Me sorprende la crítica que tiene esta película y sobretodo me sorprende la cantidad de premios que ha ganado cuando películas del estilo son defenestradas por la misma.

Es una película entretenida si, sobre un hombre que parece inmortal y el solito se va cargando a todo un ejercito nazi, hasta ahí bien, el problema es que con cada escena la película va exagerando más y más, todo con un tono gore y se va convirtiendo totalmente en irreal, hasta el punto de la última escena del avión que ya si que no hay por donde cogerla.

...mente mala. Debo estar muy despistado, porque no soy capaz de apreciar las bondades que reseñan los críticos profesionales. Y he puesto todo de mi parte, lo juro. Todas las distinciones que se me ocurren para esta cinta serían en festivales de gore, cine del que me declaro poco entendido. He llegado a leer algo sobre humor negro (¿?) e incluso referencias a Tarantino (¿?). Puffff... sigo ciego.
Creo que he visto otra película, que yo describiría, en el mejor de los casos, como una especie de parodia nórdica de "Ice Age", en la que su sustituye a Scrat por un indigente barbudo, y a su bellota por unos cuantos pedazos de oro.
Sorprendente...

Película Finlandesa un tanto desconocida pero que aporta una experiencia de lo más satisfactoria por sus altos niveles de violencia, sangre y vísceras por parte de ese sector de alemanes que destrozaron Europa con sus ansias de conquista.

Jorma Tommila es el protagonista, para mí a título personal es completamente desconocido pero ha caracterizado a este personaje de tan magistral forma que lo tendré en el punto de mira ante futuras producciones que realice.

La trama de esta cinta no es algo demasiado complejo, un solitario buscador de oro que vive con la única compañía de un pequeño perro encuentra una cantidad ingente del material dorado y emprende su camino presuponemos que para poder venderlo. Con lo que no cuenta nuestro vasto amigo es con que aunque estamos en lo que parece el final de la gran Guerra sigue habiendo "Nazis" desperdigados por todo lo que antes era campo de batalla. La historia se cuenta sola, unos nazis sin nada que perder y un hombre que de ningún modo va a a dejar que su preciado oro le sea arrebatado.

Esta película se hace interesante prácticamente desde inicio a fin ya que aun teniendo diálogos básicos, tenemos una puesta en escena maravillosa, el como se siente la suciedad del ambiente o la sangre derramada.

Mi nota para esta película es de un 7/10, se me hace bastante interesante y es merecedora de una oportunidad por parte del público.

Al principio del film, se nos avisa que el término que lleva el título de esta cinta no se puede traducir, que se asemeja a una forma de valentía inimaginable. Y a partir de allí y de algunas descripciones que dan sobre nuestro protagonista en algún tramo de la historia (entre los pocos diálogos que contiene 'Sisu'), entendemos de qué va todo, en un festín de violencia extrema, con litros de sangre que salpican la pantalla (al mejor estilo Tarantino).

Jorma Tommila compone a esta especie de Rambo finlandés que arremete contra los nazis, allá por la década del 40. Un tipo durísimo, resistente a todo, que busca conservar el oro que ha encontrado, resurgiendo una y otra vez: es que, a medida que el relato avanza, el intérprete central sortea todo tipo de situaciones, cada vez más deteriorado y molido (al igual que las letras de una tipografía que también beben del bueno de Quentin, en la división episódica que escoge Jalmari Helander, guionista y director de esta obra).

No hay demasiado para analizar en 'Sisu', estamos en presencia de un disparate disfrutable, enérgico, en el que cada evento resulta más inverosímil que el otro, pero para amantes del estilo de películas de acción que destacan por su factura técnica (fotografía y manejos de cámara, en este caso), funciona.

7 Alancitos Acribilladores de Nazis sobre 10

El western no ha muerto. Viva el western. Porque esto es un western, aunque esté situado en Finlandia, aunque haya nazis (en vez de indios o bandidos) y porque tenemos a nuestro hombre solo ante el peligro (no sé de qué me suena esto). A ello podemos añadir que nuestro hombre tiene más vidas que un gato y pocas ganas de pelear, y al que algunos se empeñan en putear.

La película nos narra, y sirve de excusa narrativa, la situación de Finlandia durante la Segunda Guerra Mundial, primero luchando contra la URSS con el apoyo de la Alemania nazi y luego luchando contra estos para expulsarlos en la llamada Guerra de Laponia. En este marco, nuestro hombre es una vieja leyenda, un antiguo miembro de un comando de la muerte (formado por él solo) ya cansado de pelear y matar. Su vida se reduce a buscar oro por esas tierras de dios para intentar subsistir. Hete aquí que el hombre da con una veta y consigue aquello por lo que lucha día a día y decide llevarse su oro para venderlo. Pero se cruza con unos nazis en retirada, sucios, malcarados y con perspectivas de poco futuro. Y claro, la cosa se lía. En este punto, nuestro hombre decide volver a sacar su viejo instinto asesino y darle a los nazis un poco de caña. Y ríete tú de Rambo, Indy o cualquier otro viejo conocido. Porque este señor es un todo en uno.

La película es un compendio de distintas formas de matar nazis, cosa que mola, llegando en algunos casos a hacerte soltar carcajadas por las situaciones planteadas. Aunque es cierto que a partir de un punto la cosa desparrama en exceso. Aunque no creo que a la gente que busca películas de acción le importe demasiado, a mí me ha sacado un poco de la película por lo increíble que se muestra.

Con una magnífica fotografía, una banda sonora al mejor estilo western y unas actuaciones colosales tanto de Jorna Tommila (que no dice ni mu en toda la película, casi) y de su némesis Aksel Kennie.

Muchos tiros, muchas explosiones y mucha sangre, muchísima. Recomendable para amantes de Malditos bastardos, Overlord, Malnazidos...