Los pingüinos son remonísimos. Hay escenas divertidas. Carrey no es tan cargante como ha llegado a ser pero, un poco plasta sigue siendo en esta ocasión. Es para niños y, no puede valorarse fuera de eso porque no sacaría ni un cero. Se hace pelín pesada pero, digamos que, dentro de esta clase de "aventuras y desventuras de un pobre desgraciado que en el fondo no lo es tanto", tiene un pase. No he encontrado ningún momento brillante que me permita inclinarme generosamente sobre más de un cinco la marcar la nota. Si no tienes nda mejor que ver, pues eso. La ves pero, nada más allá.

...es porque se hace demasiado farragosa; porque estaba cansada o, porque realmente es rara de narices y se les va de las manos pero... me he quedado igual. Con esto quiero decir que, te haces tal lío que, francamente, no te enteras de nada. Está correctamente hecha al estilo ya clásico del género, los actores: un par de ellos pasables (alguno horroroso: inexpresivo hasta el punto de que no sabes si está triste o más feliz que un regaliz, otro esperpéntico y sobre actuado...) Abusa del flash back en una historia que ya por sí misma, se muestra embarullada en el mismo tiempo "real". No ayuda el hecho de que los nombres nos resulten extraños y difíciles de recordar y, para más inri, las lentillas que se usan en determinados momentos te provocan tal cacao mental que, ya no sabes si estás viendo a la hermana, a su prima o a la de la esquina... Es de agradecer que al menos, no se trate de otra historia oriental con fantasma en bolas, pelo largo, lacio y negro que emite sonidos guturales. He leído que se trata de un intento de Takahasi de resucitar el cine de terror japonés... pues vaya... no se si alguien le ha entendido y, si en tal ese caso, le ha dado miedo... El caso es que arranca interesante la cosa pero... se va liando de tal forma que acabas aburridita... Pierde muchos minutos con escenas reiterativas sobre la historia pasada sin aclarar absolutamente nada, sin despertar interés y, cabreando al espectador que desea saber DE UNA BUENA VEZ qué narices pasa, ha pasado o va a pasar. Esta bien ir deshilando la trama poco a poco pero, si la vas a deshilar. Si realmente estás creando otra madeja paralela que al final es un sí pero no, quizás, a lo mejor, ¡yo qué sé!... La cosa se queda en eso. Oseá en poquito. En cuanto a la estética en general...pues lo mismo: era original hace 15 años. Podía innovar una miaja...

Quizás el haberla visto con tanto retraso haya hecho que mi impresión esté algo desinflada o reposada, según se mire. Es innegable que impresiona. La sucesión de imágenes y experiencias a cada cual más alucinante (en el sentido más literal y lisérgico de la palabra) te hacen a veces dudar de que pueda ser posible semejante cúmulo de brutalidades. Pero no dudo que pueda ser. Tampoco eso es lo importante. A mi juicio, abusa un poco de los efectismos musicales que llegan a molestar un poco. Hay imágenes y secuencias demasiado repetidas que, si bien, supongo, se han editado a propósito, para aumentar la sensación de rayadura y, meterte más en la historia; podían haber variado algo para no dar en ocasiones la sensación de pesadez que a mí me produjeron. Los cuatro personajes principales nos ofrecen sus momentos más alegres y también los más miserables de una manera eficaz y creíble pese a la ya comentada sensación de exageración. Y no porque no puedan ocurrir (que por desgracia ocurren) sino porque da esa impresión similar a la de los culebrones, me explico: increíble cúmulo de casualidades, desgracias, acontecimientos y sucesos concentrados en 4 personas con intensa y no casual relación entre ellos. A destacar la crudeza con la que se nos muestran ciertos hechos puntuales. Impresiona, la verdad... Y más que anda el hecho de que, todos y cada uno de ellos, acaban como acaban por su propia voluntad. Ninguno es engañado o manipulado para comenzar ese camino. Los jóvenes estaban advertidos por ser de su mundo y conocer de primera mano a donde puede llevarte el tema. La madre por su propio hijo, por sus vecinas... En definitiva: todos sabían que podían poner en riesgo sus existencias por un sueño. Y pese a esa advertencia: siguieron adelante. Diferentes razones pero, una misma motivación. ¿Sobrevalorada? No creo. El valor, por definición es algo relativo ya que, siempre se da comparando con algo...y para cada uno, ciertas cosas son más o menos importantes sin tener que coincidir con los demás. Eso va en gustos pero, que es una peli diferente y original, eso seguro.

Es tremendo. Una película que se supone de acción, tensión, aventuras, ... y es la cosa más aburrida que he podido ver en mucho tiempo. Pasada una hora me importaba muy poco qué pasara, quien se salvaría, si había alguna sorpresa final...........¡¡quería que se acabara semejante tortura insulsa!!! Tostón de los grandes que no salvan ni los actores ni, la fotografía ni, los efectos....De verdad. No entiendo como con tantos medios se puede perpetrar semejante tontada. Horrible de verdad. Y como bien dice alguien por ahí: lo peor que le puede pasar a una película, independientemente de lo buena o mala que resulte al final por cuestiones varias; es que sea ABURRIDA. Y esta se lleva la palma....

Y es que, pese a que está bien rodada, interesa, engancha,... no llega a ser redonda ni, explosiva ni, emocionante cuando tenía argumentos para haberlo sido. El ritmo excesivamente pasmoso hace que, en ocasiones casi te rindas y, pierdas interés. No hay huidas precipitadas ni momentos que transmitan de verdad la emoción y la tensión que se podía suponer dado el guion presentado. Todo parece "normal" dentro de lo anormal de la situación o, al menos de lo dramático que debería ser para sus protagonistas. Escenas puntuales y claves que, hubieran tenido que aumentar la adrenalina del espectador ayudados por el desarrollo de los acontecimientos, pasan en un suspiro, sin apenas alharacas cuando a mi juicio...merecían su dosis de suspense y emoción que, no se resuelve bien. Pero bueno, sin llegar a la perfección tan difícil de lograr, es una buena película que anima a reflexionar sobre eso de que, el pasado siempre te persigue y, cuando te alcanza, a veces es demasiado desproporcionado (¿o no?) que te quiera ajustar cuentas. Y sobre cómo hay distintas maneras de afrontarlo. Ahí veo yo otro de los fallitos...casualmente, cuando hay un personaje con el que te fuerzan a tener empatía desde el minuto uno....y una vez que te muestran que no es oro todo lo que reluce...mira tú que SIEMPRE resulta que tiene una excusa, una justificación o un algo para que su "delito" se vea como menos grave o que se le considere menos culpable que a otros que participaron en el tema o, incluso que te veas en la necesidad de exculparle. Sería más honesto que, hiciera lo que hiciera, aun siendo claramente culpable de algo, el espectador decida que se merece librarse por sus gestos posteriores, por su arrepentimiento, por lo que sea...pero no, porque el guion nos explique que, en el fondo no era culpable de lo más grave. Es un recurso facilón para justificar que se escape sin pagar. ¿O es que alguien que sí haga algo malo o, incluso terrible en un momento de su vida, con arrepentimiento y enmendando su vida, no merece una segunda oportunidad? Yo creo que sí.