Bajo mi punto de vista no profundiza mucho, pero está bien hecha y toca un tema delicado. Y más en los años 70.

A mí me parece que tiene autocrítica y realismo y actúan todos bien. Aunque el guion no es súper exigente. Es decir, podrían haberlo hecho mejor pero transmiten bien. Jack Lemmon destaca como siempre.

Es una de las que se suelen olvidar en USA y se recuerdan más en Europa, pero le falta metraje o le sobran ciertas escenas que bien podían haberse sustituido por otras que le diese más empaque, e incluso notoriedad, porque los ingredientes los tenía.

Esta película merece contextualizarse pese a que cuente cosas actuales. Y es que el cine de hace décadas merece hacer este ejercicio. Al pionero en algo el gran público le suele reconocer el mérito. En el cine, a veces, somos más de tender a ridiculizarlo.

Esta peli habla de multitud de aspectos sociales que hoy no toleramos como antes o incluso rechazamos. Y eso la convierte en algo valiente, además de soberbiamente interpretado. Con una Hepburn que mueve los hilos de la situación y a su vez se enreda en ellos, pero siempre elegante. El humor de Cary Grant es siempre un valor añadido, inconfundible. Pero sin duda, para mí, James Stewart borda a un personaje difícil y bien montado.

En resumen, es una peli que entretiene mucho y cuenta muchas cosas y en no demasiado tiempo.

La película se queda un poco a medio camino entre una gran súper producción y una película con buenas intenciones. Tal vez eso le haga aparentar ser presuntuosa, pero considero que quiere poner demasiadas propuestas sobre la mesa y no dedica el suficiente tiempo para desarrollarlas.

Christian Bale está inmenso, como es habitual y Rosamund Pike transmite mucho, muchísimo. Para mí una actriz infravalorada.

Podría ser una buena apuesta por una serie, más que por un largometraje. Los personajes parece que no se desarrollan del todo. No les da tiempo a mostrar el potencial que podrían tener. Pero se desarrolla de forma acertada y cuenta aspectos que tal vez no gusten, sin posicionarse en ningún bando. Este detalle ha podido ser la causa para que en EEUU no la aceptara la crítica con fervor. Considerarían que con Bailando con Lobos ya se tragaron suficientes sapos.

Algunos sueñan con una barra de pan y otros con un Ferrari.
Me parece la mejor interpretación de Penélope Cruz. Su mirada es increíble. Te la crees al cien por cien, o al menos ese efecto causó en mí.
Si tienes un mal día no la veas. A mí me dejo un sabor de boca entre rabia y tristeza.

El cine debería ser entretenimiento. Paterson es aburrida. Habrá quien diga que está bien rodada. Sólo faltaría.
Es una tomadura de pelo de campeonato mundial. O bien el director ha dicho: "voy a hacer un bodrio y verás cómo me aplauden y todo" o es que se cree por encima del bien y del mal. Aunque por encima del mal no lo creo, porque no se puede hacer peor.