Nunca me había pasado que una película que me estaba gustado bastante, de pronto haya empezado a decaer vertiginosamente en los últimos 20 minutos hasta terminar calificándola de esperpento.

Algo tiene que haber pasado desde que aparece el agujero: o ha cambiado el director o el guionista se ha metido a la droga o se les acababa el tiempo de producción o ciertamente se han escapado las fuerzas del mal que estaban atrapadas y han dejado en blanco la mente de los que estaban por allí.

Los que la han puntuado alto tiene que haber sido porque no la han visto entera,

Puntuación: (7 + 1) / 2 = 4

Me da infinita rabia que una de las películas más malas que he visto en mi vida lleve en su título la referencia a la película que más venero y respeto.

Es equivalente a que yo me pusiera a arañar una pizarra con la mano derecha mientras toco una pandereta con la izquierda y lo anunciase como "La décima sinfonía de Beethoven".

Hay directores que tendrían que ser llevados a juicio y condenados a cadena perpetua. En este caso concreto, a él y a todo su equipo artístico.

La película prometía al principio, porque está bastante bien ambientada y se han gastado una pasta en vestuario y decorados, pero la trama que se desarrolla aquí para contar las aventuras del tal Percival Fawcett, del que reconozco que nunca había oído hablar, es monótona, plana, sin mucho interés y casi exasperante. ¡Qué sopor: casi 2 horas y media de película para contar lo que cuenta! . Por otro lado, me parece que nos toman un poco el pelo, porque hay ciertos detalles que no se entienden (spoiler).

¡Ay, cómo disfrutarían estos escritores y cineastas anglosajones si Colón, Pizarro, Cortés, Magallanes, ElCano, etc. etc. hubieran nacido en la "Pérfida"!

Bueno, pues lo esperable: ya tenemos aquí el (pen)último producto de la saga, que como es cada vez más habitual, intenta exprimir un poco más al bolsillo y a la paciencia de incautos como yo. No aprendo. Ya sé que el primer objetivo de los productores es rentabilizar su inversión, pero cada vez me da más rabia que cuando han conseguido un éxito merecido como lo fue el que obtuvo la primera parte ( y hasta la segunda) de Insidious, se olvidan al final de la calidad y del espectador. La primera media hora de la película era bastante digna, pero de pronto se va esfumando la trama hasta resultar insoportable y pesadísima.

No quiero ofender a los expertos, pero opino sobre esta película que es aburrida hasta decir basta. Puede ser que yo no disfrute o no valore tanto los aspectos técnicos o novedosos para la época, de la misma manera que la primera película sonora o en color no tienen que ser obras maestras por dichas innovaciones.

Para mí, en el género dramático, la historia que se cuenta, y la forma en que es contada, es el aspecto más importante. Y, sinceramente, el cuento de los tres cerditos me parece más interesante. Es como si considerásemos buena a una comedia que no hace sonreir a nadie o a una de terror que no mete miedo.

La sensación que me ha dejado es como cuando se habla de La Gioconda: todo el mundo jura que es la obra maestra por excelencia en lo que a la pintura se refiere, pero hay que tener valor para quedarse 2 horas seguidas mirándola.

Firmado: un amante sin complejos del séptimo arte.