Me he reído con El Pregón, que es de lo que se trata cuando vas a ver una comedia. Para mi gusto, muy superior a los Nueve Apellidos Vascos (de la secuela catalana ni hablo porque me pone de mal humor recordar que la he visto).

Hay muchas secuencias que me han hecho llorar de risa. Romero y Buenafuente trasladan su vis cómica a los personajes que interpretan, y como ocurre con los capítulos de Los Simpson, a veces el gag está oculto en el decorado y, cuando lo detectas, es un puntazo.

Metraje perfecto, no se hace para nada ni un minuto larga. Recomendable para pasar un rato agradable.

Creo que el problema es mío: demasiadas pelis de Liam Neeson haciendo lo mismo; empieza a cansarme.

Una noche para sobrevivir es, de lejos, la peor de las 3 colaboraciones entre Collet-Serra y Neeson. Las dos anteriores (Sin identidad y Sin escalas) mantenían una intriga que se desvelaba al final. Sin identidad, concretamente, me pareció una cinta muy original y muy bien hecha. Una noche para sobrevivir no tiene intriga, es absurda, en las escenas de acción te pierdes, no te crees lo que ves en absoluto.

Además, el actor que hace de hijo de Liam Neeson es lo menos carismático que se puede llegar a ser.

Mala. Sin Paliativos.

Genial. Sencillamente genial. Es de esas películas que no querrías que acabara nunca. Todo es perfecto. Di Caprio se sale. Y que esté basado en hechos reales le da siempre un plus. Si no la has visto, sepas que te estás perdiendo una obra maestra.

No estamos ante ninguna obra maestra, vaya esto por delante, pero sí ante una comedia que te hace reír desde el minuto 1, y eso es lo mínimo que se le pide a una película de este género.

La sensación que te deja es que los creadores del film le han dado más importancia a las situaciones que al hilo argumental. De hecho, no te importa demasiado cómo pueda terminar, sino que esperas el próximo gag para volver a reír.

Los actores están bien, pero de haber contado con actores con más vis cómica (Ben Stiller o Hugh Grant hubieran mejorado el trabajo de Rafe Spall) el resultado final hubiera sido más potente.

En fin, que estamos ante una cinta que vale la pena, con un guión atrevido que evita tópicos.

Cámara y Arévalo son muy grandes. No sé qué hubiera sido de esta película sin ellos. Por suerte, ahí están.

En la película me falta más Carmen Ruiz y me sobran las subtramas sentimentales con las actrices americanas,

Lo mejor de la película son las reflexiones acerca del éxito, el fracaso y la fecha de caducidad de los sueños. Personalmente, me hubiera gustado que la historia hubiera profundizado más sobre ello, pero el director prefiere explicar historias de amor.

En todo caso, es una cinta que entretiene, se deja ver e invita a reflexionar, que nunca va mal.