Como ocurre con casi todas las series producidas por Netflix, la primera temporada está bastante bien y luego degenera.

Aquí hay dos ancianas que son muy amigas y hacen cosas. Unas graciosas y otras menos. Pero a pesar de ser ancianas, son poco adultas. En realidad son adolescentes viejas. Una es drogadicta y la otra también, pero su adicción se presenta como algo sumamente cómico.

Todo gira alrededor de los ombligos de Fonda y la otra, de modo que el resto de personajes no importan más que como excusas. El personaje de Briana, por cierto, es detestable: una maltratadora por costumbre, pero sus maltratos son presuntamente desternillantes, sobre todo cuando se dirigen a su pareja Barry. Presuntamente, digo. Luego salen los dos maridos, porque la serie tiene también como target al espectador gay.

En fin. Cansa un poco.

El mejor personaje, Nick.

No entiendo bien el porqué de esta película. Si quieres hacer una versión del tebeo Anacleto, hazla; para eso seguramente cuadra más una de animación estilo Tadeo. Pero llamar Anacleto al personaje y luego hacer la película que te da la gana, pues no.
Además, para ser gracioso no hace falta explotar a un perro.
Imanol Arias no está mal, pero es que Quim Gutierrez es insufrible, y Alaxandra Jiménez, pues qué decir, el mismo papel que en todas sus otras películas.
De ritmo, por lo menos, no está mal. Pero lo dicho: no hace falta explotar a un perro

... que agradará a los menores de treinta y cinco años. Para los demás es cosa vista pero con nuevo envoltorio crujiente y lleno de colorines.
Así a vuelapluma se puede decir que la película es:
- hipócrita, porque se aprovecha de lo que dice criticar.
- histérica, en el ritmo y lo ruidosa.
- convencional hasta la nausea, en el guión.
- oportunista, por la protagonista y el ataque al varón (no hay uno decente).
- modernita que te pasas, esforzadamente en cada plano, no sea que parezca ese lo de siempre que es.

Envejecerá muuuuy mal.

1) Idiotez: las idas y venidas y las tramas y la contratramas confluyen en una historia bastante tonta e insulsa. Eso sí, el actor de la armadura qué buen Frank Castle habría sido.
2) Violenta: aquí muere gente de manera idiota pero supuestamente graciosa. Lo de matar animalillos con la música de Grieg, como que no.
3) Bien hecha: la factura es buena, hay actores que hacen buen trabajo, pero no compensa.

La sensación después de ver la primera temporada es : "tanto pa tan poco".

Es un truño de película en la que se divaga de manera torpe y pesada sobre la creatividad, la verdad y el misterio del artista y tal. Es del tipo de cosa que en teatro tiene sentido (y recuerda bastante a Beckett), pero en cine como que no.

Le merece la gloria de haber inspirado esa obra maestra absoluta del videojuego que es S.T.A.L.K.E.R: Shadow of Chernobyl. Esa SÍ que es la zona.

La fotografía, eso sí, grandiosa.