No se debe ver Mulholland Drive desde los ojos de la narración, tampoco desde el cotidiano episódico, Mulholland drive puede tener su lenguaje onírico, pero tampoco es un sueño, aunque beba enteramente de sus perspectivas.

Por supuesto que Mulholland drive tiene una coherencia, no estrictamente narrativa, pero cualquier símbolo se mueve por razones, por mucho que éstas sean sutiles e inalcanzables, todo símbolo tiene su acción y reacción, su principio y su consecuencia:

Es posible que no se llame Mike, quizá sea mi anglosajona forma de descripción
como tienen los americanos de llamar Pepe a Camilo José Cela
por el hecho de que sólo saben decir Pepe y no saben quien es Camilo José Cela:

- Tenemos un chaval, se llama Mike, tiene la cabeza como una pantalla de cine...
- Y sale mucho a pasear?
- Sí, cuando sale de la jaula
- Vive en una jaula?!!!
- Sí, pero no sabes lo emocionante que es verle correr por el parque
persiguiendo su frisbi".

La mejor comedia mediocre que harán jamás un grupo de hermanos mediocres
llamados Farrelly.

Hablar de "Deseando Amar" sería menospreciar la sutileza
así que daré 6 razones para no verla:

Prestrenan Torrente MMLLCCVVIII.
Acabas de comprarte un cd de música folclore andorrana.
Lees el Código Da Vinci esperando dibujos (Puede que los haya no lo he leído).
Crees que Jeremy Irons y John Malkovich son buenos actores.
Obra maestra para ti es una peli de David Trueba de la que no guardas mal recuerdo.
Crees que JFK es una película intelectual.

Si la ultima secuencia aparece una vieja aunque sea de la de "Embrujada",
la de las velas negras hubiera sido demasiado susto, hablaríamos de una película que consiguió su sino: dar miedo.

El problema un tanto complejo, sutil, matizado es que... no pasa nada!!!

Cuando se habla de sugerir, se habla de que sin decir nada, se dice todo, porque realmente
se dice algo, pero (perdón por parecer Rajoy) si no se dice nada
y no se sugiere nada, el resultado es NADA!!!

Después de la película un fan se acercó a los directores y les dijo:

Muchas Gracias

Os podeís imaginar que respondieron ellos.

Adolfo tiene 24 años, estudia en la ECAM técnico de sonido, tiene el pelo encrespado, estuvo a punto de ser jarrai, pero su padre le amenazó con quitarle la tarjeta de crédito, entra el cine, temeroso, debe gustarle Dogville, sus compañeros Oliveirianos, esperan mucho de él, consiguió acabar Muerte en Venecia, sin llegar a sentirse Ramón Sampedro...

Sus amigos le esperan fuera del cine con el contrato cinéfilo, pueden oírse los gritos de ánimo, por encima del Dolby Surround, empieza la película y también... el sufrimiento, la carne es frágil, y la puerta de la sala demasiado grande, los ojos de Adolfo se enamoran del verde EXIT, pero él quiere, él necesita, el debe ser MODERNO, nada es nuevo en la pantalla, el mismo discurso, las mismas escenas, el mismo silencio.

Los ojos de Adolfo se empequeñecen chinescos, pero debe aguantar: “Debo aguantar, estudio en la ECAM” se repite a sí mismo, Nicole Kidman no está buena, Lauren Bacall, demasiado vieja, no hay nada más que motive a Adolfito, no puede más, dos horas y media, son demasiado para su espíritu moderno, el sillón tan cómodo, la intimidad tan cerca, Adolfo no puede Adolfo no es y cierra los ojos entregándose al sueño, que pena Adolfito, que pena, tan cerca, tan cerquita de ser cinéfilo:

BOOM!!!

De repente un disparo roba el placentero descanso, pero le da esperanzas, de tener gafas de pasta. Nicole Kidman no está buena, Lauren Bacall, demasiado vieja. No importa, mira a James Caan y se sienten uno.

Prodigiosa Brutal, lo mejor única, Dogville le gusta a Adolfito que se ha quedado al final y sale del cine lleno de encanto, hablando de travellings y de Paul Bettany, de que bueno es lars por dios que bueno, sus amigos le aplauden, le quieren, le sienten, adolfito firma firma, que ¡Ya eres cinéfilo, cinéfilo de la Ecam... pero que éxito!.