Pasable historia sobre un tema muy visto a estas alturas, hombres lobos, licántropos, y demás bestias de este negocio. Si el objetivo de los autores era entretener a los espectadores sin ninguna pretensión más allá, lo han conseguido, ya que su corta duración y su comienzo sin andarse por las ramas yendo directo al grano ayudan a eso.
Si buscaban algo más (como alguna reflexión filosófica sobre la vida o la muerte o algo así, o que la historia pareciera creíble, no)

En esta ocasión, y como en otras tantas, los nórdicos echan mano de su extensa e inagotable mitología. Aunque en esta ocasión, por momentos parece que los mitos están metidos con calzador y dan la impresión de que los han utilizado como excusa para hacer una película.

La receta es muy sencilla, aunque llena de lugares comunes; una muerte en extrañas circunstancias, y ahí comienza la investigación. No faltan unas buenas dosis de vísceras y sangre, y tampoco de tensión y suspense, ya que el ritmo no decae en ningún momento.

En definitiva; La típica película para pasar el rato sin tener que estrujarse los sesos

Interesante thriller que trata sobre la investigación de la aparición por sorpresa de una chica que llevaba varios meses desaparecida.
La investigación policial comienza justo cuando el gobierno español decreta el estado de alarma para intentar frenar la expansión del Covid 19, allá por marzo del 2020, aunque para muchos, nos parezca que ya ha pasado una eternidad desde el inicio de la pandemia.


Por entonces, tanto los informativos como nuestras propias vidas, estaban copados y ocupaos por frases como: Estado de alarma, uso de mascarilla, distanciamiento social...y palabras como: Confinamiento, cuarentena contagio...Motivo que hace que te preguntes que si con radios, televisiones, periódicos, redes, etc... todos, casi sin excepción, hablado de lo mismo prácticamente veinticuatro horas al día, esto sería beneficioso o perjudicial para las investigaciones policiales o judiciales sobre asesinatos, robos, secuestros... etc.

También te hace reflexionar sobre si los delincuentes no camparían a sus anchas ante la falta de efectivos policiales, más preocupados en asuntos como por ejemplo; vigilar que la gente no se saltara el confinamiento o la cuarentena, que en otros menesteres tan importantes o más que estos en algunos casos.

La película empieza de manera directa, sin rodeos, coge velocidad de crucero rápidamente y no la suelta hasta el final. Y no solo tratando el tema de la investigación, sino que también trata, aunque de pasada, las historias personales de los dos protagonistas, el inspector Samuel y la subinspectora Castro, que por cierto, los actores están muy bien cada uno en su papel, y demostrando una buena química entre sus personajes.

La atmósfera y la ambientación están bien trabajadas bien logradas. La película es oscura, tensa, me ha recordado a alguna producción nórdica.
La trama general hace que no te desconectes de la historia en ningún momento y el ritmo no decae en todo el metraje. Y aunque hay escenas y que te puedan recordar a otros títulos del género suspense o incluso terror, esta historia tiene su propia personalidad y no tiene nada que envidiarle a thrillers de mayor presupuesto.



Lo mejor: Que no decae la tensión en ningún momento.
Lo peor: EL desaprovechamiento de Luis Zahera y la corta duración de la película, yo por lo menos me he quedado con ganas de más.

Película ambientada en el siglo diecinueve a orillas del rio Hudson, en Nueva York. La historia gira en torno a la investigación de unos crímenes cometidos en una academia militar, como así reza en su título.

La película empieza muy bien, enganchándote desde el primer minuto gracias a que el primer conflicto aparece simultáneamente con las primeras letras de crédito. Aquí si que no deja lugar a relleno, no como en otras producciones, que entre presentación de personajes y demás historias el primer conflicto aparece al cabo de media hora, aquí es instantáneo y además de prometer se agradece. Pero nada más lejos de la realidad.

Cuando ves que la investigación va a correr a cargo de un personaje más que interesante interpretado por el siempre sobrado Cristian Bale, y un muy solvente Harry Melling en el papel de un joven Edgar Allan Poe, comienzas a frotarte las manos, pero la decepción no tarda en llegar.

La película está cocinada a fuego lento, demasiado lento,. Al principio se sostiene gracias a unos diálogos muy interesantes y a unas conclusiones brillantes llevadas a cargo por la pareja de protagonistas, pero en cuanto pasan los minutos el ritmo narrativo va decayendo tanto que hasta se hace pesada en su segunda hora. Le falta mucho suspense, y la tensión que prometía al principio acaba desvaneciéndose. Es el tipo de película que en cuanto acabas de verla, te lamentas por lo que pudo haber sido y no fue, porque ingredientes buenos para hacer algo notable tenían y más que de sobra.
Aún así y con todo esto, se deja ver gracias a un reparto de lujo, las buenas interpretaciones y a unos personajes bien construidos

No me gusta titular las críticas con el mismo título que las series o películas, me gusta buscar una alternativa, pero en este caso el título le viene como anillo al dedo, creo que imposible encontrar uno más adecuado.

La serie trata de una mujer propietaria de una funeraria que, tras la muerte de su marido, inicia una investigación de forma personal para aclarar las circunstancias, viéndose así envuelta en una siniestra trama que jamás podría imaginarse, el resultado no puede ser mejor.

Acostumbrados, dado el bajo nivel de series de este género, a ver series, planas, previsibles y llenas de lugares comunes, llega por fin un soplo de aire fresco que te invita al optimismo y a pensar que no está todo perdido.
La historia es potente, sólida, tensa, y por momentos inquietante, y lo que es incluso más importante, tiene el número de capítulos perfectos para que no se haga ni larga ni corta.

El guion está basado la novela del mismo título y escrita por el autor austriaco Bernhard Aichner. Y creo que este tiene que ser el camino dada la poca imaginación de los guionistas cinematográficos, coger un buen guion ya escrito y perfectamente estructurado, y adaptarlo con un toque personal.

Claro que la clave de todo esto es pasarlo del papel a la pantalla, y ahí es donde los directores y su equipo han acertado de pleno, creando una atmósfera oscura, tenebrosa, y que empieza a cien por hora y no baja la velocidad en ningún capítulo, consiguiendo un ritmo perfecto para que no te levantes del sofá en los seis capítulos que dura la serie y disfrutando de cada uno de ellos.

La trama no deja nada al azar, el argumento es muy sólido y el guion no tiene ningún agujero, todo cuadra y todo es perfectamente coherente. Y en una época, en la que pocas veces se utilizan bien los flahsbacks abusando mucho de este recurso, aquí también han acertado, todos tienen sentido y siempre aportan información útil para conocer mejor a los personajes y enriquecer la historia.

Por otra parte cabe destacar por otra parte los bonitos paisajes del Tirol, y el trabajo de la actriz principal.

Lo mejor de la serie: prácticamente todo. Lo peor: de momento nada, a no ser que se les ocurra hacer una segunda temporada.

Remake de una historia, que narra las peripecias de 7 mujeres que intentan resolver un asesinato supuestamente cometido por una de ellas.
La película intenta ser varias cosas a la vez, pero se queda en muchas de ellas en el intento.
Intenta ser una comedia ácida, pero está llena de situaciones cómicas muy vistas y de chistes fáciles muy escuchados ya en películas del mismo género. Las protagonistas juegan a ser detectives, pero, lo único que hacen es dar vueltas por el mismo sitio pasando por deducciones demasiado pesadas y lógicas hasta para el espectador más despistado.
Intenta parecerse a algún clásico detectivesco de Agatha Christie, pero sin llegarle ni a la suela de los zapatos.
A pesar de todo esto la película se deja ver fácilmente gracias a su corta duración, su sencillo guion, y al buen trabajo de las actrices