Miniserie gallega de investigación criminal donde una teniente de la Guardia Civil se desplaza a un pequeño pueblo del interior de Galicia a resolver la desaparición de una jovencita.

Muy buena ambientación de los parajes gallegos, de sus gentes y de la afinidad de los miembros de la Guardia Civil con sus vecinos en una convivencia tranquila y aparentemente amistosa.

Quizás los que la vemos en castellano nos perdamos la autenticidad de esos diálogos en gallego con sus peculiares matices y lo suyo sería verla subtitulada, oportunidad que en mi caso no ha existido, pero que recomiendo a los que tenga ocasión de hacerlo.

Gran guión, con la peculiaridad de que cada capítulo se inicia con una pequeña reseña del poema inmortal de Dante Alighieri, "La divina comedia" que va dando el título a los sucesivos capítulos y la convicción de los autores de la serie de que les iban a renovar por una segunda temporada.

Francamente buena y fresca.

Notable, 8.

Secuela en versión femenina de los robos y atracos de los que Danny Ocean y antes Frank Sinatra con "La cuadrilla de los once" nos ofrecieron hace algunas décadas.

Para no escandalizar a las masas y seguir las tesis políticamente correctas, Danny Ocean pasa a mejor vida (1963-2018) como reza en su lápida, y coge el testigo su hermana, caracterizada por Sandra Bullock para robar dentro de un museo un collar de diamantes de la firma Cartier custodiado por ellos mismos.

Un ingenioso plan, sus preparativos, una puesta en escena exuberante y una magnífica ejecución, no exenta de peligros, como cualquier robo de entidad que pueda preciarse, no exento de imaginación, humor y algún excelente diálogo, con una eficaz banda sonora cierran la película.

Gran elenco de actrices, donde además de la Bullock destaca Cate Blanchett, Anne Hathaway, Helena Bonham Carter y Rihanna entre otras, hace el resto.

Interesante, 6.

Miniserie de sólo diez capítulos que teoriza sobre las causas que llevaron a los terribles atentados de Al Qaeda del 11 de septiembre de 2.001, basándose en la novela del mismo título de Lawrence Wright.

La miniserie expone una teoría sobre la creciente amenaza de Osama Bin Laden y Al-Qaeda a finales de la década de 1990, y cómo la rivalidad entre el FBI y la CIA durante ese tiempo puede haber sembrado inadvertidamente el camino para la tragedia del 11 de septiembre. Sigue a los miembros del Escuadrón I-49 en Nueva York y la Estación Alec en Washington, DC, las divisiones antiterroristas del FBI y la CIA, respectivamente, mientras viajan por el mundo luchando por la propiedad de la información mientras aparentemente trabajan buscando el mismo objetivo.

La sustitución en la Casa Blanca de Bill Clinton, tras su escándalo con Monica Lewinsky, por George Bush y la Doctora Rice fueron caldo de cultivo para la incompetencia de las dos más grandes centrales de inteligencia del mundo, que rivalizaban entre sí, con la importancia estratégica para EEUU de su alianza con Arabia Saudí, cuna de prácticamente todos los terroristas que se introdujeron en suelo americano con pasaportes de dicha nacionalidad, y la previsión de la Primavera Árabe que ya se estaba gestando, todo ello por salvaguardar los intereses económicos de las grandes compañías petroleras, armamentísticas y de todo tipo que ahora reconstruyen lo que sus políticos permitieron destruir, y donde la vida humana, fuera de sus fronteras, vale para ellos menos de un centavo.

Buenas actuaciones, destacando con diferencia Jeff Daniels y Tahar Rahim sobre un importante elenco de actores.

Notable alto, 8.

Como salvedad señalar los horribles actores de doblaje y los subtítulos latinos que a fecha de hoy son los que están a nuestra disposición.

Soberbia la dirección de Ben Stiller en este drama carcelario de siete capítulos basado en hechos reales. Nunca pensé que un actor especializado en comedias humorísticas de dudoso buen gusto se pudiera enfrentar con tanto acierto en la dirección de una notable miniserie, donde con una excelente fotografía y una potente banda sonora original da libertad a sus actores para que aún brillen más pero siempre bajo la tutela de un guión que pretende aproximarse lo máximo posible a los hechos realmente acaecidos.

Historia de una fuga reciente, donde con pausa y sin ninguna prisa nos ofrece el cómo se pergeñó el plan, como se realizó, con todos y cada uno de los problemas a los que se enfrentaron hasta conseguir salir de la prisión, y las tres semanas que más o menos duró la aventura.

Sobresalientes actuaciones del trío protagonista, donde brilla con luz propia Patricia Arquette, bastante irreconocible durante toda la serie, pero dando un toque personal a esa empleada civil de prisiones que se ocupa del taller de costura donde sus obreros son hombres a los que debe supervisar su trabajo, de uno forma un tanto ladina y esquiva, pero con sus apetitos a flor de piel, y los dos reclusos, Benicio del Toro llenando la pantalla con su sóla presencia y esa mirada profunda y expresiva, y un Paul Dano que hace todo el trabajo.

Más que recomendable.

Notable, 8.

Relato épico en 8 capítulos de una de las novelas más épicas y conocidas de la historia, "La Ilíada", atribuida a Homero, que relata cómo los dioses disfrutaban jugando con los humanos, como por el amor de una mujer, Helena de Esparta, se destruyó una gran ciudad como Troya por parte de los griegos, todo dentro de la mitología griega.

Producida por la BBC y distribuida por Netflix, es una muy libre adaptación, donde los guionistas se toman muchas libertades, como atribuir raza negra a uno de los héroes griegos, Aquiles y su amante Patroclo, que poco o nada tienen que ver con la "Troya" de Brad Pitt, que todos tenemos presente al ver esta miniserie.

Fuera de ello, la serie es correcta siguiendo la mitología y el relato de "La Ilíada", que es lo que realmente debería importarnos a los que hemos dedicado ocho horas de nuestra vida a seguir la historia de la guerra de Troya, y no a desbarrar sobre personajes o actores porque no nos cuadra el reparto, o si Helena y Paris, o Héctor, deberían ser más o menos guapos y los decorados de cartón piedra y el vestuario y aderezzo son más o menos consecuentes con la época del relato.

Troya existió, como se ha demostrado con los restos arqueológicos de la misma, y era una ciudad importante situada en el estrecho de los Dardanelos hoy perteneciente a Turquía, que comunica el Mar de Mármara con el Mar Egeo, en una ruta comercial transitada en el acceso al Mar Negro. Las excavaciones y los estudiosos señalan que Troya estuvo habitada desde el tercer milenio antes de Cristo.

Tras siglos de olvido, las ruinas de Troya fueron descubiertas en las excavaciones realizadas en 1871 por Heinrich Schliemann, tras unas prospecciones iniciales realizadas a partir de 1865 por Frank Calvert. En 1998, el sitio arqueológico de Troya fue declarado Patrimonio de la Humanidad por la Unesco.

A mí personalmente me ha gustado. Interesante, 6.