Vaya por delante que me gustan los experimentos cinematográficos como "el proyecto de la bruja de Blair", "Monstruoso" o la española "REC".

Obviamente, el que busque en esta película de terror los clásicos sobresaltos por una subida de la música, reflejos en los espejos o cosas similares, que se olvide porque el TERROR que provoca esta cinta es de los que te llegan a la primera noche después del visionado de la misma y se queda a oscuras tu casa.

En mi opinión, se excede en el metraje y lo que podía haber sido un mediometraje simplemente perfecto se hace un poco repetitivo por el planteamiento mismo del guión; pero si el objetivo de una película de terror es hacerte pasar MIEDO, objetivo más que cumplido siempre y cuando, eso sí, el espectador venza la posible reticencia hacia un lenguaje cinematográfico distinto al habitual.

Ah, si podeis, intentad verla en versión original porque con el doblaje pierde bastante efectividad al ser diálogos informales que traducidos a veces suenan pelín ridículos.

Un guión enrevesado, unas actuaciones de saldo, un guión truculento y una ambientación que no se la cree ni el que la ha creado dan como resultado un producto pésimo.

Por no repetirme en todos los agujeros del argumento que ya han expuesto otros críticos, mejor ni sigo; pero plantear una historia en la que cualquier replicante puede ser el alter ego de cualquier humano y que nadie sepa quien hay detrás del mismo es como hacer un truco de magia vendándole previamente los ojos a los espectadores para que no puedan ver lo torpe que somos al sacar el naipe de la manga.

Totalmente prescindible y eso que me encanta la futurista recreación de John McLain en alopécico, que conste

Fred Walton es un director especializado desde finales de los 70 en películas de misterio y terror (interesantísima ópera prima su "cuando llama un extraño" de la que recientemente vimos un remake) y aquí factura una película de psicokillers y revisita el "Yo Confieso" de Hitchcock.

La dirección es notable y algunos planos donde la acción queda fuera de cámara, destilan cine puro; pero la verdad es que con el género "thriller" tan perfeccionado y repetido ya, la verdad es que los años le sientan muy mal a esta cinta.

Si sabemos centrarla en más de 20 años atrás y comparándola con el cine que se hacía en aquella época, disfrutaremos de ella

Entretenida como comedia romántica e interesante en la intriga pese a utilizar un recurso narrativo que ya no sorprende a nadie.

Laetitia Colombani está correcta en la dirección y la Tatou pese a ser actriz de dos registros tan sólo, los sabe explotar como nadie. Para ser redonda le falta quizás haber matizado más algunos personajes secundarios pero me pareció muy buena para pasar un buen rato de cine.

Aparte de ser una serie más de investigación criminal, dejar el final abierto para una segunda temporada y que no se ruede jamás es de las cosas más frustrantes que te pueden pasar cuando inviertes 6 ó 7 horas de tu vida visionando una serie televisiva.

Repetitiva y alargada hasta el paroxismo, da tumbos sin que el director o el guionista sepan como cerrar la trama que han ido tejiendo durante 13 capítulos.

No perdais el tiempo. Ved la "desaparecida" española (Patricia Marcos, Desaparecida) que es infinitamente mejor