Pésima decisión haber rodado está cosa en Súper 8, porque la definición es nula y la digitalización pésima. Con cualquier móvil y un filtro hubiesen obtenido mejores resultados. La película es un truño, no nos engañemos, aunque seré cortés y diré que tiene algún momento interesante. Las actuaciones son muy malas, de amateurs sin talento, a excepción de Bruna Cusí, que si no brilla más es porque aunque puede que haya una idea general, no hay guión y los diálogos resultan tan tontos como notoriamente improvisados; y, porque la imagen no pasa de borrón desenfocado, llegando a resultar irritante para el espectador. Me sorprende mucho que Cameo la haya editado.

Es una auténtica maravilla. La descubrí en Filmin.es hace pocos días y de forma accidental, ya que buscaba una nimiedad para quedarme dormida rápidamente, y me quedé clavada a la pantalla desde el primer minuto. Y no paro de hablar de ella, de recomendarla... me parece increíble. La obertura, los títulos de crédito... ella está maravillosa, es una pedazo de actriz capaz de levantar cualquier escena. No puedo entender cómo puede haber alguien a quien, ya que no le guste, que no le fascine esta película.

Me ha emocionado. Y lo digo en serio. Que parecería que este comentario lo haya escrito la madre del director o algo así, pero no, no les conozco de nada.

Es absolutamente fantástica. Gracias al equipo por esta película.

La reina de los lagartos construye una narrativa y una calidez bizarras guiada por una potente banda sonora que crece junto a nuestro pequeño asombro ante una pieza que se mueve entre lo intimista y lo cansino.
Intimista por la facilidad con la que nos adentramos en ese submundo tan "vengamonjero" que choca contra nuestra cotidianeidad más ordenada. Aun así el choque se queda en leve, ya que no sale lo suficiente de esa burbujita como para crear un enfrentamiento entre estas dos realidades. Quizás simplemente no lo necesita, quizás saldría perdiendo.
Cansino por su abuso reiterado del gag absurdo pero también en un sentido positivo: sus necesarios silencios y pasajes musicales maravillosos.
La falta de rigidez/sudapollismo actoral -casi todo fue a toma única según ellos- le da una atmósfera bastante genuina y hace que nos quedemos con más ganas de las risas fuera de lugar o sus dudas en la mirada al acabar cada escena.