El Sr. Carrito y los caballeros templarios

Prota alabado por todos descubre la cruz templaria. A raíz de esto, personajes variopintos van uniéndosele a la fuerza para revelar más secretos en torno al descubrimiento.

La premisa de la peli suena vaga, imprecisa, poco definida... y resulta que así es la peli. El único foco donde parece haber cierta prioridad de desarrollo es en la personalidad del prota, un mr. Estrella con todas las letras. Parece ser el único con brillo constante y por alguna extraña razón ésto se remarca todo el tiempo. Los personajes que forman el grupo alrededor de él sólo aportan detalles de color sin relevancia: tres chavales, una periodista y una espía. Del otro lado, un villano solo caracterizado por su apariencia, con secuaces circunstanciales.

Este grupo, que nunca parece ser tal, busca un secreto en torno a la cruz templaria que apenas se construye. Da la sensación de que ni siquiera importa a efectos prácticos. Lo que comenzó como un amago de peli de aventuras estilo Indiana Jones deviene en salseos hacía el egoísmo constante del líder del grupo. Todo resulta descafeinado, errático y alarmantemente ligero.

Desconozco si es por falta de presupuesto (de ser así no filmen una peli de aventuras) o por la necesidad de dar entidad a la importancia de la cooperación, pero la peli nunca integra sus ideas de manera orgánica. Dar un mensaje sobre la importancia de los críos queda a contramano de todo el planteo previo en torno a un supuesto misterio. La idea de un secreto maravillloso queda diluído por completo. Contexto e intenciones no concuerdan.

Cuando llevo 1h.05’ la dejo de ver. Hace años que no lo hacía, pero es que da igual cómo acabe, solo quiero que acabe y eso está en mi mano. Había pensado hacerlo a la media hora, porque si va fatal, no puede ir peor, pero es que no mejora nada nada.

Como habla de templarios, esperas que en algún momento haya algún episodio épico o misterioso, pero solo es una evocación a un personaje que se nombra en repetidas ocasiones.

La presentación de los personajes se hace de una manera insípida. Aparecen unos cazatesoros que se golpean pésimamente por una cruz ¡¡en un faro!!.
Aparecen más personajes y lo mismo más golpes de tercera división.
Luego unos niños están en un campamento y hablan de un tesoro que parece más famoso que la Sábana Santa. Por supuesto los niños se quieren sumarse a la algarabía de buscar lo que otros muchos expertos no han conseguido.

Uno de los cazatesoros es el malo de la película, Adiós se llama, patético. Es que no hay ni unos exteriores bonitos, ni decorados originales, ni consistencia en lo que va pasando.

El guion se puede resumir así: un tesoro, unos cazatesoros, un malvado, unos niños para que la película sea familiar, lo agito todo...y se rompe el frasco. Desastre