aceptable como tobogán y de cine tiene poquito, habrá que esperar una futura secuela. A fin de cuentas Tom Cruise es inmortal en el cine.