El necrófago

Es una "tontícula" (película tonta) donde, para mi sorpresa, aparece un John Hurt joven en un papel malo, que aún así es más interesante que el de el profesor loco de "Indiana Jones y el reino de la calavera de cristal". También cuenta con una escena que copia la de la ducha de "Psicosis", sólo que en una cama y con la protagonista vestida. Por lo demás, uno se pregunta cómo de mala tuvieron que ser las otras que se presentaron ese año en el Sitges para que le dieran el premio al mejor actor a mi adorado Peter Cushing.

Una verdadera rareza del cine de terror británico, a simple vista por lo que se conoce de su argumento y sobre todo al principio se la puede comparar con algunas películas de la Hammer, en eso de retratar los años 20, y que haya algo siniestro en una mansión rodeada de niebla, pero a la mitad uno se da cuenta que la película es diferente, que si bien usa elementos que ya había utilizado la Hammer, aquí les da una vuelta de tuerca, empezando por el hecho de que no hay héroes claros, y que el personaje de Peter Cushing, es mucho más complejo de lo que aparenta, como nos van desvelando su vida, y su tragedia.
Otro personaje interesante aunque mucho más cercano al cliché, es el de John Hurt, un tipo cobarde, mentiroso.
Bien ambientada, logra laatmosfera gótica requerida.

Al comienzo de la película piensas que será una típica producción de la sobre valorada productora Hammer, y no es así, aunque tiene una ambientación parecida, no llega a estar a la altura de las grandes producciones de su género. Pobre guión, pobre dirección, pobres interpretaciones, historia ridícula y sin desarrollo final, no se sabe el motivo por el cual suceden los acontecimientos (El Zombi ese, ¿Que pinta en la casa?, ¿Cómo a llegado a serlo?). En fin, un subproducto de terror lleno de tópicos y que al final te deja indiferente. Por salvar algo, los buenos decorados.
Conclusión final, una castaña de película, no perdáis el tiempo en verla.

Película clásica de terror con un estilo que pretende emular a la Hammer, con un Peter Cushing tan grande como siempre, y con una historia que no está nada mal, pero con un problema de lentitud bastante grande, y es que toda la primera mitad de la película avanza a un ritmo tan sosegado que casi llega a aburrir.

Aún así, tiene bastante intriga, una buena ambientación, con toda esa ciénaga llena de niebla y esa extraña casa, y con el ambiente malsano que se respira en ella, con los 3 ocupantes, que da la sensación de que ninguno está demasiado bien de la cabeza.

En definitiva, una película con sus faltas, pero que se deja ver bastante bien.