Esta película la fui a ver cuando no sabía ni quien era Kubryk, ni Spielberg, ni el niño del Sexto Sentido. Me pareció una película preciosa, lloré como una condenada con la historia del niño robot que su madre (compradora) no lo quiere. Ahora bien, en el final no pillé nada con el rollo de los extraterrestres y salí del cine con una empanda mental enorme.

Siete años después la volví a ver con el mismo prisma de niña y la confusión del final la sigo entender. ¿Qué le pasó por la cabeza a Spielberg? El niño lo hace bien y te lo crees, pero visto lo visto, siempre hace la misma cara de dolor (eh, y la borda). Los efectos especiales y la ambientación en 2001 eran acojonantes, la verdad.

Conmovedora, buen ritmo, buenos actores y una bonita historia.

Mezcla el típico friki que no se jala ni un rosco empleado de una tienda de informática; un hermano de Alec Baldwin (oh noo por favor) más el amigo pesado del protagonista, que resulta ser más friki y simpático que éste; guiones super flipados, pero que los guionistas ya no pretenden que te los tomes en serio; una espía florero super lista y super buena que le hace tilín el friki del principio; algún chiste rayando lo malo y (tachán) eso es Chuck.

La olvidas en el momento que te levantas del sofá.

Ah y en USA el friki ese está en el top 10 de los personajes con más sex-appeal… pues vale.

La serie está enfocada a un claro público adolescente (más femenino que masculino). Si tienes entre 13 y 25 años y eres chica, pues te gustará.

La trama se centra en la vida de unos "pijos" del Upper East Side de NY y sus maravillosas vidas. Intenta ser un poco lo ricos también sufren, pero el espectador se queda con lo guapos que son todos y el exito y dinero que tienen, deseando ser como ellos y pensando que mierda de adolescencia tuvo (o tiene).

Los capítulos son estilo “the OC” y la banda sonora también incluye grupos “indies”. Pero os confesaré por qué le pongo un 7 a Gossip Girl: por ese personaje secundario llamado Chuck Bass. Es un tío que representa que tiene 17 años, su papá tiene un hotel de lujo, se droga y viste con pajarita y batines de seda". Al principio te da un repelús tremendo, pero es el personaje con las mejores frases de la serie y el actor es el único que convence. Lo pintan como el malo, pero cuando él está en escena los guapitos se vuelven invisibles.

Si te gusta la ropa de marca, los cotilleos, una serie poco pretenciosa, con jovénes guapos y ricos esta es tu serie.

El argumento lo improvisan sobre la marcha cada temporada y respecto a los episodios: la primera temporada vale la pena, la segunda ya no saben qué hacer y nunca llevan las situaciones al límite.

Precioso cuento entre Amélie y CSI, con un toque de fantasía. Es una serie familiar, divertida, con personajes carismáticos y buenos actores.

La pena es que esta serie en España nunca triunfará en cadenas generalistas por demasiado "mona" (sin violencia, ni sexo, ni adolescentes).

Destaca: La estética colorista, decorados y vestuario. El guión al estilo que el asesino es siempre el que menos te lo esperas. Lee Pace convence con su tierno personaje.

Cumple los requisitos para entretener, aunque es fácil de olvidar su día de emisión, puesto que lo capítulos son auto-conclusivos.

El mes pasado vi "El gran Lebowski" y flipé, flipé mucho. Pensé que no había nadie capaz de hacer una película tan buena, que al fin y al cabo es la cosa más absurda jamás vista, pero que engancha y divierte una barbaridad.

Vi que estrenaban otra comedia de los Cohen y no me lo pensé ni dos veces en ir, y llegué a convencer a toda mi familia para que fuesen conmigo a ver "Quemar después de leer".

Después de ver la película hay tres patrones de espectadores que opinen sobre ella:

- mi padre (le gustan las de acción y las comedias en plan “El padre de la novia”): se rió una barbaridad con Brad Pitt (y es que rompe los esquemas de guapo y listo)
- mi madre (que cree que los Cohen son muy muy raros) dijo: pues me ha gustado más de lo que me pensaba, eso sí es una chorrada, pero entretiene.
-mi hermano y yo: pensamos que teniendo un reparto de lujo y el precedente del Gran Lebowski (odio comparar películas, pero no pude evitarlo) podrían haber hecho algo mejor.

Notable, pero no sobresaliente. Bajo mi punto de vista los Cohen han intentado gustar a un público más amplio que otras de sus películas, pero en esa maniobra de adaptación a las masas los viejos seguidores se han decepcionado. Aún así, es muy recomendable y con un buen guión. Eso sí, no creo que pase a la historia.

Lo mejor: Brad Pitt y John Malckovich.
Lo peor: George Clooney haciendo de él mismo, pero en versión simpática y luciendo un moreno muy sospechoso.