Me dormí. La volví a tratar de ver. Me dormí antes. Tiene unos buenos efectos digitales pero es incluso más tediosa que Inside Out o Toy Story 3. Ahórrense su tiempo y su dinero, salvo que tengan niños que se la exijan. Ya nadie se acuerda de ella por una razón.

Película para quienes les gustó Toy Story (a mí me encantó) pero han crecido y su vida se ha vuelto triste. Entonces ven que los juguetes también tienen una vida patética y la empatía les hace creer que hay algo detrás. Sí, lo hay. Manipulación sentimental burda. Y es que Toy Story 3 no sólo no aporta nada (cosa que ya hacía Toy Story 2) sino que, además, zancadillea el espíritu de la primera película.

Cuando fui al cine salí con una opinión de "no llega al aprobado pero entiendo que haya gente a la que pueda gustarle porque vieron la primera y han crecido con Andy" pero, desde entonces, la película ha ido generándome cada vez peores sensaciones. Demasiado obvia en sus intenciones, demasiado previsible en su argumento, demasiado ñoña, demasiado llorona... ¿No estábamos hablando de una comedia en la que los juguetes nos hacían reír por sus aventuras? No, desde luego que no. Recordad que esa era Toy Story, no la 3. La 3 es un dramón insustancial y facilote en la que sufren los juguetes a los que ya habíamos cogido cariño. Por eso, la gente cree que es buena. Respondes sentimentalmente porque los personajes ya los conoces previamente, te los han presentado en otra película y los han desarrollado. En ésta, lo único que hacen es darse cuenta de lo inútiles que son y de lo mal que les va a ir en la vida... y, hale, a llorar. Buenos y malos por igual en un baño de mocos y lágrimas. Insultante.

No fui solo al cine y los que iban conmigo aplaudían la genialidad de la película. Lo siento pero la verdad no es democrática.

La serie está bien en algunas partes, pero no es Tolkien. Así que no la veas con ojos de Tolkien porque solo cumple con el autor en dos puntos: tiene una factura técnica de muy alto nivel y tiene muy bien diferenciadas las razas en cuanto a su forma de afrontar el mundo desde sus perspectivas. Pero es que ahí se acaba lo tolkiendii. Los elfos son demasiado petulantes y aburridos, quizá demasiado elevados en sus enfoques para nosotros los mortales. Los pilosos son muy salvajes en lugar de tranquilos hobbit que quieren disfrutar de la vida (pero eso los hace interesantes). Los humanos están a sus asuntos, muy enojados, eso sí, con los elfos que se encuentran en el poder.

A ver, no es que la serie sea insoportable. Tiene toda la parte de los humanos, que parece que tiene una buena prospectiva, y de los pilosos que me recuerda mucho a Willow (con todo el corazoncito tocado que eso supone). Es decir, funciona como serie de fantasía en un universo tomado de Tolkien. Muchas fantasías toman referencias de Tolkien porque, jod**, es el padre de la alta fantasía moderna. Así que... sí, algo tiene de esa fantasía. Si no le hubieran llamado "el señor de los anillos", muy probablemente la habría visto.

El problema, para mí, reside en sus personajes tomados de Tolkien. Galadriel está rota. No es Galadriel como está descrito en los libros, pero peor que eso, sobreactuada a más no poder. Pero... bueno, si la quitas está bien. Elrond parece un aeda y casi un alivio cómico. Celeborn es arbitrario, como si no tuviera confianza en los otros elfos (lo que es entendible, ya que, por cierto, son infantiles a la hora de comunicarse). Esto hace que sea inafrontable esta parte. La sección de los elfos, que debería ser la guía del programa, es aburrida e inconexa. Parece una excusa para poder meter la historia que ellos quieren desarrollar. Quizá, más adelante, todo se una, cobre sentido y los personajes tengan un desarrollo adecuado.

Probablemente, yo acabe de verla, pero no es algo que recomendaría a un fan de Tolkien. Ni tampoco a alguien que no adore la fantasía y se trague cualquier cosa.