Por desgracia acabo de malgastar 7,5 euros de mi pobretona y triste vida, en la que no tengo un iPhone ni visto de Dior, en ver un film que no tiene ni pies ni cabeza desde principio a fin. Entiendo que sea una secuela de una serie que ha luchado por los derechos de la mujer hasta más no poder, pero es totalmente innecesario el lujo y el materialismo en el que se ve envuelto, por no hablar de la superficialidad que caracteriza a los personajes con esculpidos cuerpos de gimnasio.
El guión es pésimo, el diálogo escaso, los tópicos constantes, la historia surrealista y la publicidad abrumadora. Que disfrutes tus dos horas y media.

Sinceramente un mes antes del estreno de la película dudaba si iría al cine a verla o no, dudaba si gastaría 10 euros de mi maltrecha economía en acercarme al cine a ver un film en el que gran parte de la trama está hecho por ordenador, pero finamente, un mes después del estreno me decidí y fui a verla. A día de hoy ya he ido dos veces y espero ir la semana próxima una vez más.
Tal vez sea por el maravilloso mundo Na'vi con sus plantas, sus animales y la continua respiración a paz o quizás fuese porque mis sentidos no daban crédito a lo que estaba aconteciendo, pero esta película me ha marcado profundamente. Es cierto que el argumento es bastante previsible, o al menos desde mi punto de vista, pero obviamente una película cuyo presupuesto es de 450 millones de dólares no va a tener un argumento complejo y difícil de entender para la gran mayoría del público, ya que lo que se buscaba era un "taquillazo" mundial.
Aún así, creo que James Cameron ha dejado marcado un claro mensaje ecologista que se traduce en una gran crítica a la capacidad del ser humano por destruir todo cuanto le rodea con tal de enriquicerse, sin tener en cuenta la conexión que nos une a ello, es más, consigue que el espectador se vuelva en contra de su propia especie.
Para concluir, quiero recomendar a todo el mundo que se acerque a verla en 3D ya que los efectos especiales son tremendamente impresionantes, tanto que desde mi punto de vista han marcado el comienzo de una nueva etapa cinéfila.

No es una película de culto, no es una película que aquellos que creen saber de cine vayan a adorar y, sobre todo, no es una película aburrida. El absurdo del guión hace que cada segundo que transcurre sea el equivalente a una carcajada. El doblaje es ideal para que sea una comedia de risa y no de humor intelectual que pocos dotados comprenden. Adam Sandler es la bomba en cada una de sus actuaciones y es capaz de esbozar una sonrisa en el más triste de los humanos, y yo como humano normal y corriente que no se deja llevar por algunos intelectuales sabelotodo disfruto con una película de humor cargada de color y con grandes actuaciones le pese a quien le pese. Por cierto, sí soy fan de Adam y he visto todas sus películas.

Aunque no sea la mejor película que recuerdo, no puedo traicionar el recuerdo de mi infancia, no puedo negar que esperaba con entusiasmo que la televisaran y no puedo negar que soñaba con ser uno de ellos y hacer frente así a los problemas como un ninja. Es obvio que por la calidad de la película no puedo otorgarle un 10 ni un 9, pero nunca suspendería una película con la que he disfrutado. Tres hermanos, niños y ninjas te harán pasar un buen rato si aún te queda algo de añoranza por tu infancia.

Creo que una película que se titule 88 Minutos, no debería durar 102. Dicho esto, sino fuera por Al Pacino creería que es una película de sobremesa que una televisión pública nos ofrece después de la comida. Sencillamente he aguantado hasta el final porque creía que sería una película con un final impactante y enrevesado como la saga Saw, pero mi decepción vuelve a consolarse al ver a un despeinado Al Pacino quebrándose la cabeza para no quedar en cuadro.